Tras un controversial encuentro con la justicia, el príncipe Andrew finalmente ha aceptado dar una declaración bajo juramento ante los abogados de Virginia Giuffre, la mujer que lo está acusando de agresión sexual y que ha puso en la mira a la monarquía británica.
Esta declaración se dará en un tribunal de Londres, aparentemente el 10 de marzo. Esta noticia se da luego de que los abogados de Giuffre mencionaran a través de un comunicado que esperaban "poder confrontar" al acusado "por sus negaciones y sus intentos de culpar" a la víctima.
De acuerdo con el diario Daily Telegraph, también se busca interrogar a Shuki Walker, una mujer que afirma haber visto al príncipe Andrew en un club nocturno de Londres con una joven en el momento de la supuesta agresión, además de Robert Olney, un antiguo asistente del príncipe Andrew.
El príncipe Andrew tiene hasta el 14 de julio para presentar su declaración ante los tribunales, en caso de que no exista un acuerdo el juicio podría comenzar entre septiembre y diciembre de 2022.
La demanda que enfrenta el hijo de la reina Isabel II es de carácter civil y fue emitida en una corte de Nueva York, en esta se le señala de abuso sexual cometido hacia Virginia Giuffre cuando tenía 17 años.
Giuffre, quien ahora tiene 38 años, fue víctima de Jeffrey Epstein y su cómplice Ghislaine Maxwell, quienes la obligaron a sostener relaciones sexuales con el príncipe Andrew. El hijo de la monarca siempre ha negado estas acusaciones y pidió defenderse ante un jurado.
La reina Isabel retira todos los títulos al príncipe Andrew
Hace unas semanas el príncipe Andrew fue despojado de sus títulos militares y los patrocinios regales por la misma reina Isabel, su madre, quien dijo que tendrá que enfrentar esta demanda por agresión sexual como un "ciudadano privado".
La postura del Palacio de Buckingham fue tomada como un intento de desprenderse de la controversia que el caso está generando y para mantener la estabilidad de la corona británica que anteriormente se ha visto afectada por polémicas.
A través de un comunicado oficial emitido por sus canales digitales, la monarquía le dio la espalda al hijo de la reina Isabel.
"El Palacio de Buckingham dijo en un comunicado esta tarde: "Con la aprobación y el acuerdo de la Reina, las afiliaciones militares y los patrocinios reales del Duque de York han sido devueltos a la Reina. El duque de York seguirá sin asumir ningún cargo público y está defendiendo este caso como un ciudadano privado", se lee.