Originaria de Nuevo León, Isabel Herrera vivió desde pequeña en Torreón, Coahuila. Actualmente vive y trabaja en Los Ángeles, California y este 2021 está cumpliendo 20 años como artífice de alta joyería.
GRAN TRAYECTORIA
La diseñadora realizó sus estudios en Florencia, Italia donde fue invitada a colaborar con la prestigiada casa italiana Idrus Gioielli. A partir de ese momento comenzó a participar en diversas firmas internacionales, lo que la llevó a la creación de la propia: IH Isabel Herrera, la cual hoy en día se distribuye en varias partes del mundo.
Además, la joyera cuenta con la certificación por parte del GIA para la clasificación de Diamantes y Perlas. A lo largo de su carrera ha cosechado grandes triunfos y ha incursionado en la industria con diseños exclusivos elaborados sobre pedido, piezas únicas, así como en la restauración de joyas.
“No soy una joyera de producción masiva. En el ámbito de la restauración me siento feliz de poder ofrecer una opción a quienes reciben piezas por herencia o regalo que no se llevan con su estilo o personalidad, por lo que las transformo poniendo un cuidado excepcional. Son pocas las personas que hacemos este trabajo en América Latina, por lo que mi labor ha pasado por la recomendación de boca a boca en clientes de México, Estados Unidos, Canadá, Italia, entre otros”, indica.
DISEÑO Y ESTILO
Su estilo clásico y elegante es como ella misma lo dice: “fruto de una amplia trayectoria multicultural, enriquecida por los estudios que realicé en diseño de joyería y gemología en Italia, Estados Unidos y aquí en México, que queda plasmado en cada pieza, en cada joya, en cada diseño que lleva mi firma”, agrega.
“El estilo que ha caracterizado mis piezas pareciera no tener edad, vigencia o moda, busco llevar la belleza de las formas a un estado de universalidad y perdurabilidad, sin fecha de caducidad”, comenta.
Afirma que trabaja con metales preciosos como plata, oro y platino, sin embargo “el oro es mi metal favorito, por la maleabilidad y la infinidad de maneras de transformarlo artesanalmente, me fascina”, señala.
Su técnica y estilo inconfundible para utilizar sus piezas es el Pavé (un adjetivo francés que significa pavimentado). Se trata de un efecto de piedras muy pequeñas una a lado de la otra, mostrando la perfección del trabajo de construcción.
“Amo esta técnica. Me gusta mucho hacer el degradado de color en el pavé, puede decirse que esa es la huella de mis diseños”, recalca.
Respecto a su estilo, la creadora comenta: “Mis piezas entran dentro de un parámetro de construcción bastante clásico, sin embargo, estoy constantemente promoviendo y mezclando pequeños elementos de tendencia”.
CAUTIVA AL MUNDO
Aunque las joyas son parte de la cultura universal, sobre todo en el mercado femenino, no todos saben apreciar el detalle, la complicación del diseño y el armado de una pieza de joyería.
Por eso, Herrera considera que su clientela se caracteriza por ser parte de la alta cultura: “Esa gente que aprecia el arte, que es conocedora y tiene buen gusto”, asegura.
Isabel está feliz y satisfecha con sus obras, que han cautivado a clientes de diferentes países y culturas, quienes orgullosos portan sus joyas realizadas en orfebrería artesanal.
Finalmente, la diseñadora mexicana señala: “La joyería es valiosa porque perdura en el tiempo, gracias a los materiales que la componen, pero además es como una fotografía, data un momento y un sentimiento. Ejemplos de ello son los anillos de compromiso, el recuerdo de los quince años, los aretes de la abuela o el regalo de los papás. Una joya es el obsequio que perdura de un evento importante, es una tradición, el recuerdo de un momento importante que pasa de generación en generación”, concluye.
IG: @isabelherrerajewelry
CRÉDITOS:
FOTOS: JESÚS MARÍN FOTOGRAFÍA @CHUY_MARIN_FOTO
M&H: ALE CERVANTES @ALE.CERVANTES.STUDIO
Te puede interesar esta entrevista a Andrea Meza, la mexicana ganadora de Miss Universo: