Daniel Moreno se ha dedicado a estudiar y explorar la sensibilidad estética mediante la pintura, la fotografía, la literatura y la filosofía, con el fin de obtener un mejor desempeño teórico-práctico en cada una de sus obras. Debido a esta formación tan disciplinada, su producción artística ha llegado a gran parte del territorio nacional, así como a Estados Unidos y Turquía. Recientemente, uno de sus trabajos fue el más solicitado en la última edición de SubastArte, la cual se celebra de manera anual en el Museo de Arte de Sinaloa (MASIN).
Desde muy temprana edad, Moreno comenzó a interesarse por la pintura, los colores y el realismo. A los 11 años decidió entrar a clases de dibujo, en las que pudo realizar sus primeros proyectos con modelos en vivo. A la par de esto, surgió en él la interrogante sobre qué es aquello que se conoce como arte, lo que desembocó en su gusto por la filosofía estética y, eventualmente, en su carrera profesional como artista visual.
Para Moreno, el arte es una puerta que nos lleva a descubrir la existencia de otro mundo, ver lo otro del “yo”, de “nosotros” y del sujeto. “Nos abre paso a una existencia desconocida, al misterio y lo real a través de lo conocido”, comenta. “Erróneamente, se cree que el arte es una especie de lenguaje, pero esta no es su función, ya que también es ambiguo. Su propósito es conmover, emocionar, mover, provocar, purificar y revelar a través de los símbolos. El lenguaje resulta limitado, porque no expresa por completo todo lo que sentimos o pensamos. Por eso, la pintura es mi manera de decir lo que las palabras no me permiten. Si todo pudiera comunicarse de una manera u otra, entonces el arte no existiría”.
En su obra, Daniel crea un lenguaje visual mediante la pintura, el cual va de la mano con la técnica y el discurso conceptual. Por tal motivo, el arte figurativo y la abstracción son los elementos que influencian fuertemente su trabajo.
“Me gusta recurrir a la descomposición de objetos porque en eso se basa mi investigación”, añade el artista. “En la búsqueda del arte y también en la exploración de uno mismo. Al ser pintor, pasas mucho tiempo a solas, entonces es imposible que no recurras a la introspección”.
El filósofo y escritor Walter Benjamin es, quizás, quien más ha influenciado la obra de Moreno, sobre todo por la manera en que define al pensamiento estético. “Benjamin se cuestiona constantemente sobre el aura en la obra de arte, la búsqueda de esta y, además, en lo que define la autenticidad. Creo que lo mismo sucede con las grandes interrogantes que se ha planteado la filosofía occidental: ‘¿Por qué existimos? ¿Qué sentido hay en la vida humana? ¿Cuál es la identidad de los individuos?’. El arte y los seres humanos no son deducibles; ambos son anómalos, por el simple hecho de existir”.
Este pensamiento también se expone en la manera en que Moreno descompone lo que pinta sobre el lienzo. “Me gusta tomar objetos que representen algo, principalmente aquellas cosas con las que el ser humano tiene que convivir desde que nace hasta que muere. También, tiendo a introducir la influencia del sonido de lo que retrato, representado por líneas negras. Es así como obtengo el estado más puro de descomposición, pero sin desechar los elementos que componen los objetos”.
Daniel busca que las personas fuera de la industria artística se interesen por este campo, principalmente porque en las exposiciones pueden encontrar una manera de canalizar ciertos rasgos de nuestra personalidad. “Por lo general pasamos por alto las acciones negativas que llevamos a cabo, las ignoramos; pero cuando alguien te lo dice o lo ves reflejado en un objeto, lo comprendes y reflexionas. El arte nos hace capaces de concientizar sobre nosotros mismos, pero también sobre asuntos sociales o políticos”, finaliza.
Actualmente, Daniel Moreno se encuentra trabajando en su tercera exposición individual y busca abrirse paso en la escena cultural de la Angelópolis para la segunda mitad de este año. Su trabajo es representado por la Galería de Arte De Los Cien, así como la galería CUATROSIE7E, ambas ubicadas en el estado de Oaxaca.