Paty Hermosillo está feliz de ser influencer y madre de cuatro pequeños: Nicolás de 6, Emiliano de 4 y los cuates Luciano y Donatela de un año de edad y disfruta del día a día junto a su esposo Francisco.
Estudió actuación en Actor Studio de Los Angeles, pero su hermano Ángel le decía que debía ser influencer, que lo intentara, sin embargo no se animaba, ya que no le encantaba la idea de ventilar su vida a mucha gente que no conocía, pero "poco después me di cuenta de que necesitaba recuperar ese yo, y no solo ser la mamá de y esposa de, quería volver a actuar, a lo mío", agrega.
GRAN PASIÓN
Pronto Paty se convenció de que ser influencer le vendría bien, pues era trabajar desde su casa y un poco como conducción de televisión, así que lo probó, vio que funcionó y se quedó con esa actividad.
En sus redes sociales la influencer comparte la unión familiar y una maternidad natural, real, simple y divertida. Ella describe que combinar su papel de madre, esposa e influencer "es como cuando pintas un cuadro, llega alguien, le pinta encima y hace su marca".
“Me di cuenta que muestro mi vida y poco a poco voy conociendo a mis seguidores y conectando con ellos de una manera muy amena y padre. No son desconocidos”, afirma.
"Cuando promociono un producto o grabo algo de mi vida en general y ellos interrumpen, yo lo permito porque así les dejo ser parte de, porque de hecho son parte de. Es inevitable grabar algo sin ellos, esa es mi maternidad, llena de niños, llena de movimiento ruido y vida", destaca.
MAMÁ CON ENCANTO
De cómo se define como mamá dice que “como una mamá imperfecta, sin embargo, sé que por siempre estaré para mis hijos en las buenas y, sobre todo, en las malas, que nunca les faltará amor en mi casa y que pueden ser ellos mismos, libres y saberse amados y aceptados. Soy una mamá que los apoya en mejorar sus defectos, pero sobre todo en exaltar sus virtudes, para aprovecharlas y saber que todos son diferentes y muy especiales para mí. Pienso que criando seres humanos felices, sencillos y buenos se puede mejorar el mundo".
"Siempre les repito eres libre, feliz y muy amado y también que yo siempre voy a estar para ti, aunque no me puedas ver”, dice.
Paty confiesa que su vida ha cambiado con la llegada de sus hijos, su independencia, su tiempo, su cuerpo, todo. Pero que lo vale completamente.
"Nicolás fue mi primer amor, aprendí a seguir mi intuición y me hice más fuerte. Él es un ser muy valiente con un corazón enorme, que me ha enseñado que cada reto en la vida es un paso más a trascender como ser humano", aporta.
"Con Emiliano aprendí a soltar, a confiar y a entender que ellos me van guiando a mí primero, para luego saber cómo guiarlos a ellos. Él es muy carismático y muy agradecido, que me enseña el valor de cada detalle en la vida", dice.
"Luciano me trajo tanto amor, tanto apapacho. Es sumamente cariñoso, por lo que aprendí que un abrazo y un beso son una inyección de fuerza, poder y curación infinita, y que a veces ¡con eso basta para el corazón!", refiere.
"Donatella me sorprendió desde un inicio, verla como una bebita tan delicada, tan tierna y bonita, y a su vez tan fuerte, tan poderosa y tan guerrera. Aprendí que como mujeres nos tenemos una a la otra y que por siempre seré su aliada, su amiga, su apoyo y su equipo, su compañera y su mamá. Que no hay unión más grande que la de una mamá con su hija y aunque la veo tierna, la percibo tan fuerte. Y creo en mí, porque creo en ella, sé que ella puede con todo", revela.
Su meta es conectar con sus seguidores, para llevar juntos una maternidad más fluida y poder disfrutarla, saber que si de algo sirven las redes sociales es para conectarse con otras y saber que no están solas en este camino que puede ser como tan crudo y solitario como hermoso, divertido y lleno de amor.
5 TIPS PARA MANTENER LA CALMA EN CASA
1. Pon horarios y crea una rutina.
2. Sigue tu instinto de mamá y papá, escucha tu corazón pues solo tú sabes qué necesita tu hijo. Puedes buscar una opinión o dos o un guía, pero elígelo desde tu corazón.
3. Suelta, deja ser, no fuerces, disfruta, agradece. ¿Qué más da que se ensucie? ¿Qué más da que rompa un huevo al cocinar? ¿Qué más da cuando rayan la pared? La crianza respetuosa me parece muy adecuada para los niños.
4. Disfruta con ellos, porque todo tiene arreglo menos el tiempo.
5. No relaciones sus emociones con el alimento. Por ejemplo, cuando un niño esté triste o enojado, no le des helado ni una paleta para calmarlo, porque después toda la vida asimilarán tristeza y enojo con alimento. Es mejor dejar que aprendan a calmarse solos.
Instagram: @patyhermosilloo
TIKTOK: @patyhermosilloo
YouTube: Paty Hermosillo
Créditos:
Fotos: Javier Navéjar fotógrafo @javiernavejar33
Maquillaje: Alondra Garnica @alondra.garnica
Styling: MOMA Beauty Center @moma.beautycenter
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