El 2025 está muy cerca y los trabajadores en México podrían ver mejoras significativas en sus derechos laborales, no sólo en lo relacionado con las vacaciones, sino con la adición de 10 días libres al año.
Esta propuesta, presentada en el Senado de la República, surge como parte de una reforma a la Ley Federal del Trabajo (LFT) que busca mejorar las condiciones de quienes cuidan a adultos mayores y a continuación, te explicamos a detalle en qué consiste esta y cómo impactaría a los trabajadores mexicanos.
¿En qué consiste la propuesta de reforma?
La reforma a la LFT que actualmente está siendo discutida en el Senado tiene como objetivo otorgar 10 días libres adicionales a los trabajadores al año.
Sin embargo, estos días no se sumarían a las vacaciones habituales, sino que estarían destinados a una situación muy particular, que es para el cuidado de personas adultas mayores.
En un país como México, el cuidado de los adultos mayores se ha convertido en una prioridad. Muchos de estos adultos requieren asistencia constante para realizar actividades básicas como caminar, subir escaleras o incluso ir al baño.
Ante esta realidad, la reforma busca darle a los trabajadores la oportunidad de atender a sus familiares mayores sin la presión de tener que elegir entre su trabajo y el bienestar de sus seres queridos.
¿Quiénes serían los beneficiarios de estos 10 días libres?
Este beneficio estaría dirigido específicamente a los trabajadores que tienen a su cargo el cuidado de adultos mayores. Según la propuesta, los 10 días libres serían aplicables solo en casos donde el trabajador esté a cargo de una persona mayor de 60 años que requiera atención especial.
De acuerdo con la Senadora Luisa Cortés, de la bancada de Morena, "es necesario que hagamos una reflexión sobre cómo facilitamos el cuidado de los adultos mayores desde el ámbito laboral".
¿Cuáles son los próximos pasos para esta reforma?
A pesar de lo prometedor que suena, esta propuesta de reforma aún debe pasar por diversos procesos antes de convertirse en ley.
Primero, deberá ser discutida y aprobada en el Senado, para luego ser revisada por la Cámara de Diputados. En caso de ser aprobada en ambas cámaras, la reforma podría entrar en vigor en 2025.
Aunque todavía hay camino por recorrer, la propuesta ya ha generado un debate sobre la necesidad de mejorar las condiciones de cuidado de los adultos mayores en el país y cómo el Estado y los empleadores pueden contribuir a ello.