Rodeado de vinilos con las icónicas formas del universo de Pedro Friedeberg, nos recibe el CEO de Grupo Presidente, Braulio Arsuaga, en la suite Diego Rivera del hotel Presidente InterContinental, en Polanco.
El motivo de nuestra visita es conocer una intervención que le encomendó a este afamado artista y diseñador mexicano, quien, con muebles, pinturas y murales, ha regalado a ese espacio un nuevo, pero temporal, look.
“Tenemos una iniciativa y nuestra idea es traer y exponer el trabajo de artistas, no solo plásticos, sino de cualquier disciplina”, explica Braulio, y así lo ha hecho con distintas intervenciones artísticas y eventos que suceden en el lobby por donde pasan, aproximadamente, un millón de personas al año.
De este modo es como el hotel se ha encargado de enriquecer la visita de sus huéspedes. “Lo hacemos con el fin de acercar el arte a la gente que no está enterada de los grandes museos que hay en México o que no tiene el tiempo de ir porque viene por trabajo”, comenta Braulio, quien desde niño ha sido entusiasta del arte y hoy es un gran coleccionista.
Su amor por el panorama artístico es heredado de su padre. “Yo estoy convencido de que vivir cercano a estas expresiones te hace más sensible”, comparte el empresario, quien aprovecha cualquier oportunidad para inculcar esta misma pasión en sus hijos. “Cuando estamos de viaje, por lo menos una vez al día recorremos algún centro cultural de donde estemos”, añade.
Aunado a su gusto personal, Braulio también está muy consciente del apoyo que necesitan los creadores para su labor, motivo por el cual, a partir de Fundación Gigante, ha impulsado a distintos talentos y cada intervención que se desarrolla en el hotel también es una ventana para que los coleccionistas puedan adquirir la obra expuesta.