Ser mamá, profesionista y emprendedora al mismo tiempo requiere de mucho trabajo, sin embargo, pese a esa situación muchas madres salen adelante y son un ejemplo de éxito, así lo refleja Norita Izaguirre, quien nos abrió su corazón para compartir con todos nosotros esta experiencia de ser madre de un niño con cardiopatía congénita.
Norita Izaguirre, es originaria de Tampico, Tamaulipas, nació el 23 de septiembre de 1992, es heart mom y abogada con maestría en Derecho con Énfasis en Constitucional con mención honorífica y excelencia académica donde le fue otorgado un premio estatal por haber sacado un promedio de diez. Es fundadora del negocio The Mirror Shopy, cofundadora de Lexilegal, un despacho jurídico virtual de propiedad intelecutal. Pertenece a la Asociación de Mujeres Mexicanas Jefas de Empresa A.C. Zona Sur de Tamaulipas como socia Jr a fin de pertenecer a un conjunto de ideales en los actos empresariales. Así mismo tiene la oportunidad de desempeñarse como Subdelegada de la ONG Jóvenes por los Derechos Humanos Tamaulipas que busca difundir la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Actualmente forma parte del grupo Fuerza Joven, un grupo de jóvenes políticos que se encargan de realizar acciones sociales a favor de la comunidad y por supuesto no puede faltar su blogger life, su hobby que se convirtió a su vez en trabajo como medio publicitario.
Convertirse en mamá de Ponchito, ha complementado la vida de Norita, pues es su motivación de día a día y quien le saca la mejor sonrisa.
“Ponchito es un alma libre, es un niño plenamente feliz, bailador, divertido, extrovertido, seguro, valiente, positivo que nos enseña a vivir y a disfrutar cada momento. Es único Ponchito Corazón Valiente”, expresó.
Para ella el ser madre de un niño con cardiopatía congénita es conocer el amor a través del dolor. Es dormir en sillas de hospitales, saltarte comidas, viajar por horas para encontrar a los mejores doctores, es llorar por miedo y por alegrías. Es convertirte en una enfermera o doctora experta en la condición de hijo. Es ser fuerte, determinante y tomar decisiones en hacer cambios en nuestras vidas. Es creer en los milagros, aceptar la voluntad de Dios y disfrutar todos los días de la vida de tu hijo con cardiopatía como si fuera el último.
“Lo que más admiro de Ponchito es su fuerza y ganas de estar en esta vida. De que no importa la cantidad de veces que pisemos hospitales, citas, doctores, estudios o medicinas, su fortaleza y actitud ante la vida es única y de admirarse”, mencionó.
Durante su embarazo, Norita fue muy disciplinada con las indicaciones de su doctor, sin embargo su embarazo lo vivió en las aulas, siendo estudiante de Licenciatura en Derecho.
“Tuve un embarazo normal, sin malestares, sin preocupaciones, desconocía le enfermedad con la que nacería Ponchito. Estoy convencida de que los tiempos son perfectos, por algo Dios no quiso que me enterara de su enfermedad desde el embarazo ya que no podía hacer nada hasta que naciera, por lo que me dedique a estudiar y a sacar adelante mis materias”.
Sus días como mamá son acelerados y divertidos. Para ella, los minutos con su hijo valen oro, por lo que administra muy bien su tiempo para después del trabajo, llevarlo al parque, disfrutar en casa o llevarlo a la playa.
“Los días como mamá también son cansados, a veces tristes por la situación de Ponchito pero muchos felices, con esperanza de que Dios me permita tenerlo todos los días de mi vida”, señaló.
Definitivamente la mejor experiencia de ser mamá para la blogger, es ver como una personita que viene de ti va creciendo, forjando su carácter, desarrollándose plenamente, y el verlo feliz e independiente es lo más bello.
Para la emprendedora no ha sido tarea fácil el balancear su vida profesional y con su faceta como mamá, pero ha encontrado el balance perfecto para pasar momentos únicos junto a su hijo Ponchito.
