Cuando Sebastián Zurita y su hermano, Emiliano, anunciaron que comenzarían a rodar una nueva serie de comedia en plena pandemia, pocos sospecharon que Cómo sobrevivir soltero se convertiría en uno de los estrenos más exitosos de Prime Video y en un auténtico fenómeno entre el público millennial. Con un humor inteligente y honesto, consiguieron captar la atención de millones de espectadores que han quedado fascinados con las vicisitudes del protagonista (interpretado por Sebastián) y su muy peculiar grupo de amigos...
Tal ha sido el éxito del proyecto que están estrenando una tercera temporada, algo que tiene gratamente sorprendido al actor y productor. “Se dice fácil, pero llegar a tres temporadas ha sido un logro especial, sobre todo por el momento en el que arrancamos con este proyecto, pues nadie sabíamos qué deparaba el futuro. Estos años de trabajo hablan del gran equipo que hemos formado, de la gente que ha conectado con la historia y de nuestra capacidad para innovar en cada temporada, para que no se vuelva aburrida...
A nosotros eso nos llena de orgullo, estamos felices y, sin duda, es una serie que ha impulsado nuestra carrera de otra manera, por lo que siempre estaremos agradecidos con ella y con todas aquellas personas que nos han dado su voto de confianza”, dijo Sebastián para Chic Style.
La historia se centra en un actor con un solo éxito en su carrera, que a punto de pedirle matrimonio a su novia descubre que ella le fue infiel. Esto desencadena una serie de situaciones en las que se cuestiona y al mismo tiempo se hace burla de todo aquello que creemos saber sobre las relaciones de pareja, la amistad, el trabajo ideal y hasta las terapias o grupos de autoayuda.
“Sí, nos burlamos hasta de nosotros mismos, pero no en plan de crear polémica, al contrario. Se puede decir que nuestra meta siempre ha sido que el público se identifique con algún personaje, con las situaciones que atraviesa, y sienta que cualquiera de nosotros podría ser su amigo... Tampoco buscamos decirle a la gente cómo tiene que vivir o darle lecciones de qué está bien, sino mostrar que, incluso, te puedes reír de las cosas malas que te pasan en la vida”.
Momento de transformación
Para Sebastián, uno de los mayores retos que le presentó la realización de esta serie fue mantener vivo el humor durante el rodaje, a pesar de que se llevó a cabo en plena pandemia. “Fue complicado porque, en un principio, no sabíamos si podríamos hacer la serie. Después fue una batalla, pues nosotros contamos una historia sobre la soltería, salir, vivir, andar de fiesta…
Justo por eso no quisimos hablar de la pandemia dentro de la serie, porque la gente buscaba contenidos que nada tuvieran que ver con lo que estábamos viviendo, querían divertirse y dejar de lado el confinamiento, aunque fuera por un momento… Y creo que eso tuvo una reacción súper positiva entre el público que, a través de la historia, revivió la nostalgia de lo que era salir a las calles, andar libre y convivir con amigos”. Personalmente, Sebastián cuenta que vivió el confinamiento de una manera distinta y lo tomó como una oportunidad para lograr una mejor versión de sí mísmo.
“Para mí la pandemia se convirtió en el momento ideal de transformarme y construir historias. Y como la situación nos obligó a hacer una pausa en nuestro trabajo como actores, también fue una etapa más creativa, que me regaló el tiempo para ver qué más podía hacer como realizador... Claro que pasé por momentos de querer abandonarlo todo, tirarme a comer pizza y jugar videojuegos todo el día, pero luego entendí que ya no había textos y que podía trabajar en mí, en mis proyectos, terminar de leer todo lo que tenía pendiente y disciplinarme”.
Fue así como Sebastián encontró el camino a seguir, profesionalmente hablando. “Ha sido interesante todo el cambio bueno que hubo en mí a raíz de la pandemia y ahora, además, agradezco haber sido parte de ese movimiento dentro del gremio, de los que mantuvimos ese espíritu de normalidad y el trabajo de muchas personas”.
Ampliar los horizontes
El reciente aumento en el consumo de contenidos audiovisuales, tanto en televisión como en plataformas, también lo ha llevado a mantenerse trabajando y ampliar sus horizontes, convencido de que, a través de su compañía productora, Addiction House, puede contribuir a hacer la diferencia.
“Eso le ha dado mayor responsabilidad y trascendencia a nuestro trabajo. Se puede decir que se elevó la calidad que debíamos tener en las producciones, porque los espectadores se volvieron más exigentes y comenzamos a competir con proyectos de todo el mundo... Estamos en una etapa muy productiva, pues ya no necesitas de una televisora o una exclusividad para poder trabajar; sin embargo, sí creo que por eso ya no hay la calidad ni el rigor que se necesitaban para lograr un lugar en la industria. Todo ha cambiado, pero nuestra responsabilidad es seguir trabajando”.
Como actor, tampoco se detiene y está por estrenar la miniserie Las flores pérdidas de Alice Hart, rodada en Australia y donde comparte créditos con la actriz Sigourney Weaver. Y sobre el hecho de sobrevivir soltero, Sebastián no lo tiene claro. “Entre más escribimos y leemos las experiencias de la gente en torno a sus relaciones, todos coincidimos en que no hay una receta infalible… El amor llega cuando tiene que llegar, pero las etapas sin pareja te sirven para conocerte más, disfrutar de lo que eres y eso hace que emanes cierta energía que puede resultar atractiva... Primero tienes que estar bien contigo mismo y al final las cosas te van a llegar. Simplemente la soltería no se debe sufrir, sino vivir y disfrutar”.
Fotografía: DAVID SUÁREZ
Stylist: ELIE RODRÍGUEZ
Grooming: DIEGO MURO Y LUIS SANTISTEBAN PARA AMERICAN CREW
Total look: ZEGNA Joyería: CRISTEROS