Estas fechas nos recuerdan la importancia de redescubrir la esperanza, la felicidad y el amor, incluso si se enfrenta una gran pérdida, como la muerte de un ser querido, situación a la que se enfrentó Erik Hayser al interpretar a Javi en Ahora que no estás.
La serie, que se estrena en Prime Video el 25 de diciembre, sigue a un hombre que, tras perder al amor de su vida, recibe un mensaje firmado por su pareja que lo lleva a transitar el duelo, reencontrarse con la alegría de vivir y a atreverse a volver a salir.
“Este es el personaje más personal que he interpretado”, nos dice en entrevista.
Erik se ha distinguido por tomar roles complejos, cuyas historias buscan que los espectadores cuestionen sus valores, como lo vimos en producciones como Preso No.1, Isla Brava o Accidente, entre muchas otras.
Hoy, con Javi, esta confrontación llega cargada de sentimiento, vulnerabilidad, anhelo y momentos alegres y ligeros.
“Mi carrera ha estado cimentada en personajes mucho más rudos, que de alguna manera nos llevan a una reflexión social y política, y, en este momento de mi vida, necesitaba hacer un personaje completamente humano, en un tono distinto y que me llevara a trabajar como nunca antes lo había hecho”, cuenta el también productor.
Para dar vida a Javi, en esta comedia esperanzadora sobre un hombre que está atravesando el dolor de perder a su pareja, Mía, interpretada vivazmente por Ana Serradilla, Erik exploró sus propias pérdidas, preocupaciones e, incluso, se aventuró a revivir vivencias que le permitieran conectar con el dolor y la esperanza.
“Desde que lo leí sentí la necesidad de construirlo a partir de lo que yo soy y nunca me había atrevido a prestarle tanto de mí a un personaje. Hay muchas cosas de mí en Javi y de él en mí.
Yo tenía la necesidad de que fuera muy similar a mí, porque sabía que eso me iba a poner en un nivel de vulnerabilidad y de riesgo que no me había atrevido a enfrentar antes”, revela el queretano, quien este año celebró una década de amor junto a la actriz Fernanda Castillo.
“Tenía muchas ganas de que el espectador me viera como soy, que escuchara mi voz, que viera mucho de Erik en Javi y, claro, que hubo un vértigo que yo nunca antes había sentido, porque a veces sentía que Erik se asomaba mucho y eso provoca miedo.
Mostrar mi tristeza, mi vulnerabilidad y, de alguna manera, mucho de lo que soy, fue un reto enorme”, dice el actor, quien el 19 de diciembre de 2020 se convirtió en padre de Liam y, semanas después, vivió en carne propia el ver a Fernanda hospitalizada tras experimentar complicaciones severas posparto. “Así como los momentos felices pasan, pues también los momentos difíciles pasan”, reflexiona el actor de 44 años.
La esperanza estuvo presente en ese entonces y sigue marcando el tono del día a día de Erik.
“He pasado por momentos difíciles, como cualquier otro ser humano, pero siempre he tenido la certeza de que la vida sigue y que todo cambia y el tiempo pasa y todo se transforma y que nada es para siempre”, considera el histrión. “Evidentemente, hay cosas en la vida que nos rompen. En esta historia, la muerte de Mía rompe a Javi y me parece profundamente esperanzador cómo él se va rearmando”, reflexiona.
“Ahora que no estás ha sido una enseñanza de vida”, indica el actor sobre la serie creada y dirigida por Pepe Bojórquez. “Estaba listo para que algo así llegara, porque estoy listo para mostrarme sin miedo. Javi llegó a mi vida porque necesitaba aprender muchas cosas”, explica el histrión sobre lo mucho que este personaje lo traspasó.
“Estoy en un momento en el que estoy tan seguro de lo que soy, del ser humano y del artista que soy, que nada me da miedo. Ya perdí el miedo de equivocarme. Ya entendí que no le tengo que dar gusto a nadie más que a mí mismo, que lo mejor que puedo dar de mí lo doy en el set”, señala el intérprete, que también ha participado en producciones como Cecilia, Las Aparicio, Oscuro deseo y Asesino del olvido, así como en montajes teatrales como El padre, La Dalia negra y Wake up woman.
