No hay muchos actores en la historia del cine tan influyentes o populares como Harrison Ford. A lo largo de su carrera, Ford ha aparecido en algunas de las franquicias y éxitos de taquilla más grandes de todos los tiempos, incluida la trilogía original de “Star Wars”, “Blade Runner”, thrillers como “The Fugitive” y “Air Force One”, un puñado de Películas de “Jack Ryan” y, por supuesto, la serie de películas de “Indiana Jones”, donde interpreta al querido personaje del título.
Con una presencia robusta y taciturna, y un sentido del humor seco y un exceso de talento, Ford ha sido durante mucho tiempo una de las caras más reconocibles de Hollywood. Sin embargo, su fama no llegó de la nada; es por eso que recordamos el antes y el después de este gran actor.
Sus orígenes
Harrison Ford nació el 13 de julio de 1942 en Chicago. Su padre, Christopher Ford, era un católico irlandés, mientras que su madre, Dora Nidelman, era una judía rusa. Ford era un niño tímido y gentil en Maine. Ser Sufría de bullying en la escuela, pero al igual que Indiana Jones, el personaje que interpretaría en el futuro, no se vengó y mantuvo la calma. Se graduó de la escuela en 1960 e inmediatamente se inscribió a una Universidad en Wisconsin. En esta escuela, su vida tampoco fue tan afortunada. No era particularmente deportivo ni sobresaliente en sus estudios.
La depresión llegó en su primer año. Dormiría durante el día, dejaría de asistir a clases y reprobaría la mayoría de las clases. El futuro era sombrío, pero encontró un nuevo campo en el que se había encariñado tanto: la actuación. No solo descubrió su talento en esta nueva actividad, sino que también encontró a su novia de la universidad, Mary Marquardt, quien se convertiría en su esposa en 1964, un año después de que dejó la universidad porque no estaba calificado para graduarse. La pareja tuvo dos hijos, Benjamin y Willard.
Buscando una carrera en la actuación, se mudó a Los Ángeles, California, donde tuvo una entrevista para el Programa "Young Talent". Después de la entrevista, se fue sin esperar obtener el trabajo. Sin embargo, cuando bajó al baño, uno de los funcionarios vino corriendo hacia él y le ofreció un salario de $150 dólares por semana. Lo tomó y apareció de inmediato en tres papeles muy pequeños. Su papel un poco más importante fue en un thriller titulado "Dead Heat on a Merry-Go-Round" en 1966. Esta película también fue su primer debut en la pantalla grande. Sin darse por vencido, continuó obteniendo pequeños papeles, pero lamentablemente pasó desapercibido y recibió solo papeles típicos como vaqueros o hippies. Peor aún, fue despedido del programa y recibió malas críticas del gerente. Ford pronto necesitó dinero desesperadamente y de repente de la nada intentó la carpintería para mantener la vida de su familia. Sorprendentemente, sin ninguna experiencia, lo hizo bien y se concentró en hacer trabajos como construir escenarios y decorados.
El hombre que le cambió la vida
Después de su primer papel acreditado en la pantalla en “A Time for Killing de 1967”, Ford tuvo el mejor momento de su vida con un poco de ayuda de Fred Roos, director y productor de casting. Después de aparecer en el exitoso “American Graffiti de 1973” (dirigido por George Lucas, un cineasta que el público de todo el mundo pronto conocería por su nombre), Ford no podía permitirse el lujo de sobrevivir solo con su salario de actor y reanudó su trabajo como carpintero para mantener a su familia. Pero Roos tenía otras ideas.
A pesar de que Lucas no quería que nadie, desde "American Graffiti", audicionara para Star Wars, Roos, que esperaba que Lucas dejara que Ford leyera la película, lo contrató para que hiciera un trabajo de carpintería en el lugar donde se realizaban las audiciones, y mientras estaba construyendo una puerta, Ford se topó con Lucas. Como Roos dijo más tarde, todo el encuentro fue "fortuito".
De asistente a estrella
Fred Roos pudo haber llevado a Harrison Ford a la sala de audiciones, pero aparentemente, el casting de Star Wars de Ford todavía estaba en el aire. Inteligentemente, Roos sugirió que Ford leyera junto a actores que ya estaban audicionando con la esperanza de que captara la atención de Lucas.
Después de leer con más de 100 actores con la esperanza de obtener un papel en esta nueva película, Lucas se dio cuenta de que Ford era perfecto para el papel; En una entrevista con Leonard Maltin, el director recordó: "Dije: 'Estamos cortos, Han Solo... ¿Harrison, quieres hacer esto, quieres pararte, leer algunas partes en contra de estas otras partes para que podamos superar esto? Y él dijo que sí, y comenzó a leer, y los leyó mejor que nadie”. Naturalmente, Ford fue absurdamente casual al aceptar el papel que cambiaría la trayectoria de toda su vida y carrera: "Me preguntaron si quería hacerlo, y yo dije: "Claro, ¿por qué no?"
El éxito que lo volvió un ícono
El estatus de Ford como actor principal se solidificó cuando interpretó al arqueólogo trotamundos Indiana Jones en la película “Raiders of the Lost Ark” en 1981, una colaboración entre George Lucas y Steven Spielberg. Aunque Spielberg estaba interesado en elegir a Ford desde el principio, Lucas no, debido a que ya había trabajado con el actor en “American Graffiti” y “Star Wars”. Sin embargo, Lucas finalmente cedió después de que Tom Selleck no pudo aceptar.
Obviamente, los personajes más notables que Ford retrató en ese momento fueron Indiana Jones y Han Solo. Sin embargo, intentaba liberarse de la idea de podía ser algo más que un aventurero. Rompió la cadena al aparecer en "Téstigo" en 1985 como un policía que tenía que proteger al único testigo de un asesinato. De hecho, fue una actuación espléndida que le ganó una nominación para un Oscar en 1986 y también un Globo de Oro en el mismo año.
Un amor trágico por la aviación
Conoces a Harrison Ford como un héroe en la pantalla grande, y en la vida real también tiene es un aventurero: Ford es un aviador consumado con licencia para volar desde hace décadas. A lo largo de los años, ha comprado varios aviones, generalmente volando fuera de un campo en Wyoming, e incluso ha salvado a excursionistas varados mientras estaban en vuelos, consolidando su condición de hombre de muchos talentos.
Sin embargo, a pesar de cada vuelo exitoso que Ford ha tomado, también tiene muchos accidentes y errores en su historial. Desde 1999, Ford ha experimentado todo, desde motores fallidos, hasta rutas de vuelo cruzadas, y algunos de estos incidentes desafortunadamente parecen ser culpa de Ford. En el 2017, Ford aterrizó en el Aeropuerto John Wayne del Condado de Orange antes de un Boeing 787 comercial, y en 2020, la FAA investigó cuando Ford cruzó una pista por delante de otro avión, demostrando que incluso los aviadores experimentados pueden tener algunos resbalones evitables.
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