Montserrat Oliver: “En mi mente tengo 30 y me comporto de 15”

Personajes

Montserrat Oliver cumple cuatro décadas de carrera este año y reflexiona sobre el paso del tiempo y el cómo se siente mejor que nunca.

COMPARTE ESTA NOTA
Montserrat Oliver nació el 13 de abril de 1966 en Monterrey y comenzó su carrera en comerciales televisivos.

Cuando Montserrat Oliver llega a un lugar, la energía cambia por completo. Casi de inmediato surgen risas y comentarios de asombro, ante las increíbles anécdotas que comparte y que solo unos pocos, como ella, pueden presumir.

La vez que saltó de un avión, la cena con tal personaje, el encuentro con aquella planta alucinógena... Montserrat puede contarnos de todo, porque lo ha hecho casi todo.

“Traigo las rodillas raspadas porque participé en un reality de desafíos, pero no me las quise maquillar porque la gente ya sabe cómo soy, mejor que se vean así”, dice Montserrat despreocupada, mientras elige la ropa para esta sesión de fotos.

Con la simpatía que la caracteriza, la modelo y comunicadora platicó con CHIC Style sobre su aportación a los medios y, a punto de celebrar cuatro décadas de trabajo, nos compartió cómo ha vivido este proceso.

La conductora cumple 40 años de trayectoria y 57 de edad este año.

“Ha sido un viaje maravilloso y demasiado rápido. Todavía no lo puedo creer. Cuando me dicen que ya son 40 años de carrera, pienso que han pasado pronto y que es una profesión que me ha dado mucho. Principalmente, me ha enseñado a respetar y a aprender de cada ser humano que conozco”, asegura.

Y añade: “Sobre lo que yo he podido aportar al medio, diría que espontaneidad, honestidad, sinceridad, congruencia y verdad. Jamás he mentido. Siempre me he dirigido con transparencia, incluso sobre mi vida personal, y quizá he ayudado al empoderamiento de la mujer, con un discurso de aceptación y visualización”.

El techo de cristal

Según nos platica, conseguir un lugar en una industria controlada por hombres, ha sido el reto más grande al que ella se ha enfrentado. 


“Lo más complicado, al principio, fue escuchar frases como: ‘Estás bonita, no hables’, o ‘Solo eres modelo’... Todas esas ideas a las que se enfrentan las mujeres en un mundo de hombres y que siguen estando ahí, con todo y que los tiempos han ido cambiando. Afortunadamente, muchas ya hemos demostrado nuestro valor, tenemos cargos cada vez más importantes en muchas empresas, pero, por desgracia, sigue siendo un país machista y tenemos que trabajar el triple para que nos valoren”, afirma.

Es por ello que Montserrat ha tenido que ser más valiente que las demás conductoras de su generación. Atreverse a hacer lo que otras no, para destacar y romper así el techo de cristal que, asegura, sigue predominando.

“Porque no ha desaparecido y, desafortunadamente, no va a desaparecer nunca. Es cierto que ahora hay más aceptación y, en general, se puede hablar con mayor libertad de muchos temas. Se aceptan un poquito más ciertas cosas y se dan más oportunidades, por lo que parecería que vamos muy avanzados, pero, de repente, sucede algo y se vive un retroceso. Entonces dices: ‘¡no lo puedes creer!’, pero bueno, ahí vamos, poco a poco”, comenta.

Aventurera y arriesgada

Aunque no se define como una feminista total, sí es una mujer a la que le gusta compartir un mensaje de sororidad y, principalmente, de auto superación.

Este año, además, la conductora celebra cuatro años de matrimonio con la modelo Yaya Kosikova.

“Entendí que la única limitante que tienes y lo único que te puede parar de no hacer lo que tú quieres, eres tú misma y es tu mente. Por ejemplo, cuando me ven haciendo cosas extremas (en programas como Las hijas de la madre tierra o Reto 4 elementos), me dicen: ‘¿Te quieres morir o qué?, ¿Por qué haces cosas tan arriesgadas?, ¿Que no te gusta vivir?’... Y yo siempre respondo que, al contrario, ¡Me encanta vivir! Pero siento que vencer los miedos siempre te lleva más lejos”, dice.

“Estoy poniendo un ejemplo muy radical, pero hablo también figurativamente, para que, quienes tienen miedos, se los quiten. ¿Qué te puede pasar? El no ya lo tienes y equivocarte no importa, porque al rato pasa. Siempre todo pasa. Pero es mejor intentarlo y fracasar, que quedarte con las ganas. Y no es por hacerme la que nunca he fracasado, pero los veo como aprendizajes y creo que, entre más acumulas, mejor te va en la vida y más aprendes”, agrega.

La belleza cambia

Considerada una de las mexicanas más bellas, hoy, a los 57 años de edad, Montserrat valora de distinta manera las cualidades físicas, aunque admite que siempre han servido para abrir puertas.

“Pienso que la belleza es un conjunto de muchas cosas. No nada más es físico. Se trata también de inteligencia, tenacidad y sensibilidad... Por supuesto que la belleza física te abre puertas. Al principio, cuando empiezas, obviamente la puedes usar como un arma muy poderosa para manipular o conseguir lo que quieres, pero luego, ya que creces y maduras, no es algo tan importante”, confiesa.

En su caso,  ha redefinido conceptos y mira la belleza propia como un cúmulo de vivencias. 