“Nos vamos a morir”
Con la madurez de quien sabe que el tiempo no pasa en vano, Erik reflexiona:
“Comienzo a ver a muchos seres queridos partir y veo que yo ya soy un adulto hecho y derecho y que mis padres están ya en una edad avanzada. Comienzo a disfrutar de su tercera edad junto con ellos, con todas las responsabilidades, dolores, achaques y cambios que eso implica. Comienzo a hablar de la muerte de manera mucho más abierta a lo que lo hacía antes, porque naturalmente ya estoy asumiendo el escalón que sigue”.
Aunque ve la muerte como algo inminente, el actor elige que el anunciando final sea su motor para vivir cada día al máximo y no quedarse con nada en el tintero.
“Si tienes algo que resolver, resuélvelo. Si tienes algo que decir, dilo. Quizá no tengas el tiempo para hacerlo más tarde”, aconseja. “No se puede vivir con miedo y el miedo se quita con información. Nos vamos a morir, mi pareja, la gente que me rodea, yo: todos nos vamos a morir. Lo único que tenemos es este instante”, considera el intérprete, quien prefiere “Estar completamente abierto a que va a suceder en cualquier momento, y que la vida sigue después de eso”.
Para Erik, quien pisó por primera vez un teatro a los 13 años y encontró su vocación, lo mejor es atesorar el presente.
“Lo único que tengo que hacer en este momento es seguir tomando el teléfono y decirle a mi padre: ‘oye, te amo, gracias’; y tratar de pasar tiempo con él, con mi mamá y con mis seres queridos”, dice optimista sobre vivir entregándose de lleno. “Yo creo que las cosas en la vida se hacen bien o no se hacen. Toda mi vida he tenido esa conciencia, sabiendo que la vida es muy corta y que hay que disfrutar cada instante como si fuera el último. Entonces, yo cuando me río, ¡Me río!, y cuando lloro, ¡lloro! Creo en que cada momento se debe vivir intensamente y en el amor”, comparte.
Es quizás en esa reflexión sobre vivir el ahora, con amor, esperanza y humildad, en donde Erik encaja perfecto con la narrativa optimista, ligera y reflexiva de los siete episodios de Ahora que no estás.
“Es una historia que parte de tres ejes, el primero es el amor, el segundo es el duelo y finaliza con la esperanza. Eso marca por completo el tono de esta serie, que también nos enseña a ver en el mundo y en la vida toda la magia que nos rodea constantemente”, considera sobre la producción en la que comparte créditos con un elenco destacado, que incluye a Sandra Echeverría, Dominika Paleta, Gaby Espino, Marlene Favela, Tina Romero y Jacqueline Andere.
El mejor regalo
“La vida está llena de esos momentos de magia y de fantasía”, indica el actor, quien nos compartió que algo más que comparte con Javi es su enorme sentido de responsabilidad y el querer hacerse cargo de todo, cualidad que no siempre es positiva.
“Si algo me ha enseñado la vida, sobre todo en los últimos años, es que está bien pedir ayuda y que está bien decir ‘no puedo’ o ‘no quiero’”, dice el histrión, quien, a la par de explorar a mayor profundidad su capacidad de transmitir emociones y contar historias, vive un momento de alegría familiar, experimentando la paternidad y aventurándose a seguir aprendiendo. “Voy a la escuela de gastronomía ahorita, yo creo que hubiera sido chef, porque eso también tiene mucha relación con, pues con el lado artístico”, señala sonriendo.
“Estar en familia es el mejor regalo que puedo tener. Estaremos juntos en Navidad y creo que me levantaré muy temprano para ir a descubrir los regalos de Santa Claus junto a mi hijo. Eso me emociona muchísimo. Me recuerda la ilusión que a mí me hacía bajar corriendo en pijama al árbol a ver que me había traído Santa, a ver si había mordido alguna de las galletas que le dejé, a ver si se había tomado su vaso de leche. Ese es el mejor regalo que puedo tener: tiempo en casa y tiempo en familia”, finaliza.