Aceites vegetales para la piel, tu mejor aliado de belleza

WELLNESS

Las funciones nutritivas de estos productos totalmente naturales se han aprovechado desde hace años

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Ingredientes como el olivo, la chía y el comino negro son utilizados para crear aceites que benefician nuestra piel. Foto: Archivo

Desde hace siglos hemos aprovechado los beneficios que los frutos y las semillas nos brindan para el cuidado de nuestra piel.

Como parte de los tratamientos de belleza los podemos usar en aceites obtenidos a base de un proceso de presión en frío, método que no altera ni la composición natural ni las propiedades.



Aceite de oliva 

Su uso se remonta a los escritos de Galeno donde se mencionaba como el ingrediente principal en cremas hidratantes

Incluso en la cultura egipcia fue utilizado en la fabricación de perfumes y en productos para limpiar los poros del rostro y evitar la aparición de arrugas. 

Su alto contenido en ácidos grasos naturales y en vitaminas la hace capaz de mejorar tanto nuestra salud interior como la exterior. 

Es muy efectivo contra la piel seca y agrietada ya que brinda elasticidad, además de que ayuda a reconstruir los tejidos dañados de la piel. 

Aceite de aguacate 

Es rico en vitaminas A, D y E y entre sus propiedades están que suaviza, protege, regenera, fortalece y da elasticidad a la piel, tanto que es muy recomendable en preparados antiarrugas.

Se recomienda especialmente para pieles secas y envejecidas y, aunque no inhibe completamente los rayos U-VA y U-VB, se considera protector solar

Si se compra totalmente natural puede mantener sus propiedades intactas como los aceites grasos esenciales Omega 3 y Omega 6. 

Aceite de almendras

El que tiene como ingrediente principal las almendras dulces te ayudará a suavizar y calmar irritaciones cutáneas, además de que favorece la curación de quemaduras superficiales o inflamaciones.

Es ideal para las pieles frágiles por lo que se recomienda a bebés, niños y mujeres embarazadas quienes también podrán prevenir la aparición de estrías.

Otras de sus propiedades que podemos mencionar son que tiene una actividad antioxidante, es capaz de arrastrar la suciedad y, como desmaquillante, sirve para retirar el maquillaje a la vez que nutrimos la piel. 

Aceite de chía 

El aceite elaborado con el que es considerado un superalimento, las semillas de la chía, actúa como hidratante y ayuda a reparar la barrera cutánea.

Desde la antigüedad se usan ya sea como alimento o remedio terapéutico, pero con la tecnología actual se ha dado uso cosmético también. 

Consumirlas ayuda a que el organismo alcance el equilibrio electrolítico, y con aplicarlas se consigue un nivel óptimo tanto de agua como de hidratación.

Por otra parte, la vitamina B3 y el Zinc son útiles para reducir el acné y otros tipos de inflamación en la piel.

Aceite de semilla de uva

Un excelente reparador ya que contiene una gran cantidad de antioxidantes, además de que es el único aceite vegetal que penetra hasta la segunda capa de la piel. 

Podremos aprovechar sus bondades en nuestras pestañas, líneas de expresión, arrugas, pero también para combatir el acné,  los puntos negros, las ojeras y las cicatrices. 

No deja una sensación grasa en la piel, del mismo modo tiene un efecto regulador del exceso de grasa en la piel por lo que es idóneo aplicarlo en pieles grasas o mixtas. 

Otros componentes como el argán, un árbol que crece en Marruecos, la nuez de macadamia, el sésamo y el comino negro son muy utilizados en esta industria por su alto valor nutritivo.

Por mucho tiempo fue su consistencia grasa el motivo de desprecio de algunos, pero hoy es uno de los productos de belleza imprescindible de las rutinas para el cuidado de la piel.

Ahora es muy habitual encontrarlo a modo de sérum o tratamientos concentrados, incluso se usa para la preparación de macerados de plantas.


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  • Adrián Claudio