José Genaro Medrano, a sus 32 años, se destaca por su visión juvenil, sólidos valores familiares y una fe inquebrantable en Dios; considera el esfuerzo, el trabajo y la honestidad como los pilares más importantes en su vida, fundamentales para alcanzar cada una de sus metas y objetivos.
Médico cirujano de profesión, pero con un corazón profundamente humanitario, se preocupa por contribuir a la igualdad y mejora de oportunidades, buscando hacer del mundo un lugar mejor.
"Desde niño soñé con ser médico y siempre he mantenido esa convicción. La salud de todas las personas y la empatía son aspectos fundamentales que nos ayudan a avanzar como sociedad", comentó.
A lo largo de su vida, Pepe ha enfrentado diversos desafíos, siendo el más significativo su experiencia en la línea de frente durante la pandemia de COVID, atendiendo a pacientes con valentía y compromiso, a pesar de conocer los riesgos involucrados. "Muchas personas se recuperaron, pero otras quedaron en la dura batalla contra la enfermedad", expresó.
Su convicción de ayudar al prójimo se refleja en su participación activa en diversas causas, especialmente en el cuidado de perros callejeros que requieren alimento, medicinas, y atención médica, así como esterilizaciones y adopciones, principalmente en el municipio de Lerma y sus alrededores.
"Realizo estas acciones con mi familia de manera voluntaria y con recursos propios en la zona de Amomolulco. Lo más gratificante es que algunos vecinos se han sumado, aportando su tiempo para esta noble causa", destacó.
Su pasión por los animales lo ha llevado a adoptar perros, gatos e incluso una tortuga en situación de abandono, integrándolos a su familia. Considera que cambiar la vida de un animal ha transformado por completo la suya.
Por ello, Pepe considera de suma importancia la gestión actual en México, abogando por nuevas medidas que promuevan el desarrollo social, el cuidado animal, la protección del medio ambiente, el impulso a emprendedores, la mejora de la salud y la seguridad para que todos vivan con tranquilidad y se sientan protegidos.
Convencido de que cada persona juega un papel crucial en la política actual, destaca que todos conocemos los problemas existentes, especialmente la inseguridad y la corrupción. "Nuestra forma de actuar como ciudadanos debe ser diferente, buscando siempre un cambio verdadero", argumentó.
Como joven preocupado por la situación actual, valora la importancia de los programas sociales, la educación de calidad y la apertura de capitales internacionales para fomentar el empleo y el desarrollo del país. La misión de Pepe es ser la voz que promueva la seguridad, el apoyo y la cercanía con las personas a su alrededor, así como defender a aquellos que no pueden hacerlo por sí mismos. Su objetivo es contribuir para que vivan dignamente. "Mi misión es ser la juventud que busca un cambio por aquellos que nunca son escuchados", concluyó.