Nacida en Río de Janeiro el 11 de julio de 1963 y nacionalizada mexicana, Vera André es una artista plástica que proviene de la disciplina del diseño. Diversas instituciones y personajes dedicados a las artes han sido los anfitriones de lo que hoy es su desempeño en distintas expresiones artísticas.
¿Qué te hace feliz?
Disfruto realizando distintas actividades que hacen mi vida más interesante y divertida. Entre ellas están el gozar una buena comida en mis lugares favoritos, realizar recorridos en bicicleta para tener contacto con la naturaleza. Es una manera diferente de apreciar el paisaje y la belleza de nuestro país, mientras convivo con mis amigos.
También me encanta estar con mi familia, con amigos cercanos y adoro la compañía de los animales. Soy feliz cuando me siento relajada y me da paz estar rodeada de personas auténticas. Pero quien me conoce sabe que mi lugar favorito es mi taller. Me hace infinitamente feliz estar ahí, puedo pasar horas leyendo, pintando o haciendo esculturas. Definitivamente el ponerme a crear me llena de una enorme satisfacción.
¿Qué te da tristeza?
Me preocupa el futuro de nuestra especie en el planeta por la explotación animal y de recursos naturales. Nos hicieron creer que todo lo creado está a nuestra disposición, es importante poner los pies en la tierra y despertar. Bajar de esa irrealidad y tener la sana humildad de reconocer que no somos superiores a ningún ser vivo; simplemente tenemos cualidades y ventajas distintas.
¿Cómo cambiarías el mundo?
No se puede cambiar el mundo, creo en un cambio personal. El universo es un misterio y lo veo reflejado en la vida de cada persona. En uno mismo está la decisión de ver más allá y abrir la mente. Prestar atención a esas situaciones inesperadas que al afrontarlas nos transforman, nos sensibilizan y nos fortalecen.
Para ti, ¿qué es trascender?
Trascender no solo es ser excepcional, es aportar tu talento, tus experiencias, enseñar, tener un propósito, desarrollarlo y dejar un legado.
Pienso que primero hay que preguntarnos si estamos haciendo lo que nos apasiona, si estamos desarrollando nuestro verdadero talento y contestar esto con total honestidad.
Para trascender es indispensable seguir tu deseo. Esto es un factor muy importante que podemos observar en artistas, escritores, científicos, arquitectos, empresarios, etc. que han sobresalido y sus nombres han quedado inmortalizados.
¿Qué te da miedo?
A lo largo de mi existencia he tenido muchos miedos; a lo desconocido, a la muerte, a la velocidad, a la altura, al perder mi identidad; muchos los he logrado vencer y otros los estoy enfrentando. Pero solo estando dispuestos a vivir lo inevitable podemos disfrutar, aprovechar el camino y encontrar soluciones.
Mi mayor miedo es vivir sin afrontar y/o aceptar todas esas experiencias que me pertenecen, sin importar su dificultad. Temo negarme el crecimiento que viene con cada reto.
¿Qué es lo que más disfrutas de tu arte?
A lo largo de mi carrera he aprendido a conocerme a través del arte, al pintar con honestidad y permitir que aflore mi inconsciente. La belleza en el arte cobra sentido cuando está inspirada en conceptos trascendentales como el amor y la unidad.
¿Cómo surge el concepto fundamental de tu obra?
Hace muchos años empecé a sentir interés por los temas relacionados con átomos, células, moléculas. Con lo macro y lo micro del cosmos; con todas aquellas conexiones que llegan a suceder para formar todo lo que existe en el universo. Así surgió el concepto fundamental de mi obra. Creo que el saber que estamos conectados nos ayuda a vivir sin juicios, a comprendernos más. De esta manera la igualdad se hace presente y se vuelve natural.
Hablando de conexiones, ¿cómo las representas en tu obra?
Armonía y equilibrio sin que tenga que estar el todo de una manera homogénea.
¿Hay una convergencia entre los símbolos y la abstracción en tu propuesta plástica?
Me inspiro en la naturaleza y me interesa observar cómo todo se conecta dentro de ella. Este fenómeno busco traducirlo y poder plasmarlo de una manera abstracta en mi obra. Lo natural esta en continua repetición y ampliación, siempre avanzando, siempre expandiéndose. Al asociarla con mi obra pienso en el crecimiento intelectual y emocional, en identificarnos con la mente universal.
¿Cómo se relaciona tu proyecto de escultura con el de la joyería?
Aleph es el nombre de esta colección de escultura y joyería, cuyo resultado deriva de la búsqueda incesante por romper con la percepción y uso convencional de lo escultórico.
Normalizar el uso de un objeto artístico donde la joyería es una vía para interactuar con el arte de una manera distinta. Me pregunté muchas veces acerca de las formas, los tamaños, los formatos, usos y su influencia en la percepción humana. De tal forma llegué a la conclusión de que el ser humano debe acercarse a lo esencial, a lo bello para sensibilizarse; el arte no se entiende, se siente.
Aleph es un puente entre la manera de interactuar con el arte y la evocación de sensaciones.
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