Cada año Halloween y uno de los disfraces más esperados es el de Heidi Klum. Este 2022, obviamente, no fue la excepción y la modelo, reconocida por su amor hacia esta época del año, presumió dos disfraces con el mismo objetivo que impactó, tanto en su propia fiesta, como en redes sociales.
La modelo, de 49 años, no defraudó este año, haciéndose irreconocible mientras se deslizó en un espeluznante disfraz de gusano rojo acanalado para su 21ª fiesta anual de Halloween en Sake No Hana en Nueva York, antes de quitarse la 'botarga' y presumir un nuevo atuendo que nos robó el aliento.
Llevando su disfraz a otro nivel, la bomba rubia verdaderamente canalizó a un gusano, especialmente porque su esposo, Tom Kaulitz, fue disfrazado de un pescador, con todo y caña incluida. Tom lucía botas de pescador negras y un mono sobre una camisa amarilla de manga larga a cuadros. El guitarrista de Tokio Hotel finalizó su look con un sombrero de pescador.
En la misma alfombra roja, mientras Heidi hacía su magnífica aparición, la modelo terminó rodando por el suelo y dando entrevistas mientras las personas se hincaban para poner el micrófono cerca de sus labios.
La única forma de saber que era Heidi debajo de tanto plástico era a través de su rostro, muy a pesar de que la única parte visible de su rostro eran la nariz, la boca y los ojos. De hecho, como parte del disfraz, la modelo llevó lentes de contacto color amarillo.
Siendo un disfraz completamente imposible para usar durante mucho tiempo, Heidi Klum eventualmente se quitó el asombroso traje de gusano y disfrutó de su propia fiesta en un body transparente con botas marrones.
Sin embargo, para que pudiera seguir contando como disfraz, la modelo se aferró a su máscara facial de gusano, aunque muchos la compararon con unas tiras de tocino gracias a su peculiar color.
La rubia bomba dejó caer sus voluminosos rizos rubios y felizmente posó con su otra mitad, su hija y el resto de sus invitados. El body, que era semitransparente, contó con un patrón de brillos para que las partes de su cuerpo más íntimas estuvieran cubiertas, pero aun así mostró mucho de su piel.
El look deslumbrante de la supermodelo alemana tuvo una dura competencia este año, ya que su hija de 18 años, Leni Klum, fue por primera vez al evento, mostrando su físico esbelto con un disfraz de "Catwoman" de látex negro.
El disfraz de Leni también constaba de un tocado con orejas de gato y botas negras a juego. La prometedora modelo lucía glamorosa debajo de su máscara facial, con lápiz labial rojo y pestañas dramáticas.
La joven estrella no se dejó intimidar por el disfraz viscoso de Heidi y se la vio dándole un dulce beso a su madre frente a los fotógrafos. Sin embargo, más tarde la vio salir corriendo de la fantástica fiesta de su madre de la mano de un amigo vestido como músico de mariachi.
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