Las manos son una de las herramientas más valiosas del ser humano ya que nos permiten crear, expresar y realizar actividades esenciales en nuestra vida diaria. Sin embargo, cuando enfrentamos lesiones o enfermedades que afectan su funcionamiento, la intervención de un especialista se vuelve crucial.
Por eso es que entrevistamos al Dr. Mario Abraham Almaraz Ledezma, reconocido cirujano de manos con una destacada trayectoria en traumatología, tratamiento de lesiones y cirugías reconstructivas, quien, a lo largo de su carrera, ha ayudado a innumerables pacientes a recuperar la movilidad y mejorar su calidad de vida.
Doctor, ¿qué te motivó a especializarte en traumatología y, específicamente, en cirugía de manos?
Primero, la traumatología es una especialidad muy interesante de la medicina porque es tan amplia que podemos tratar enfermedades prácticamente casi desde la cabeza hasta la punta del dedo gordo del pie, desde un punto de vista del sistema músculo esquelético claro.
Y segundo, la cirugía de mano me parece una subespecialidad bastante fascinante porque no solo el abordaje, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades más comunes en nuestros manos son muy retadores, sino que también es una subespecialidad tan noble que permite al paciente con enfermedades ser tratado para reincorporarse a su vida diaria y regresar a su funcionalidad.
¿Nos podrías compartir un poco de tu trayectoria profesional? ¿Dónde estudiaste y en qué hospitales has trabajado?
Estudié en la escuela de medicina del ITESM, aquí en la Ciudad de Monterrey. Obviamente con todas las rotaciones nacionales e internacionales que podemos hacer durante el entrenamiento como médico general, a mí me tocó poder visitar España, Australia y los institutos nacionales de nuestro país durante mi formación médica.
La especialidad en Traumatologia y Ortopedia la realicé en el Hospital Christus Muguerza Alta Especialidad, avalado por la UDEM, donde igualmente tuve la oportunidad de estar en múltiples sedes nacionales e internacionales durante mi entrenamiento.
Y finalicé con una subespecialidad en Cirugía de Mano, Codo y Microcirugía en el famoso Christine M. Kleinert Institute en Estados Unidos, en la ciudad de Kentucky.
Platícanos, ¿cuál ha sido el caso más desafiante o memorable que has enfrentado como cirujano de manos?
Definitivamente las lesiones traumáticas resultantes por accidentes en razors o motocicletas son las que nos sorprenden más; no solamente por la hora o el momento en que suceden, si no por la gravedad de la lesión a múltiples tejidos, normalmente son amputaciones parciales o totales de dedos, mano o antebrazo.
¿Qué avances tecnológicos o técnicas quirúrgicas han transformado la cirugía de manos desde que inició tu carrera?
Dentro de la cirugía de mano existen distintas áreas donde podría decir que todas han sido impactadas de manera positiva con los avances. Sin duda, la artroscopia, cirugía mínimamente invasiva de las articulaciones, ha venido a complementar y ayudar para realizar procedimientos mínimamente invasivos, que han permitido a los paciente reincorporarse rápidamente a sus actividades, obtener mejores resultados funcionales y reducir tiempo de internamiento, rehabilitación, etcétera.
¿Qué tipos de problemas o lesiones en las manos tratas con mayor frecuencia en tu práctica diaria?
Prácticamente cualquier lesión o molestia que involucran el miembro superior desde la punta de los dedos hasta la mitad del brazo. Indudablemente dependiendo del sitio donde trato al paciente es la patología más común.
Por ejemplo, en urgencias, me toca ver toda la parte traumática del miembro superior, esto incluye fracturas de los dedos hasta el brazo, laceraciones tendinosas (cortaduras con cuchillos, prensas, platos, maquinaria, etcétera), lesiones nerviosas, mordeduras por animales, infecciones por múltiples razones y tan simples como una astilla enterrada. Amputaciones. Entre un sin fin más de casos.
Por otro lado, en consulta, nos toca ver más compresiones nerviosas, manos adormecidas y entumecimiento en dedos o muñeca, dolores por artritis en pulgar y dedos, lesiones tendinosas como los dedos que se atoran o traban. Y esto es solo lo más común. Como mencioné, prácticamente todo lo que confiera a miembro superior, hasta la mitad del brazo, podemos tratarlo.
¿Cuándo debería un paciente considerar acudir a un cirujano de manos, en lugar de otro especialista?
Simple, cuando el problema está en tus dedos, manos, muñeca o codo. Un especialista en cirugía de mano tiene la capacidad de resolver cualquier patología en esta zona. A veces, los pacientes van con el traumatólogo o el cirujano plástico, pero quien te tiene que revisar es quien tenga un entrenamiento formal en cirugía de mano.
¿Qué métodos no quirúrgicos utilizas o recomiendas antes de considerar una cirugía?
Usamos mucho tratamiento conservador o mínimamente invasivo en nuestro consultorio dado que muchas patologías responden bien a esta modalidad. Normalmente en consultorio hacemos infiltraciones con medicamentos, recomendamos terapia de rehabilitación, realizamos férulas y demás, cada caso es distinto, y siempre le explicamos al paciente cual es el siguiente paso en caso de que el tratamiento falle.
¿Cuáles son los beneficios y riesgos más comunes de las cirugías de mano que realizas?
Como cualquier intervención de cualquier otra área o especialidad, las infecciones. Sin embargo, somos una de las subespecialidades con la menor tasa de infección durante los procedimientos. Es muy difícil y poco probable que una mano se nos infecte por un procedimiento electivo afortunadamente.
¿Qué consejos o recomendaciones darías para prevenir lesiones en las manos, especialmente en personas con trabajos manuales o deportistas?
Higiene de manos. Esto consiste en calentar o hacer ejercicios con nuestras manos, muñecas y dedos, previos a nuestras actividades; sobre todo aquellas profesiones donde las manos son más que indispensables, por ejemplo, chefs, odontólogos, operadores de maquinaria, instructores de gimnasio y muchos más. También recomiendo fortalecimiento con resistencia supervisado ya sea con ligas o pesas, hay que hacer músculo para tener manos y brazos fuertes.
Además, utilizar material de protección, como guantes, durante actividades laborales así como durante la actividad recreativa como las pesas. De esta manera protegemos directamente nuestras manos de lesiones directas.
¿Ofreces servicios especializados o atención personalizada para pacientes con condiciones crónicas?
Si, normalmente nos toca ver en consulta complicaciones de lesiones previas en la mano y buscamos la manera de reintegrar al paciente a su vida lo más parecido a lo previo a lesión con expectativas realistas de acuerdo a cada lesión.