“Tengo muchos momentos favoritos, pero los mejores son cuando vamos a la playa, le encanta ver el mar, jugar en la arena y bailar limbo. Me encanta despertar a su lado y jugar a la guerra de cosquillas sus carcajadas me llenan el alma”.
Destacó que la clave del éxito como mamá y como mujer es tener un equilibrio en todos los ámbitos de la vida. Una mujer lucha por sus sueños personales, profesionales, laborales y a su vez se esfuerza en ser la mejor madre para sus hijos, por lo que considera que mientras nos encontremos con una buena salud mental, espiritual y personal nos podemos desenvolver y lograr todos nuestros sueños.
Actualmente Norita comparte su día a día en su cuenta de Instagram, @ norita_izaguirre, en donde cuenta con más de 49 K de seguidores.
“Me encanta! Es mi hobby y trabajo favorito. Tengo de todo tipo de seguidoras, las que no son mamás pero quieren serlo, las que no son mamás y no quieren serlo y las que ya son mamás. Constantemente me escriben pidiéndome recomendaciones y también son muy buenas dándome tips, es una comunicación mutua. Lo que más me hace sentir plena al ser una mamá influencer es la cantidad de mamás que me escriben que pasan por situaciones de enfermedades de sus hijos y trato de animarlas, darles mis recomendaciones y hasta he canalizado y ayudado a varias con doctores. A veces tengo buenas noticias y a veces me llegan esos mensajes que me rompen el corazón cuando me agradecen el apoyo, pero me informan que sus bebes se fueron al cielo. Siempre que esté en mis manos, yo ayudaré a cuantas mamás se me acerquen, que mi plataforma siempre sea un canal de esperanza”, indicó.
Desde que Ponchito sale en las historias de Instagram de Norita, nos atrapó por completo, con su alegría y carisma. Además, entre los unboxing, y sus travesuras cada vez son más lo seguidores que se unen a su cuenta.
“Ponchito siempre nos saca sonrisas y carcajadas con sus ocurrencias y bailes. Considero que Ponchito es un reflejo de todos los esfuerzos que he hecho como madre para darle la mejor calidad de vida pero sobre todo para que sea feliz y divertido”, expresó.
Nos compartió que una de las mujeres que más admira, es a su abuelita Noriney Acevedo de la Garza, quien para ella tiene el currículum y corazón más grande que una mujer pueda tener.
“Es un claro ejemplo que una mujer puede ser esposa, madre, empresaria y altruista al mismo tiempo. Ella vive para servir al prójimo y definitivamente sigue dejando su huella a lo largo de los años con todas las acciones sociales y fundaciones a las que ha pertenecido”.
Su vida como mamá en estos 7 años ha dado un cambio radical, en el que nunca deja de ser la misma persona. Al convertirse en mamá, trasciendes, cambias, muere tu individualismo y nace la maternidad que cambia tu vida para siempre.
“Estos 7 años de ser mama han hecho madurar, aceptarme, desarrollar nuevas habilidades pero sobre todo saber que aunque exista cansancio no me doy por vencida”, destacó.
Antes de concluir Norita, nos compartió un emotivo consejo a las mamás de niños con cardiopatía.
“Me acuerdo que un día llegué al consultorio con el cardiólogo de Ponchito, llorándole que no veía avances en mi niño, que si los de su edad ya hacían tal cosa, que me la pasaba llevando a Ponchito a terapias, clases, maestras especiales, medicinas, estudios, que estaba cansada. El Doctor solo se me quedó viendo y me escuchó y al final me dijo, ¿Sabe que es lo que realmente necesita Ponchito? Y yo no Doctor por favor ya dígamelo, a lo que me contestó: “Que su mamá vaya al psicólogo.” Ahí entendí todo. Mi mejor consejo es que acepten la condición de sus hijos, que no los comparen, que agradezcan por sus vidas y que disfruten a sus hijos como si fuera el último día de sus vidas”, finalizó.
“NO ES QUIÉN ERES, ES QUIÉN VAS SIENDO”.
NOTICIAS RELACIONADAS