Dependiendo de cómo lo veas, el Príncipe Harry y Meghan Markle están listos para desatar su verdad en el mundo o causar un daño irreparable dentro de la familia real británica. La próxima semana, los últimos episodios de su documental, "Harry & Meghan" se estrenarán en Netflix y, hasta el momento, la monarquía ha mantenido la calma, siguiendo sus eventos públicos como de costumbre.
Sin embargo, es difícil imaginar que algo bueno fuera a salir de esta docuserie para la familia del príncipe Harry, una familia de la que una vez fue miembro integral. Pero lo que es peor, los Duques de Sussex tampoco pueden pensar que no habrá grandes repercusiones para ellos y sus hijos después de esta semana.
Tres cosas principales podrían suceder: Harry y Meghan podrían ser despojados de su título de duque y duquesa de Sussex (aunque probablemente sea poco probable), Archie y Lilibet podrían permanecer sin título a pesar de ocupar el sexto y séptimo lugar en la línea de sucesión y, lo más controvertido: la pareja podría ser desterrada de asistir a la coronación del rey Carlos.
Ese evento histórico, la primera coronación que tendrá lugar en Gran Bretaña en 70 años, será el día más significativo en el calendario real desde la muerte de la reina Isabel II el 8 de septiembre. Y, de hecho, durante años, el Príncipe de Gales con más años de servicio y heredero aparente, había estado involucrado en los preparativos para su coronación.
Ahora, con la fecha del 6 de mayo confirmada y los planes a toda máquina, la lista de invitados es algo que los cortesanos y el personal del palacio sin duda están analizando. Pero puede ser el Rey quien tenga la última palabra sobre si se extenderá una invitación a su hijo y nuera más jóvenes. Y es que, el Rey sin duda se encontrará en una situación precaria, pues está condenado si lo hace y está condenado si no lo hace.
Sin importar qué tanto hayan hecho y dicho Meghan y Harry desde que dejaron sus roles reales, en el 2020, Carlos se ha mantenido firmemente leal a ellos; nunca ha criticado públicamente a la pareja ni los ha excluido de los eventos familiares (con algunas excepciones).
El Rey permitió que el Príncipe Harry se parara junto al resto de la realeza durante los eventos de duelo por la difunta Reina, incluso le dio permiso al duque para usar su uniforme militar a pesar de haber perdido sus títulos honoríficos un año antes.
Pero el Rey fue estricto en lo que respecta a la inclusión del Príncipe Harry y Meghan en una recepción en el palacio a la que asistieron miembros de la realeza extranjera y líderes de alto nivel: no se les permitió debido a su condición de miembros de la familia que no trabajaban.
Esa separación entre los eventos familiares y los asuntos oficiales puede ser el factor decisivo a la hora de la coronación. Es innegable que ese evento es una ocasión oficial, pero es poco probable que el rey Carlos, deseoso de presentar una monarquía unida al mundo, provoque una nueva enemistad al dejar de lado al príncipe Harry y Meghan.
Aunque, después de esta semana, su mano puede ser forzada. Se ha hablado mucho sobre el tema tabú que sellaría el destino de Harry, y es más que claro que tendría que atacar directamente a su madrastra Camila, la reina consorte, o a su mismo padre.
Esa traición se ha especulado durante mucho tiempo como un paso demasiado lejos, pero el Príncipe Harry, aparentemente interesado en vengarse de sus parientes reales, bien podría hacerlo, especialmente porque en el último tráiler mencionó que su familia estaría dispuesta a mentir por William, pero no a ver por él.
¿Por qué tiene que perder? Él y Meghan ya aceptaron un cheque de pago de 100 millones de dólares, manteniéndose fieles a su promesa de ser financieramente independientes. ¿O están buscando una disculpa de la familia real, deseosos de que sus agravios finalmente sean validados por el palacio?
Es posible que el príncipe Harry y Meghan ni siquiera quieran asistir a la coronación, considerando que cae en el cuarto cumpleaños de Archie. Pero para una pareja que cuelga sus títulos reales en cada oportunidad, asistir a la coronación les da la credibilidad que necesitan para seguir siendo relevantes.
Se ha dicho antes, pero sigue siendo cierto: el príncipe Harry y Meghan, para muchos, solo son interesantes por sus vínculos reales. Por lo demás, son simplemente dos celebridades más en la galaxia de las estrellas.
Si no es en esta serie de seis partes, el Príncipe Harry podría optar por contar todo sobre Camilla y su papel en la ruptura del matrimonio entre Carlos y Diana, en sus memorias "Spare", que se publicará en enero. Después de todo, tendrá que guardar material jugoso para ese libro, de lo contrario nadie lo comprará.
En cuanto a los llamados al Rey Carlos para que elimine los títulos del Príncipe Harry y Meghan, considerando que fueron un regalo de bodas de la difunta Reina, ese movimiento puede resultar ser un paso demasiado lejos.
Pero el príncipe William puede insistir. El Príncipe de Gales tiene un papel integral junto a su padre y es poco probable que William reaccione bien ante las críticas de Harry y Meghan a su esposa, Kate Middleton... aunque hasta la fecha solo la han mencionado una vez, diciendo que era claro que ser frío y sólido dentro de la familia real era algo interno y externo.
El Príncipe William también está muy en sintonía con el sentimiento de las generaciones más jóvenes y el impacto que las críticas del Príncipe Harry y Meghan pueden tener sobre el futuro de la monarquía. Porque eso es lo que más importa, en última instancia. El Rey Carlos y el príncipe William deben salvaguardar la institución, una tarea delicada durante el cambio de un reinado a otro.
Si bien todos los ojos estarán puestos firmemente en Netflix esta semana, la respuesta del Palacio de Buckingham se esperará con ansias, pues no puede salir nada bueno de esto, y Meghan y Harry lo saben; nuevamente serán acusados de ser más divisivos, de quejarse una vez más y de causar un daño potencialmente irreversible a la institución que su difunta madre (a pesar de todas sus fallas) apoyó firmemente.
Entonces, ¿por qué están haciendo esto? Dicen, por supuesto... que todo es por dinero. ¿Tú qué crees?
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