La mayoría estamos al tanto del Día de los Inocentes que se celebra a principios de la primavera; bromas entre amigos, titulares juguetones y risas por Internet. Y si bien se celebra en otras partes del mundo, como Europa y Asia, otras regiones, como México, tienen sus propias variaciones.
El Día de los Santos Inocentes es una variación importante; un día que se celebra el 28 de diciembre en muchos países de América Latina y España. Otros días similares en todo el mundo incluyen el “April Fish” en Francia e Italia, donde las víctimas desprevenidas obtienen fotografías de peces pegadas en la espalda; un día de bromas acompañado de fiestas y juegos en Irán llamado "Sizdah Bedar"; y el festival Holi de la India, que da la bienvenida a la primavera con polvo de colores, pintura y bromas pesadas.
Pero, ¿de dónde vino la idea de un solo día para hacer bromas? El origen del día de los inocentes es incierto. Algunos historiadores afirman que la tradición comenzó en 1582, cuando Francia cambió del calendario juliano al calendario gregoriano y el comienzo del nuevo año se trasladó al 1 de enero. Aquellos que fueron lentos en la asimilación todavía estaban celebrando el nuevo año a finales de marzo hasta principios de abril y se convirtieron en víctimas de engaños y trucos, de ahí los "tontos" del 1ro de abril. Otros historiadores relacionan el día de los inocentes con la antigua fiesta romana de Hilaria a fines de marzo o con otras teorías.
Sin embargo, el origen de este día en América Latina es mucho claro. El día de los inocentes en realidad tiene sus raíces en una festividad religiosa comparativamente sombría.
La Biblia relata cómo el Rey Herodes ordenó que todos los niños varones menores de 2 años fueran ejecutados el 28 de diciembre, a fin de asegurar la muerte del profetizado "nuevo rey" o el niño Jesús, que se escondió de la masacre después de una advertencia de un ángel.
Este evento no se registró fuera de la Biblia y no hay documentación histórica que pruebe que sucedió. Aun así, la Iglesia Católica recuerda a los infantes que fueron asesinados, considerados los primeros mártires cristianos, en el Día de los Santos Inocentes el 28 de diciembre.
Ahora la tradición dicta que se les hagamos bromas a los inocentes desprevenidos en América Latina, y al revelar el chiste, hay que gritar: "¡Inocente, inocente!" o recitar el siguiente poema basado en la costumbre de tomar prestadas cosas sin intención de devolverlas: “Inocente palomita, Que te dejaste engañar, Sabiendo que en este día Nada se debe prestar. Palomita inocente, Te dejas engañar Sabiendo que en este día, nada se debe prestar”.
¿Ya la conocías?