A sus 53 años de edad, Hugo Ollivier Jaik es un destacado atleta y se desempeña profesionalmente como licenciado en Administración de Empresas, además está felizmente casado con Lorena, con quien formó una hermosa familia de tres hijas: Lorena, Sofía y Mariana.
GRAN INQUIETUD
Hugo comenta que durante toda su vida ha practicado ejercicio, pues desde su niñez fue un gran atleta en varias ramas, pero su inquietud lo ha llevado a buscar nuevas experiencias y retos en las disciplinas de resistencia.
Por eso, en 2011 se aventuró a participar en su primera competencia Ironman, motivado además por terminar un evento deportivo tan importante, el cual estuvo bajo la marca IM, la más demandante en distancia.
SUS LOGROS
A partir de este momento, el lagunero ha participado en diferentes Ironman. Especialmente en 2012 estuvo presente en tres mundiales: 70.3 Australia 2016, ChaChattanooga 2017 y South África 2018.
Para el deportista el poder participar en Ironman es “una experiencia de vida, es el día que nunca se olvida”, asegura.
Para Hugo la preparación más fuerte de la competencia inicia tres días antes, bajando todo el estrés muscular. No realiza nada de ejercicio, comieza a comer alimentos con alto contenido de carbohidratos compuestos y se hidrata muy bien. Un día antes recorre la ruta de ciclismo en auto y el día previo realiza solo dos comidas, la última a las 6:00 de la tarde. Después se relaja y repasa el equipo que debe llevar, los alimentos y bebidas, que regularmente son geles y carbohidratos en polvo mezclados con alguna bebida.
Para cada evento, el deportista tiene frases que le inspiran y que va repitiendo en su mente cada vez que siente que se desconcentra, algunas de ellas son: “Ya conoces cada metro de este evento; nunca has probado tus límites; si el que va delante de ti puede, por qué tu no”, señala.
Hugo comparte que ser atleta de alto rendimiento no ha sido tarea fácil, pues además del esfuerzo físico que ha tenido que enfrentar, también ha tenido que aprender a equilibrar su vida en el aspecto deportivo, profesional y familiar.
"Existen momentos complicados, pero con el apoyo de la familia todo es posible, sin lugar a dudas, su apoyo ha sido un gran impulso para mi carrera", refiere.
EN LA CONTINGENCIA
Igualmente, revela que durante esta contingencia sólo ha podido rodar algunas veces y otras trotar en lugares abiertos, sin personas alrededor.
Del proyecto de Iron Help opina que todo lo que sea por ayudar en estos tiempos es bueno, y más aún si este apoyo es para la gente que se juega la vida día a día.
"Me encantó estar apoyando la causa en forma virtual y con mi donativo", finaliza.