Yazmín Rivas Ortiz decidió dedicarse a la Medicina, ya que la considera como una de las carreras con un alto sentido humanitario y de servicio. Durante su infancia vivió de cerca que su abuelo acudía a infinidad de médicos, por lo que observaba y veía todas las cosas con las que trabajaba, lo cual le llamaba mucho la atención. En la preparatoria, su maestro de Ciencias de la Salud era excelente y los llevó por el camino de la práctica, despertando su interés.
GRAN RESPONSABILIDAD
Durante su preparación como especialista en Ginecología, tuvo la oportunidad de ver sus diferentes ramas y en particular le atrajo la Oncología, por la gran responsabilidad que implica diagnosticar oportunamente el cáncer.
"Lamentablemente hay mucha falta de información en cuanto a su detección y tratamiento y creo que se puede mejorar mucho, para disminuir la mortalidad de esta enfermedad y ayudar a las pacientes", indica.
Yazmín estudió en la Facultad de Medicina de la UAdeC, unidad Torreón, posteriormente realizó la especialidad de Ginecología y Obstetricia en la Unidad Médica de Alta Especialidad 23 del IMSS en Monterrey, Nuevo León, y la subespecialidad en Ginecología Oncológica en el Instituto Nacional de Cancerología en la Ciudad de México.
Al regresar a Torreón, la doctora comenzó a desempeñar su carrera en la Unidad Médica de Alta Especialidad del IMSS 71, y en la práctica privada en el Hospital Ángeles Torreón. Además, empezó a dar clase de Oncología en la Facultad de Medicina de la UA de C, donde también fue jefe de Educación Médica y directora de la Clínica de Prevención y Detección Oportuna de Cáncer en Torreón, directamente coordinada por el Instituto Nacional de Cancerología (INCAN). Igualmente, es colaboradora de la Asociación Mujeres Salvando Mujeres, A.C.
"De mi profesión me encanta ver como los pacientes logran vencer la enfermedad, todo el aprendizaje y fortaleza que les deja. Recibo más de lo que yo les puedo brindar. Aunque en algunas ocasiones, en pacientes con la enfermedad avanzada, es muy difícil hablar con la verdad, pero siempre debemos hacerlo con empatía", asegura.
UNA BUENA CAUSA
Yazmín afirma que ha tenido la fortuna de que varias asociaciones la llamen a colaborar.
"Inicié en la Asociación Mujeres Salvando Mujeres, A.C. por invitación de la Dra. Yolanda Jaramillo, primero dando pláticas sobre cáncer de mama, lo referente al tratamiento y las complicaciones del mismo. Me gustó mucho el gran trabajo que realizan con las pacientes, todas las actividades que llevan a cabo y poco a poco me fui involucrando en esta noble y gran labor. Además de tener más contacto con las pacientes desde otra perspectiva", comparte.
La doctora comparte que un ginecólogo-oncólogo estudia todo lo referente a la prevención, diagnóstico, enfoque inicial, manejo quirúrgico en cáncer en el aparato genital femenino, como es el cáncer de ovario, de cuello uterino, de útero, de vagina, de vulva y el cáncer de mama.
Pero también todo lo referente a enfermedades benignas en la mujer, como lesiones pre malignas, infecciones por virus del papiloma humano y tratamiento de todas las lesiones provocadas por este virus.
La meta de la doctora Rivas es "seguir aprendiendo más para mejorar la atención de mis pacientes, aunque detrás de cada logro siempre hay otro desafío", finaliza.