Jennifer Lopez y Ben Affleck han estado bajo la atención pública debido a los rumores que los rodean sobre un posible divorcio que los estaría persiguiendo, pero ¿cuáles son las condiciones legales que hubo entre ellos antes de casarse?
Después de casi dos décadas de su primer intento fallido de caminar juntos hacia el altar, la pareja ha vuelto a llamar la atención del público por los rumores que hay en torno a su relación actual y un posible distanciamiento. En particular, los rumores y especulaciones sobre su acuerdo prenupcial han vuelto a surgir, alimentando aún más la narrativa de esta pareja de celebridades.
El acuerdo prenupcial de Jennifer Lopez y Ben Affleck
Una de las cláusulas más comentadas y que sigue siendo tema de debate en los medioa de comunicación, es la supuesta petición de Jennifer de mantener un mínimo de cuatro relaciones sexuales a la semana.
Según informes, esta cláusula fue incluida en su acuerdo prenupcial actualizado, causando revuelo y curiosidad entre sus seguidores y la prensa.
En una entrevista con Vanity Fair en 2003, Ben negó la existencia de dicha cláusula, afirmando que no se puede legislar el comportamiento y que la confianza es fundamental en cualquier relación.
"No puedes legislar el comportamiento. Tienes que creer en la persona y creer que puedes enfrentar los desafíos que enfrentas", declaró Affleck.
Esta postura refleja un enfoque más tradicional y realista sobre la naturaleza de los acuerdos prenupciales y las relaciones personales.
Cláusulas de infidelidad
Además de las controversias sexuales, el acuerdo prenupcial de 2003 también incluía una cláusula de "no infidelidades", con la que se buscaba protegerlos a ambos y estipulaba que en caso de separación, cada uno se quedaría con su propio dinero, a menos que Ben fuera infiel.
Esta cláusula fue interpretada por muchos como un intento de Lopez de asegurarse de que su pareja se mantuviera fiel, ofreciendo así una garantía emocional y financiera.
Una fuente cercana a la pareja explicó que esta cláusula permitía a Jennifer tomar el control de la situación y establecer sus propias reglas.
"Lo que ella quiere es que Ben le dé alguna garantía de que nunca la engañará. Al hacerlo de esta manera, puede salvar las apariencias tomando el asunto en sus propias manos y estableciendo su ley", dijo la fuente al Daily Mail.
A pesar de todo lo que pasa con el acuerdo, parece que su relación está gravemente afectada, por lo que posiblemente podríamos ser testigos de las consecuencias legales muy pronto.