El empresario, fundador y director de PetStar, el Ingeniero Industrial Jaime Cámara Creixell, se dio cuenta de que el valor del reciclaje iba más allá de un asunto material, por lo que desde 1994 empezó un nuevo proyecto, el cual consistía en buscar nuevas tecnologías para lograr que una botella fuera 100% sustentable, un objetivo que hoy se ha logrado gracias a PetStar. Hace algunos años Estados Unidos era el líder en el mercado de reciclaje y China apenas empezaba con el negocio del PET, mientras que México parecía no tener esperanza.
Para ser lo que somos ahora, tuvimos que mirar hacia donde nadie más había mirado porque para tener éxito y poder reciclar las botellas de PET teníamos que darles servidumbre a los recolectores de residuos, fue así como después de alcanzar este objetivo nos convertimos en el recolector más grande de América Latina y nos abrimos paso a la siguiente meta; reciclar las botellas de una manera eficiente y volverlas parte de una economía circular, comentó.
“Gracias a la inversión de Arca Continental, Coca-Cola de México y otros embotelladores, se logró dar el siguiente paso para reciclar las botellas y convertirlas nuevamente en otras botellas”. PetStar, la planta de reciclaje de PET grado alimenticio más grande del mundo se encuentra ubicada en Toluca, Estado de México. Cuenta con ocho plantas de acopio las cuales recuperan alrededor de 80 mil toneladas de envases y reciclan 3 mil 100 millones de botellas al año, lo que equivale a llenar 2.4 veces el Estadio Azteca, produciendo 51 mil toneladas de resina de PET reciclado grado alimenticio que se utiliza para la fabricación de nuevos envases dentro de la misma Industria Mexicana de Coca-Cola, logrando una economía circular del envase.
“Ante los retos ambientales que tenemos hoy en día como el cambio climático, debemos buscar soluciones innovadoras en beneficio de las futuras generaciones, por lo que el Modelo de Negocio Sustentable de PetStar no solo está basado en retirar los envases del entorno y darles nueva vida, si no que en el camino debemos trabajar para generar un valor social, ambiental y económico”. Para lograr este concepto, PetStar se ha planteado objetivos ambientales muy ambiciosos para 2020 que están alineados a la Agenda 2030 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y a los Objetivos de Desarrollo Sostenible, pues pretende mitigar en un 100% su huella hídrica, así como su huella de carbono, ser una empresa con cero fugas de plástico y cero residuos.
PetStar atiende a 1,200 puntos de recolección a lo largo de la República Mexicana llamados Socios Acopiadores con quienes se trabaja a través de una perspectiva de derechos al acercarles programas de educación, alimentación y salud de diversas instituciones, además de buscar su desarrollo y formalización. A través de estos puntos se da empleo de manera indirecta a 24,000 personas que participan en la recolección de PET y otros materiales reciclables. También trabaja con los derechos de la infancia mejorando sus condiciones de vida de las niñas y los niños, hijos de 700 pepenadores y recuperadores de PET.
“Lo que ha logrado PetStar a través de sus acciones es inspirar a otros a actuar sustentablemente y queremos seguir haciéndolo porque la gestión adecuada de los plásticos y de los residuos en general requiere una visión de responsabilidad compartida entre sociedad, autoridades y empresas, donde cada quien se comprometa verdaderamente a hacer lo que le toca, en el caso de los ciudadanos me gustaría decir que siempre que tengan una botella en la mano la dispongan correctamente a través de los cuatro pasos: Vaciar, Aplastar, Cerrar y Depositar y de esta manera permitirán que ese envase se convierta en uno nuevo, ayudando al medio ambiente y a miles de familias mexicanas”.
La planta cuenta con un Museo Auditorio, un espacio amigable con el medio ambiente el cual abre sus puertas para promover la educación ambiental entre los diversos sectores de la sociedad, en el cual reciben alrededor de 14,000 visitas al año. Este lugar funciona a través de un sistema de captación de agua pluvial, paneles solares y sus muros están fabricados de tierra lo cual permite que su temperatura se regule evitando así el uso de aire acondicionado y obteniendo un ahorro considerable de energía eléctrica. También cuenta con una azotea verde donde pueden observarse plantas de diversas especies, mismas que se encuentran contenidas en charolas elaboradas a partir de las tapas y etiquetas que se separan del proceso de reciclaje.
PetStar es una empresa con una filosofía de excelencia y cuenta con las certificaciones como ISO9001, ISO14001, ISO22000, OHSAS18001, Industria Limpia a nivel estatal y federal, Empresa Socialmente Responsable, Súper Empresas, Operation Clean Sweap, así como las adhesiones al Pacto Mundial y Carta de la Tierra.