“Es que la belleza cambia. Personalmente siento que se ha hecho mayor, por todos los conocimientos, experiencias y por el colmillo que le va creciendo a uno (bromea). Pero también, estando en un medio como este, uno entiende cuando se va haciendo grande. Ves que ya no tienes la juventud de antes, la piel ya no es igualita a la que tenías y, aunque estos cambios te pueden dar cierta inseguridad, te refuerza el aprendizaje que has ido acumulando en todos estos años... ¿Cómo utilizo la belleza actualmente? Para abrir puertas y ayudar a otra gente, para luchar por nosotras las mujeres, contra las injusticias, para conseguir darle voz a otros, y para crear cosas nuevas”, comparte.

El precio que hay que pagar

Montserrat considera que aún hay muchas asignaturas pendientes en la agenda de equidad de género, aunque apunta que hay temas más urgentes que otros.

“Obviamente que no haya maltrato. Que puedas hacer lo que tú quieras, sin enfrentarte al machismo. Ponerte lo que quieras y que no digan que, porque te vestiste así, te violaron... Básicamente se necesita que nos tomen en serio y nos den un lugar, que nos vean más allá del sexo o solamente como un objeto. Porque nos objetizan la mayor parte del tiempo. Para muchos hombres somos solo un aparato reproductivo, cuando en realidad tenemos mucho más que ofrecer... Entonces, nos toca luchar para ser felices, hacer lo que en verdad deseamos, como estudiar una carrera o tener un cargo importante, y aportar para crecer con libertad en la sociedad”, explica.

Según nos cuenta, vivir bajo las propias reglas y en absoluta libertad, también implica un precio.

“Creo que toda elección te cuesta y hay que estar dispuestos a pagar. Personalmente creo que el costo ha sido faltar a muchos eventos familiares, perderme del nacimiento de algunos de mis sobrinos y, como te digo, trabajar el doble para que me creyeran... A lo mejor primero me contrataban para darle color a Televisa, o a la sección de deportes, pero luego empecé a hacer notas que me atraían más a mí. Quizá eran más arriesgadas, pero eso me llevó a tener cierto respeto y admiración de mis compañeros, y a que me siguieran llamando... No fue sencillo, pero creo que ya demostré que no soy la rubia tonta que solo sirve de adorno”, comenta.

"Quiero que en las fotos aparezcan mis rodillas así como son, raspadas. Todos saben que así soy", nos dijo durante la sesión de fotos.

Una niña en cuerpo de mujer

Actualmente, para Montserrat la vida tiene otro ritmo. Ya no siente que esté en una carrera continua por destacar de las demás, aunque sigue trabajando sin descanso. Cada semana conduce el programa Montse & Joe, junto a su inseparable compañera Yolanda Andrade, y próximamente estrenará un nuevo proyecto de desafíos entre famosos.

Por si fuera poco, también está explorando su faceta empresarial, con el lanzamiento de H.Moissan, una línea de joyería y diamantes, que recientemente presentó junto a su pareja, la modelo de origen esloveno Yaya Kosikova, con quien acaba de celebrar cuatro años de feliz matrimonio.

Sobre esa energía que transmite y que parece ser inagotable, Montserrat reflexiona. 

“Soy una niña atrapada en el cuerpo de una mujer. Me encanta jugar. No me gusta tomarme la vida tan en serio, soy muy infantil en muchas cosas, pues pienso que eso es lo que le da sabor a la vida... Cuando ves todo tan seriamente, te conviertes en una persona muy aburrida y monótona. En cambio, yo soy una mujer muy dinámica, que no sé estar en paz, porque me encanta crear cosas de la nada y me fascina trabajar... Creo en superarme todos los días, me esfuerzo por ello y me llevo al límite, para siempre tratar de sacar lo mejor de mí”, asegura.

El sabor a la vida

Esa es quizá la razón de que siempre se mantenga tan vital y luzca mucho más joven de lo que sugiere su acta de nacimiento. “Últimamente me han preguntado mucho cuál es mi receta para mantenerme bien y yo les digo que nada más es no poner odio en tu corazón... Sinceramente creo que ayuda mucho ver lo positivo de todo y buscarle el sabor a la vida. Aunque también hay otras reglas básicas. Por ejemplo, nunca me duermo maquillada y, si puedo, voy con el dermatólogo, me pongo mis cremitas en la noche y toxina botulínica de vez en cuando”, confiesa.

“Y es que me gustan las cosas que no son muy invasivas, porque soy medio miedosa, pero, en general, creo que el auténtico secreto es que nunca me he creído la edad que tengo. Jamás. Es más, volteo y siento que la vida ha pasado muy rápido y la he disfrutado tanto, me la he bebido tan rico y tan bonito, que nunca me lo he terminado de creer”, añadió.

Plenamente realizada, personal y profesionalmente, Montserrat asegura que aún quedan muchos sueños por cumplir.

“Ahora estoy viviendo un momento muy pleno, feliz, y con ganas de seguir haciendo muchas cosas. Porque cumplí 57 años, pero en mi mente tengo 30... aunque me comporto como de 15 (bromea)... Hay muchos planes de trabajo y seguramente encontraré otros más, porque soy muy inquieta. Siempre estoy involucrada en las causas por los animales o viendo cómo puedo ayudar a la gente que me rodea, si puedo aportarles algo, pero principalmente me gustaría seguir levantando la voz y luchando porque seamos como somos, nos aceptemos sin etiquetarnos, seamos felices y nos respetemos los unos a los otros. Nada más”, concluyó.




Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.