Billie Eilish se vio obligada a sacar una orden de restricción contra un hombre que la acosaba y amenazaba a sus amigos y familiares, por lo que tenemos por su vida y esto es lo que le sucedió, y por lo que se vio obligada a tomar medidas extremas.
En documentos legales obtenidos por The Times, Eilish reveló que Shawn Christopher McIntyre, quien tiene 53 años, le ha enviado muchos mensajes, tanto a ella, como a su familia desde el pasado mes de septiembre.
¿Por qué Billie Eilish temía por su vida a causa de un stalker?
Los mensajes, no solo fueron hacia ella, sino también a su amiga cercana, Zoe Donahoe, y a su madre, Maggie May Baird, los cuales contenían perturbadoras declaraciones de amor hacia ella y otras amenazas violentas y perturbadoras contra el hermano de Billie, Finneas Baird O'Connell.
Esto provocó que la cantante empezara a experimentar ansiedad, miedo y angustia debido a la preocupación por su seguridad personal, así como la de su familia y amigos.
Debido a esto Eilish mencionó la pérdida continua de paz, tranquilidad y espacio personal. Además, contrató un equipo de seguridad las 24 horas debido a las amenazas.
¿Qué dice la orden de restricción de Billie Eilish contra su acosador?
Eilish solicitó al juez que emitiera una orden de restricción que obligara a McIntyre a cesar cualquier contacto y a mantenerse al menos a 100 yardas de ella, su familia y Donahoe.
En uno de los mensajes presentados en los documentos judiciales, McIntyre amenazó con dañar a Finneas si Eilish no llegaba pronto a su residencia utilizando el servicio de L.A. Metro.
¿Por qué amenazaban a Billie Eilish?
Muchos de los mensajes enviados a Eilish eran incoherentes y mencionaban robots, amenazas de matar a Elon Musk y la empresa de chips cerebrales de Musk, Neuralink.
El incidente más reciente ocurrió el 4 de noviembre alrededor de las 2:10 a.m. cuando la intérprete recibió una notificación de que alguien estaba afuera de su residencia y había llamado varias veces al intercomunicador.
Al revisar las cámaras, vio a McIntyre merodeando frente al portón de su residencia, hablando por teléfono y finalmente sentándose frente al portón.
La policía de Glendale fue llamada y llegó poco después. Aunque la policía le pidió a McIntyre que se fuera, el equipo de seguridad de Eilish confirmó que se trataba de él.
En su carta al juez, Eilish expresó su temor de que McIntyre intensificará sus acciones si no se le restringe, especialmente porque conoce la ubicación de su casa y ha intentado encontrarla en varias ocasiones.