El actor, guionista y productor mexicano nació en una familia de artistas. Sus papás, Humberto Zurita y la fallecida actriz argentina Christian Bach, son un referente de la televisión mexicana. Por eso no es de extrañarse que Emiliano y su hermano mayor, Sebastián, siguieran sus pasos. Ambos fundaron la productora Addiction House y debutaron como productores con la serie Cómo sobrevivir soltero, que se estrenó el año pasado en Amazon Prime Video y recibió buenas críticas.
Emiliano se mantuvo detrás de los reflectores por un tiempo, pero decidió dar el salto a la actuación en cintas como El Baile de los 41, El mesero y No, porque me enamoro, esta última es una comedia con la que debutó en el cine y de la cual nos platica.
¿Qué te gustó del guion?
Que tiene dualidad. Hay momentos muy ridículos de comedia, en los que parece que no hay reglas, pero también refleja esta otra parte muy real de situaciones que creo que vivimos todos los jóvenes en esta época. Me gusta que transmite mensajes muy bonitos sobre dejar los prejuicios a un lado cuando conoces a alguien, sobre buscar el amor, pero a tu manera, y con lo que a ti te gusta.
La cinta es una comedia, ¿crees que viene bien ahora?
Todos la hemos pasado mal en la pandemia, entonces puede ser una oportunidad para que las personas se sienten a ver algo divertido y se olviden un rato de los problemas. Pienso que la gente extraña la experiencia del cine, de ir con su familia, pareja o amigos a ver las películas en pantalla grande.
¿Qué es lo que más te gusta de ser productor?
Me interesa contar historias que la gente pueda disfrutar y además se vean reflejadas en situaciones con las que conecten. Algo importante de ser productor es formar un muy buen equipo, encontrar un crew que se entregue totalmente a la producción.
¿Qué proyectos vienen para ti este año?
Está El baile de los 41 que seguirá en cines. Además, mi hermano y yo nos pusimos a trabajar durante la pandemia y escribimos algunas historias, así que estamos en espera de que se reactive todo un poco más para que pronto podamos llevarlas a la pantalla.