Muchos millennials crecieron viendo "Plaza Sésamo" los sábados y domingos por la mañana. Personajes como Abelardo, Elmo, Comegalletas, Beto, Enrique y la rana René, solo por nombrar algunos, fueron un éxito entre los niños. En aquel entonces enseñaban al público joven cómo afrontar muchas tareas sencillas, como lavar los platos, ordenar sus habitaciones, cepillarse los dientes e incluso ayudar en el hogar.
De hecho, a lo largo de los años, el programa ha sido de gran ayuda para los padres a la hora de criar a sus hijos y muchas mamás y papás confiaron en el programa para encontrarlos a mitad de camino a la hora de enseñar a sus hijos. Incluso se demostró que los niños que vieron el programa obtuvieron mejores resultados en la escuela.
A pesar de todos los resultados positivos del programa, hubo un episodio que pareció haber asustado a los niños a su tierna edad. Y como era de esperarse de un programa para niños, el capítulo tuvo que ser baneado de la televisión. Sigue leyendo para conocer todos los detalles.
¿Cuál fue el episodio de Plaza Sésamo que fue baneado?
Todo sucedió en el año 1976 y, por supuesto, nadie esperaba que un programa como "Plaza Sésamo" podría aumentar las pesadillas que los niños pudieran tener, pero este episodio en particular puede haber hecho precisamente eso al presentar a Margaret Hamilton, quien interpretó el papel de una bruja malvada de un extracto de "El mago de Oz."
En este episodio, la bruja pierde su escoba voladora y, mientras la busca, se da cuenta de que David, interpretado por Northern Calloway en ese momento, la tenía y no podía recuperarla porque estaba en manos de otra persona. Entonces, para recuperar el palo de escoba, decide aterrorizar a David.
Cualquier adulto que haya visto este episodio probablemente entendería por qué un niño podría asustarse con la bruja que se representa como verde, descuidada y algo aterradora. Era como si el programa intentara deliberadamente invocar miedo en los niños, un tema que claramente no les parecía controvertido en ese momento.
No obstante, "Plaza Sésamo" se caracteriza por ser un programa de aprendizaje y para momentos de disfrute, así que inicialmente se pensó que su intención era enseñar a los niños a lidiar con sus miedos.
El episodio no pretendía ser una historia de miedo en su totalidad; sin embargo, ese mensaje no fue muy claro inicialmente para nuestra audiencia preescolar. En la década de 1970, los niños no estaban expuestos a tanto contenido mediático como ahora, por lo que descifrar el mensaje no estaba muy claro.
Hubo momentos en el programa que enseñaron a los niños diferentes habilidades. Por ejemplo, la bruja siguió planeando cómo podría recuperar su escoba voladora de manos de David. Intentó muchos intentos por recuperar la escoba, pero fracasó. David, por otro lado, descubrió formas de mantener la escoba alejada de ella hasta que ella se lo pidiera respetuosa y cortésmente.
Este episodio estaba destinado a resaltar estos gestos; sin embargo, el mensaje podría no haber sido tan sencillo como les hubiera gustado a los productores. El programa siempre ha tenido una misión educativa para garantizar que enseña a sus jóvenes espectadores sobre la bondad y la diversidad.
¿Qué tan importante era Plaza Sésamo para los niños?
Los episodios de "Plaza Sésamo" no son más que educativos y la mayoría de los padres se sienten seguros de que sus hijos vean algunos episodios a la vez. Los investigadores también respaldan las afirmaciones de que pasar tiempo con Abelardo y el resto de su tripulación les enseña a los niños lecciones que pueden durar toda la vida. Muchos millennials que eran fanáticos del programa cuando eran niños pueden recordar algunas partes de sus episodios favoritos o un poco sobre su personaje favorito.
"Plaza Sésamo" es tan útil para las generaciones actuales como lo fue para las generaciones pasadas. Aunque hoy en día muchos programas infantiles han intentado replicar un espectáculo como Plaza Sésamo, ninguno de ellos ha hecho un esfuerzo concertado para involucrar a los más pequeños. El programa tiene efectos positivos tanto en niños como en niñas y, curiosamente, muchos beneficios a largo plazo. Los productores del programa hicieron un buen trabajo al atraer a todos los niños, independientemente de su origen étnico, género o situación económica.
El programa, que puede describirse como una herramienta educativa innovadora y pionera, ha sido elogiado por llamar la atención sobre la diversidad y la singularidad que podemos encontrar en todos nosotros. Ser consciente de esto garantiza que cualquiera que haya estado expuesto al programa aceptará mejor a otras personas en lugares como la escuela y el lugar de trabajo.
¿Viste el programa?