En 2008, cuando Heath Ledger murió por una sobredosis en su habitación, el actor estaba en la cima de su carrera. Había sido nominado a un Oscar en 2005 por su interpretación de Ennis Del Mar en "Brokeback Mountain". En 2007, fue uno de los 7 actores que interpretaron a Bob Dylan, en otra actuación ganadora de premios en "I'm Not There", y por supuesto, estaba por presentar su magnífica interpretación como 'The Joker' en "The Dark Knight" de Christopher Nolan, un papel que le traería aclamación generalizada y aún más fama.
Lamentablemente, no experimentaría nada de eso, ya que murió trágicamente por un inconsciente cóctel de pastillas mientras la segunda película de Batman estaba en postproducción, a los 28 años, el 22 de enero de 2008. ¿Qué fue lo que pasó? Era el mejor momento de su carrera, y el peor para simplemente darse por vencido.
Meses antes de su muerte, mientras trabajaba en la que sería su última actuación en "The Imaginarium of Doctor Parnassus", Heath Ledger tuvo lo que algunos de sus compañeros de reparto y amigos describieron como "neumonía ambulante". Ledger tenía muchos problemas para dormir y estaba mezclando un cóctel de pastillas para dormir y otros medicamentos recetados en un intento desesperado por descansar un poco.
Lamentablemente, las pastillas no ayudaron mucho. El amigo de Heath Ledger, Gerry Grennell, vivió con él durante un tiempo en los últimos meses y le dijo a la revista People: "Lo oía deambular por el apartamento y me levantaba y decía: 'Vamos, hombre, vuelve a la cama, tienes que trabajar mañana'. Él me respondía: "No puedo dormir'."
Sin embargo, la espiral descendente de Heath Ledger había comenzado meses antes cuando su pareja y madre de su hija de dos años, Michelle Williams, terminó su relación y lo echó de su casa en Brooklyn. Williams nunca ha revelado por completo el motivo de la ruptura, pero la mayoría de los informes indican que estaba harta del estilo de vida y el abuso de drogas de Ledger.
Después de su ruptura, Heath se mudó a un apartamento en SoHo, en Manhattan. Fue ahí donde tomaría la combinación letal de drogas que causaría su sobredosis accidental. Cuando se mudó, Ledger estaba trabajando en lo que se convertiría en el papel definitorio de su carrera como El Joker en "El Caballero de la Noche". Su inmersión en el papel y su compromiso casi loco con el personaje claramente le quitó mucho, física y mentalmente. Quería que su actuación fuera impredecible.
Su director, Christopher Nolan, dijo sobre su actuación: "Mucho de lo que hacía Heath, lo discutía conmigo, pero en términos, me daba pistas sobre lo que iba a hacer, o hablábamos un poco sobre eso y yo intentaba ser una audiencia para él o una especie de medida con él de lo que estaba haciendo. Pero en gran parte se trataba de imprevisibilidad, y creo que quería jugar sus cartas un poco más cerca del pecho."
Fue durante el rodaje de "El caballero de la noche" que la enfermedad y el insomnio de Ledger empeoraron, y sus allegados se preocuparon más por su estado mental. Por su parte, su hermana, Kate, de quien era muy cercano, no está de acuerdo con echarle la culpa a la película: "Honestamente, fue todo lo contrario. Tenía un sentido del humor increíble, y supongo que solo su familia y amigos cercanos realmente lo sabían. Pero se estaba divirtiendo. No estaba deprimido por The Joker."
Kate también fue una de las últimas personas en hablar con Heath Ledger, en una llamada telefónica la noche antes de que lo encontraran muerto por una combinación de oxicodona, hidrocodona, diazepam y doxilamina. Ella dijo que no mostraba signos de depresión y no había ningún indicio de que pudiera tener tendencias suicidas.
Como es el caso en cualquier situación como esta, ha habido y probablemente siempre habrá especulaciones sobre la sobredosis de Heath Ledger. Preguntas como si la sobredosis fue a propósito, ¿estaba tratando de suicidarse esa noche oscura en el invierno del 2008? La respuesta de la mayoría de las personas cercanas a él ha sido un rotundo "no".
Su padre culpa a su hijo por su propia muerte, pero no cree que haya sido un suicidio, diciendo: "Fue totalmente su culpa. No era de nadie más, él fue por ellas. Las puso en su sistema. No puedes culpar a nadie más en esa situación. Eso es difícil de aceptar porque lo amaba mucho y estaba muy orgulloso de él. Su hermana le habló por teléfono la noche anterior para decirle que no tomara los medicamentos recetados con las pastillas para dormir. Él dijo: 'Katie, Katie, estoy bien. Sé lo que estoy haciendo.' No habría tenido ni idea."
Hoy, más de una década después de la trágica muerte de Heath Ledger, su legado sigue cobrando importancia. Por supuesto, ganó un Oscar póstumo por su brillante interpretación de El Joker en el "Caballero de la Noche" y en los años posteriores, los elogios para Ledger con ese papel y otros, solo se han vuelto más fuertes.
El legado de su sobredosis también vive en el trabajo que ha hecho su padre y, lamentablemente, en cómo ha afectado a Michelle Williams y su hija. Williams ha parecido recientemente haber encontrado la paz con su trágica muerte, incluso si es posible que nunca lo comprenda del todo. Y aunque su hija era muy pequeña para entenderlo, según los reportes ha crecido en una linda jovencita, formando un lazo muy cercano con su padre.
Como muchas de las estrellas ardientes más brillantes, como River Phoenix, Philip Seymour Hoffman, Amy Winehouse y muchos otros, Heath Ledger se apagó muy rápidamente debido a las drogas, pero su legado nunca lo hará.
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