Una mujer muy trabajadora y profesional así es la famosa Mónica Garza, periodista y conductora originaria de ciudad Reynosa, Tamaulipas. Nació un 12 de abril de 1966. Proviene de una familia de políticos, pues su papá es un ex secretario general del PRI.
Cuando tenía la edad de nueve años se mudó a la Ciudad de México junto con sus padres, debido a la profesión de su papá.
Como cualquier ser humano, Mónica Garza ha tenido días difíciles y ha sufrido y luchado para lograr sus metas. Durante su adolescencia vivió el divorcio de sus padres, situación que la llevó a tener trastornos alimenticios, y para salir de ese bache recurrió a terapia que hasta el día de hoy lleva a cabo.
A entrar a la universidad decidió estudiar la carrera de Estudios Latinoamericanos en la UNAM, en la Facultad de Filosofía y Letras; después decidió irse a vivir a París dos años y años más tarde estudió la carrera de periodista.
Su primer trabajo fue en la política, en 1991, durante la Cumbre Iberoamericana, entrevistando a los presidentes de Sudamérica, y esta oportunidad aprendió a valorar la vida y a él no se puede.
Mónica Garza inició su carrera como conductora a través del programa Ventaneando con Paty Chapoy en 1998, posteriormente fue nombrada conductora titular del programa En medio del espectáculo y jefa de información del programa Caiga quien caiga.
Mónica Garza también condujo una de las generaciones de La Academia, La Generación de la luz. Sin duda una mujer trabajadora y profesional, que no ha perdido su personalidad y su esencia por trabajar en televisión.
Ha tenido la fortuna y el privilegio de contar con grandes personalidades como sus maestros, sobre todo la periodista más controvertida del espectáculo, Paty Chapoy y el productor Epigmenio Ibarra.
Después le propusieron conducir el programa Un nudo en la garganta, trabajo periodístico que en un principio realizó Paty, pero poco a poco la fue soltando hasta el momento que Mónica realizaba las entrevistas sola, acto que no termina de agradecer ya que así fue como la Chapoy le abrió camino a su alumna más avanzada.
De ahí se desprendió el famoso programa Historias Engarzadas, proyecto que dirige en su totalidad, que le ha dado grandes satisfacciones, lecciones y excelentes amistades. Se trata de un programa que presenta al televidente la biografía de diferentes personalidades del mundo artístico, político e intelectual que contengan situaciones y anécdotas entretenidas e interesantes que el público desconoce.
Hasta el momento ha entrevistado a más de doscientas personalidades, como Silvia Pinal, Raúl Velasco y Capulina.
Su mayor motivación es su hija Matilda, y no ha sido fácil para la periodista equilibrar su vida profesional con la personal.
A pesar de la experiencia que tiene la conductora ha confesado en varias entrevistas sentir nervios al tratar con personalidades como Jacobo Zabludovsky, que le impone respeto.
Para Mónica la vida apenas comienza, tiene muchos planes y sueños, entre los que se encuentran seguir creciendo como periodista, encontrar la felicidad a nivel personal y profesional.