Aunque es normal que las hijas se parezcan más a sus mamás, el caso de Mía Rubín es completamente diferente. Y es que, si bien tenemos que aceptar que tiene rasgos muy similares a su madre, Andrea Legarreta, definitivamente nadie podría negar que es hija del cantante de Timbiriche, Erik Rubín.
Después de dos años de matrimonio, Andrea y Erik están pasando los mejores años de la familia que construyeron. Si es que no lo sabías, ambos son los orgullosos padres de dos hermosas jóvenes: Mía Rubín, quien cumplirá sus 18 años en unos meses, y Nina Rubín, quien acaba de cumplir 16 durante su viaje a Japón.
Si bien la pareja ha estado en el ojo del huracán desde hace muchísimos años, sus hijas apenas están descubriendo una carrera por cuenta propia. Por ejemplo, Mía, quien es la mayor, ya ha liberado su primer sencillo como cantante y, más recientemente, ha seguido a su padre en gira, enamorando a todo México con su voz.
Pero por si el talento musical no hubiera sido suficiente, tenemos muchas razones para creer que Mía heredó más genes de su papá que de su mamá, muy a pesar de que muchos sugieran que la pequeña es idéntica a su mamá.
Afortunadamente, la familia es muy unida y es posible encontrar fotos de Mía y Erik posando juntos en la cuenta de Instagram del cantante. Solo de esta manera podemos ver que los genes han sido heredados perfectamente y la jovencita tiene facciones similares a las de su papá.
Si bien es imposible sugerir que sean idénticos, Erik y Mía comparten la misma sonrisa y hay comentarios que recalcan que las similitudes son muy grandes, sin importar que la joven tenga el cabello largo y tenga una complexión de piel mucho más clara que su papá, lo cual tiene mucho qué ver con la diferencia de edad.
Y por si el parecido físico no fuera suficiente, Mía y su papá comparten muchísimos gustos en común. Para empezar, la cantante siempre ha sentido una cercanía más profunda con su papá y su carrera, muy a comparación con su mamá, pues la joven ha revelado en entrevista que no quiere seguir los pasos de su mamá.
En una entrevista con un programa nacional, Mía reveló que, aunque el trabajo de su mamá es admirable, no es algo que esté en sus planes: "No me veo a futuro haciéndolo, pero nunca voy a decir nunca, pero sí se me da la oportunidad, pues claro que estaré ahí para hacerlo", dijo sobre la conducción.
Por su parte, Mía ha seguido los pasos de su papá en la música: “Yo empecé mi carrera en una obra musical a lado de mi hermana, entonces me encanta actuar, he hecho doblajes, tal vez los papeles no cambiarán por completo porque yo si estoy enfocada por completo a la música, pero sí me gustaría estar en una serie o película”, agregó.
Como era de esperarse, su padre fue una gran influencia para empezar en el mundo de la música, y por ende se ha convertido en su pasión más grande. "Lo que me hace diferente es que sí, tal vez esté cantando igual que mi papá, pero tengo mi propia manera de hacerlo y a pesar de que sea diferente, él me sigue encaminando, al igual que mi mamá."
Y desde que hizo su debut musical hace un par de años, Mía nos ha demostrado que, si bien tiene un estilo muy único, gran parte de ello está inspirado en el propio estilo de su papá que, con el paso de los años, se ha vuelto más rockero que popero en la moda.
¿O qué no?