Will Smith, de 53 años, trató de ignorar el mayor escándalo en los 94 años de historia de los Premios Oscar festejando con su familia en la fiesta posterior a la ceremonia de Vanity Fair mientras agarraba su estatuilla a Mejor Actor por su papel en "King Richard".
Y es que el actor declaró poco después que "no se puede invitar a gente de Filadelfia a ninguna parte" al festejar su extraordinaria decisión de irrumpir en el escenario y golpear a Chris Rock en los Oscar por hacer una broma sobre la cabeza rapada de su esposa, Jada Pinkett-Smith.
Smith posó para selfies y fue abrazado y celebrado por la multitud de Hollywood que lo vitoreó y celebró mientras rapeaba sus mayores éxitos, incluidos "Summertime" y "Gettin 'Jiggy Wit It" en el Centro Wallis Annenberg para las Artes Escénicas en Beverly Hills durante las primeras horas de esta mañana.
El festejo de Will Smith
Poco después de que fuera acusado de protagonizar el peor momento de los Premios Oscar y perder la cabeza al atacar a Chris Rock, Will comentó en su propia publicación de Instagram, bromeando: "No puedes invitar a personas de Filadelfia o Baltimore a ninguna parte", mientras compartía una foto de él y su esposa antes de la ceremonia y se refería a su propio lugar de nacimiento en Filadelfia, Pensilvania, y al de su esposa en Baltimore, Maryland.
En la fiesta de Vanity Fair, Jada y sus hijos Willow, Jaden y Trey lo apoyaron después de manchar su primer Oscar con el golpe en televisión en vivo, 20 años después de su primera nominación, y le dijo a la multitud: "Ha sido una noche hermosa, es todo amor".
También se vio a Jada bailando y riendo mientras su esposo actuaba frente a los invitados en la fiesta que incluía a Serena y Venus Williams, Kendall Jenner, Kim Kardashian, Dakota Johnson, Kevin Costner, Chris Pine, Olivia Colman y Natalie Portman. Se esperaba que Chris Rock asistiera, pero cambió sus planes después del ataque, supuestamente porque Smith tenía un séquito de al menos 20 personas que iban con él.
El estado de ánimo jovial de Smith en el evento de Vanity Fair contrastó enormemente con su comportamiento cuando golpeó enojado a Rock antes de volver a su asiento para gritar repetidamente: "Mantén el nombre de mi esposa fuera de tu maldita boca".
Poco después se convirtió en el quinto actor negro en la historia en recoger el premio a Mejor Actor por su interpretación de Richard Williams, el padre que crió a las campeonas de tenis Venus y Serena Williams. El incidente fue tan escandaloso que la audiencia y millones de espectadores inicialmente pensaron que era una broma.
Al recoger su Oscar, las lágrimas rodaron por su rostro mientras se disculpaba con la Academia y la audiencia, pero no con Chris Rock, quien estaba entregando el premio al Mejor Documental. Smith también fue visto siendo consolado y calmado por sus amigos Bradley Cooper y Denzel Washington durante una pausa publicitaria después de que estropeara el mejor momento de su carrera.
La reacción de Hollywood
Actualmente hay muchos llamados entre celebridades y el público para que Will pierda su Oscar debido a su ataque, que viola el nuevo código de conducta de la Academia elaborado a raíz del movimiento #MeToo. Chris Rock, que no ha estado desde el incidente, le ha dicho a LAPD que no quiere presentar cargos.
El actor y cineasta Rob Reiner tuiteó: “Will Smith le debe una gran disculpa a Chris Rock. No hay excusa para lo que hizo. Tiene suerte de que Chris no presente cargos por agresión. Las excusas que puso esta noche fueron tonterías. El actor de Star Wars, Mark Hamill, lo calificó como el 'momento más feo de los Oscar de la historia'". "Agregó: 'Los cómicos de stand-up son muy hábiles para manejar a los que interrumpen. Agresión física violenta... no tanto".
Pero el hijo de Will, Jaden Smith, de 23 años, tuiteó: "Y así es como lo hacemos" después del altercado de su padre en el escenario. También hubo apoyo por parte de Serena Williams y el rapero 50 Cent compartió una foto del momento en Instagram y dijo que no se deberían meter con él.
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