José Rafael Amaya Núñez, conocido en el medio artístico solo como Rafael Amaya, nació el 28 de febrero de 1977 en Hermosillo, Sonora. A la edad de cinco años se trasladó con su familia a la ciudad de Tecate, Baja California, destacándose por la práctica de deportes, especialmente atletismo. También tomó clases de teatro y música. Después de graduarse de la escuela preparatoria, viajó a San Diego, California para iniciar sus estudios universitarios.
VERDADERA VOCACIÓN
No obstante, el mundo del espectáculo lo llamó y realizó su debut en televisión en la telenovela La casa en la playa, donde interpretó a Romualdo Reyes junto a los actores Cynthia Klitbo, Sergio Goyri y Blanca Guerra, entre otros. En 2001 fue invitado a participar en la serie conducida por Silvia Pinal Mujer, casos de la vida real.
Ese mismo año fue elegido como uno de los protagonistas principales de la telenovela Sin pecado concebido, como Cástulo Campos Ortiz, junto a los actores Angélica Rivera, Carlos Ponce e Itatí Cantoral. Luego fue contratado para participar en la telenovela Salomé con el personaje de José Julián Lavalle, como parte del reparto principal, gracias a lo cual fue nominado como Mejor revelación masculina en los Premios TVyNovelas en el año 2002.
Luego volvió a las telenovelas con Las Vías del Amor, junto a los actores Aracely Arámbula, Jorge Salinas y Daniela Romo. En 2004 obtuvo el rol antagónico en Amar otra vez, interpretando a Fernando Castañeda Eslava. Fue hasta 2006 cuando logró su primer protagónico en la telenovela Las dos caras de Ana, junto a la actriz Ana Layevska.
Después de su paso por las telenovelas, en 2004 debutó en cine con la película Desnudos en el papel de Pablo, junto a la actriz Karyme Lozano. Igualmente, compartió créditos con las actrices Ana de la Reguera y Gabriela Platas en la película Así del Precipicio, donde interpretó a Gerardo, un personaje homosexual. Ambas producciones causaron mucha polémica en la carrera del actor, sin embargo, su participación en Así del Precipicio lo hizo obtener una Diosa de Plata (premio que otorgan los Periodistas Cinematográficos de México) como mejor Papel de cuadro masculino.
El año 2006 fue trascendental para el sonorense, ya que firmó contrato con la cadena de televisión de habla hispana Telemundo, después de haber firmado contrato con Televisa, gracias a lo cual pudo realizar varios largometrajes y películas de televisión para otras cadenas y escritores.
Luego de su participación en varias producciones de cine, el actor realizó varios cortos cinematográficos como Se jodió la Navidad, 24 cuadros de terror, Me importas tú... y tú, Días extraños, Pepe & Santo vs. America y Adiós mundo cruel.
Continuó en el cine en las películas La ruleta de los sueños, Amor letra por letra, The Fighter. Asimismo, puso su voz en la película estadounidense Atrocious, después fue elegido para la película Rock Marí, para interpretar a Pablo, compartiendo créditos con los actores Mariane Güereña y Damián Núñez.
En el año 2013 fue contratado para participar en la película estadounidense Kiss of Vengeance y La piel azul.
Del año 2007 y hasta 2009, interpretó a Lorenzo en la serie de televisión Betty, más tarde protagonizó la serie Los Simuladores, junto a Tony Dalton. A la par, obtuvo un rol en la serie televisiva Mujeres asesinas como Óscar y participó en S.O.S.: Sexo y otros Secretos, Hospital Central y Doctor Mateo.
Rafael ha sido nominado a importantes galardones de televisión y también ha sido presentador de varios programas como Premios Tu Mundo y los Billboard a la música mexicana.
ÉXITO INTERNACIONAL
En el año 2010, Rafael Amaya regresó a las telenovelas con un antagónico en Alguien te mira, donde interpretó a Julián García Correa, junto a Danna García y Christian Meier. La telenovela estuvo ambientada en Chicago, pero fue grabada en Miami.
