Catalina Amalia de Orange (Catharina-Amalia Beatrix Carmen Victoria) nació el 7 de diciembre de 2003 en La Haya, Holanda. Es la princesa de Orange, princesa de los Países Bajos y princesa de Orange-Nassau, heredera al trono de los Países Bajos al ser la primogénita del rey Guillermo Alejandro y la reina Máxima, de origen argentino. Tiene dos hermanas menores: la princesa Alejandra (nacida en 2005) y la princesa Ariadna (2007).
Amalia tiene tratamiento de Alteza Real, pues siguiendo la tradición, recibió el título oficial de Princesa de Orange al ascender al trono su padre el rey Guillermo Alejandro, el 30 de abril de 2013, tras la abdicación de su abuela, la entonces reina Beatriz.
Amalia cursó su educación elemental básica en la Openbare Bloemcampschool en Wassenaar, sus estudios secundarios en la Escuela Cristiana Sorghvliet de La Haya, un centro público al que también acudió su padre, graduándose con honores en junio de 2021.
Desde su nacimiento, Catalina Amalia vivió junto a sus padres y hermanas en Villa Eikenhorst, pero poco después de la coronación de su padre, la familia se mudó al palacio Huis ten Bosch.
La princesa habla con fluidez neerlandés, inglés y español, el idioma materno de su madre. Además, durante su estancia en el instituto estudió chino.
Heredera al trono
Amalia Catalina es la primera en la línea hereditaria al trono de los Países Bajos, ya que es la primogénita del monarca actual y no será reemplazada en la sucesión por algún hijo varón de sus padres, pues en Holanda el trono se hereda de primogénito a primogénito, siendo éste mujer o varón.
La joven tiene cierto parentesco con la realeza británica, siendo la número 800ª en la línea de sucesión del trono británico, por ser descendiente en línea directa de la duquesa Augusta Federica de Brunswick, hermana mayor del rey Jorge III. Pese al Acta de Establecimiento de 1701, por la cual su padre fue apartado de la sucesión después de casarse con una católica, la reina Máxima, Amalia sigue en la línea de sucesión, ya que las descalificaciones no se extienden a sus descendientes.
Públicamente, Amalia formó parte del cortejo nupcial en la boda de su madrina, la princesa Victoria de Suecia, pero por deseo expreso de sus padres, ni la joven heredera al trono ni ninguna de sus hermanas participarían en la agenda hasta cumplir la mayoría de edad.
Llega el día
La princesa Amalia cumplió 18 años este 7 de diciembre de 2021, edad que la convierte oficialmente en la heredera del trono neerlandés, un destino que admite haber asimilado en su adolescencia, aunque debido a las críticas, renunció a su sueldo hasta que termine la universidad y tenga “algo que ofrecer a cambio”, dijo.
Esto significa que la joven puede empezar a involucrarse en la vida oficial, en funciones ceremoniales y simbólicas, sin interferir en el contenido o la política. Por esta razón es que Amalia ha asistido a su primer acto oficial como heredera, el cual tuvo lugar en el Palacio Kneuterdijk en La Haya, donde su papá el rey Guillermo Alejandro la presentó como nueva miembro del Consejo de Estado, donde desde ahora tiene un “asiento sin derecho a voto”.
Esto le permitirá adquirir conocimientos sobre legislación y derecho constitucional, y prepararse para su futuro rol como jefa de Estado, aunque no se espera que participe de forma regular en las reuniones, hasta que termine sus estudios.
Perfectamente vestida y algo nerviosa, Amalia fue presentada por su padre con los otros miembros del Consejo de Estado presentes y, ante la mirada atenta de sus papás, la joven dio su primer discurso, en el que se notó que la princesa preparó bien sus palabras. Tras la breve reunión, el rey Guillermo Alejandro, la reina Máxima y la princesa Amalia se dirigieron al jardín francés del Palacio, donde la heredera cumplió con la tradición de sembrar un árbol de lima y también posó junto a sus papás para inmortalizar el histórico momento. Además, la princesa respondió a varias preguntas de la prensa y la gran sonrisa de sus papás no ocultó el orgullo que sentían al ver a su hija desenvolverse tan bien.
Amalia fue nombrada integrante de la Orden del León de los Países Bajos y de la Orden del León Dorado de la Casa de Nassau. Además, a partir de ahora puede lucir su propio emblema personal en su residencia y en su coche oficial.
Frente del bullying
La casa real de los Países Bajos no ha quedado fuera de las críticas, teorías y dudas sobre la institución monárquica, pero es Catalina Amalia quien se ha convertido en la princesa más buleada de Europa.
Discreta, tímida y con un físico que no se parece al de las demás royals, bastante más espigadas, Amalia ya ha sufrido todo tipo de bullying mediático: se hacen bromas de su peso, de su dudoso gusto, se cuestionan sus atribuciones, se critica su decisión de tomarse un año sabático antes de comenzar la universidad, incluso se ha cuestionado sobre su salud mental, debido a que una hermana de su madre se suicidó a causa de la depresión y los trastornos alimenticios que padecía, y hasta le ha tocado lidiar con la especulación de un futuro matrimonio con una persona de su mismo sexo.
Por otro lado, han tratado de relacionarla sentimentalmente con varios prospectos, donde al parecer el candidato a ser el primer amor de la princesa ha sido un compañero de estudios llamado Brent, con el que tiene amistad desde 2019. Ambos han visitado lugares históricos juntos y hasta han escrito un musical en amor y compañía, del que la princesa ha hablado en sus contadas apariciones públicas como si fuera uno de sus recuerdos más queridos. Solo el tiempo dirá lo que depare en el amor a la joven princesa.
Por lo pronto, Amalia ha publicado un libro para darse a conocer ante su pueblo y de paso acallar rumores, escrito por la periodista Claudia de Breij, donde la autora retrata a una mujer joven, inteligente, con vocación de servicio a su país, que tiene una visión de futuro y unos cuantos problemas que la han llevado más de una vez a consultar al psicólogo. Tras finalizar sus estudios de bachillerato, decidió tomarse un año sabático con el objetivo de viajar por el mundo y aspirar a algún trabajo temporal, pero la pandemia del coronavirus obstaculizó parte de sus planes. También manifestó que le interesaría estudiar algo relacionado con Economía o Derecho, y cursar un máster en el extranjero. Sin embargo, la joven princesa aún tiene que decidir a qué universidad irá y cuál carrera estudiará.