Ana Cecy y Eduardo decidieron compartir sus vidas para siempre, por lo que en una ceremonia oficiada por el padre Carlos Martínez Sada, a las 6:30 de la tarde en la iglesia de la Medalla Milagrosa, recibieron un mensaje de unión y realizaron una promesa de amor al decir “Sí, acepto”.
AMAZING DECOR
Al término de la misa, familiares y amigos se trasladaron al salón Fortana, donde todo estaba preparado bajo la coordinación del wedding planner Javier Bredée, que incluyó una elegante decoración de follaje verde con rosas, que colgaba del techo del lugar, así como velas y luces, haciendo marco perfecto con los centros de mesa que eran peceras con bouquets de rosas y fina mantelería.
Un detalle que resaltó en la celebración fue la mesa de los novios, la cual estaba llena de hermosas rosas blancas y follaje.
El matrimonio civil se realizó a las 7:30 de la noche, antes de iniciar la fiesta, y fue la juez Luz Amelia Boehringer la encargada del emotivo momento.
EL MENÚ
Los invitados disfrutaron de diversas bebidas y después degustaron una cena mar y tierra, compuesta por una tabla de quesos finos y jamón serrano como primera entrada, crema de pistache como segunda entrada y el plato fuerte fue camarones con pesto de almendra y filete mignon en salsa de vino tinto con champiñones y atadito de espárragos, todo ello preparado especialmente por el chef Homero Arras.
La música corrió a cargo de un DJ procedente de Monterrey, el cual mantuvo la pista abarrotada durante toda la noche.
DULCES DETALLES
A los costados fue colocada un gran barra de postres, que encantó a todos, con el sello de Charola de Plata, la cual contó con variedad de postres, como brownies, mousse de chocolate, fresas con crema, pastelitos de amareto, vainilla, almendra, mini merenges, pays de limón y mango, profiteroles, así como varidad de snacks saladitos, como cachuates, nueces, tostitos, entre otros más que deleitaron el paladar de los invitados.
Mientras que el pastel de los novios fue una creación especial de My own bake. La celebración se prolongó hasta la madrugada, cuando se sirvió un menú para desvelados de Papa Brother's, en lo que fue un día mágico, lleno de amor y buenos deseos para los nuevos esposos.