En 2011, volvió a las pantallas con la serie La reina del sur, basada en el libro del escritor español Arturo Pérez-Reverte, la cual tuvo un éxito sin precedentes, recaudando entre 10 y 20 millones de dólares. En este drama interpretó a Raimundo Dávila Parra 'El Güero', como participación especial.
Ese mismo año la revista People en Español lo nombró como uno de Los 50 más Bellos.
Sin lugar a dudas, el parteaguas de su carrera se dio a principios de 2013, cuando el actor comenzó las grabaciones de una nueva serie de televisión titulada El señor de los cielos, en la que llevó el rol principal junto a Ximena Herrera, interpretando a Aurelio Casillas. En esta serie, Amaya encarnó al narcotraficante mexicano Amado Carrillo Fuentes, un hombre que se convirtió en el jefe del cártel de Juárez, y logró corromper a todo el estado mexicano, siendo la producción todo un éxito internacional.
A finales de octubre de 2013, con grandes expectativas, se indicó que El señor de los cielos sería renovada para una segunda temporada, y las grabaciones comenzaron en noviembre de 2013, en Veracruz.
LA INCERTIDUMBRE
En pleno éxito internacional de la segunda temporada de El Señor de los Cielos, Rafael Amaya desapareció de las cámaras, de los reflectores y de la opinión pública, lo que generó gran incertidumbre y fuertes rumores que terminaron en especulaciones.
Y es que el actor de 43 años se perfilaba como el galán del momento. Mucho se rumoró que su repentina desaparición tuvo que ver con la ruptura con su prometida Angélica Celaya. Los motivos del rompimiento se dieron porque la actriz viajó a California para grabar la serie Constantine y él se quedó en México para continuar con El Señor de los Cielos, aunque también corrió el rumor de que ella le había sido infiel con el actor Matt Ryan.
Al respecto, él señaló en entrevista para el programa Al rojo vivo que no iba a revelar la verdad, solo comentó al respecto que “una ruptura siempre duele, es un desgarre. Es un duelo que tienes que vivir”.
También se especuló que Rafael Amaya se 'creyó' el personaje de Aurelio Casillas, algo que le afectó: “El personaje exige mucho y la actuación también. Hay una línea muy delgada en la que debes tener mucho respeto entre la ficción y la realidad”, confesó.
Sin embargo, trascendió que el histrión se alejó de todo para tratar sus adicciones y la depresión que lo aquejaban.
Pasaron tres largos años para que Amaya retomara sus redes sociales y de inmediato se rumoró que regresaría a la teleserie El Señor de los Cielos, aunque Karem Guedimin, manager del actor, aseguró que antes de pensar en que Rafael retome su carrera, es prioridad que se recupere por completo.
"Sí hay muchas propuestas por muchos lados, pero de qué vamos a hacer no te puedo decir algo claro, porque todavía sigue en este proceso y hasta que esté bien es cuando creo que ya tenemos que armar acción de qué es lo que debería de hacer o no", indicó la manager.
Lo cierto es que Rafael Amaya regresó hace unos meses al set, pero para grabar la muerte de su personaje Aurelio Casillas, lo que ha generado todo tipo de especulaciones en torno al futuro de la serie. De hecho, aún no se ha aclarado si El señor de los cielos tendrá una nueva temporada.
La revista People en español presentó una entrevista con Rafael Amaya en la que el sonorense habló del infierno que vivió y que lo orilló a abandonar su carrera y a desaparecer del ojo público: "Básicamente perdí muchas cosas; mi paz interior, el amor que le tenía a mi familia, a mi trabajo… No quería ningún tipo de compromiso con nada ni nadie. Estaba resentido por cosas muy personales y poco a poco me fui sumergiendo en el fango oscuro del alcohol y las drogas”, reveló Amaya.
"Sí me afectó un poco la fama, la verdad, pero ahora ya empiezo con el pie derecho y con todos estos ángeles. No quiero volver a perder el amor que se me ha brindado y la fe que tengo ahorita. Hoy siento que tengo el control de mi vida en mis manos, tengo la paz en mis manos. Soy algo nuevo, volví a nacer”, aseguró a People en español.
Solo resta esperar a que el actor se sienta listo para retomar su carrera y que sus planes se concreten dentro y fuera de los escenarios.