Después de 3 años de inactividad, Anonymous regresó en medio de las protestas contra la policía estadounidense por la muerte de George Floyd. Sin embargo, en esta ocasión, el grupo de hackers se fue en contra de muchísimos artistas, como Naomi Campbell, Will Smith, Woody Allen, y más.
En un video que ya fue borrado, Anonymous amenazó con sacar diferentes secretos a la luz y, desde entonces, las revelaciones han afectado a muchísimas personas, incluyendo al Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a la realeza británica, y diferentes celebridades del mundo.
Después de publicar este video, el grupo de hackers expuso parte de la lista negra de Jeffrey Epstein. Los nombres incluyen a personas de renombre como: Ivanka Trump, Naomi Campbell, Chris Evans (el host de televisión, no el actor de Marvel), Mick Jagger y Will Smith, entre muchos.
La lista, con cientos de nombres, se cargó a través de un archivo en sus redes sociales bajo el nombre de "El Pequeño Libro Negro de Jeffrey Epstein", y en ella expusieron a todas las personas que asistieron a fiestas organizadas por Jeffrey Epstein, donde tenía a las niñas menores reclutadas.
El caso de Jeffrey Epstein fue tan impactante que Netflix lanzó un documental al respecto. Después de que se demostró su culpabilidad, se dice que el empresario se quitó la vida en lugar de gastarla tras las rejas, aunque hay algunos que no creen que se suicidó, sino que fue asesinado para evitar que revelara información sobre los demás.
Aunque aparecen nombres como Ivanka e Ivana Trump, el grupo de ciberactivistas también lanzó una amenaza directa contra el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, cuyo nombre también apareció en la lista mencionada anteriormente y que también ha sido acusado de violar a menores. También se alega que tiene un historial de crimen organizado, y que Rusia tiene todas las pruebas necesarias en su contra.
Además, Anonymous eliminó el sitio web de la policía de Minneapolis, hackeó la radio de la policía de Chicago para pronunciar "Fuck the Police", y expuso a la familia real por haber estado involucrada en el asesinato de la princesa Diana.
Su mensaje es que la policía sigue arrestando a los manifestantes en lugar de arrestar a criminales reales, y si siguen así, saldrán más secretos pronto.
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