Armando Manzanero y Angélica María, son dos de los nombres más importantes en la industria de la música y el entretenimiento mexicano, que compartieron una relación no muy común por lo que el compositor le hizo varias canciones; ¿quieres saber cuáles son?
Aunque el romance nunca formó parte de su historia, la actriz y cantante ha revelado que el maestro Manzanero sentía algo más que admiración profesional hacia ella.
La relación entre Armando Manzanero y Angélica María
En una entrevista con Yordi Rosado, "La Novia de México" sorprendió al público al hablar de esta conexión especial y las canciones que, según ella, podrían haber sido escritas para conquistar su corazón.
María no dudó en ser sincera sobre sus sentimientos hacia el icónico compositor.
"Yo creo que sí se enamoró de mí, pero a mí no me gustaba Armando. Lo adoro con toda el alma, pero nunca sentí atracción por él", expresó.
Estas palabras, muestran cómo la admiración profesional de Manzanero pudo haberse transformado en inspiración para algunas de sus composiciones más icónicas.
La relación, sin embargo, nunca trascendió los límites del trabajo o amistad, aunque dejó un legado musical que los une para siempre.
La canción de Armando Manzanero para Angélica María
- Paso a pasito
Entre las canciones que Angélica María identifica como posibles dedicatorias, destaca “Paso a pasito”, un tema que narra la persistencia de un amor que no se rinde ante la indiferencia.
La letra parece estar inspirada en la experiencia de Manzanero al intentar conquistar el corazón de la intérprete.
“Es una canción que tiene mucho de él, de esa forma tan única de expresar sentimientos con elegancia y pasión”, comentó Angélica.
La influencia de Armando Manzanero en la carrera de Angélica María fue innegable. Uno de los ejemplos más claros es “Eddy, Eddy”, un tema en su repertorio cuya letra fue escrita por el maestro y que marcó un antes y un después en su trayectoria musical.
"Yo decía que no hacía una película si no iban canciones de Armando Manzanero" recordó la cantante.
Trabajar con Manzanero era una experiencia especial para la mamá de Angélica Vale, quien evocó con nostalgia los momentos en que el compositor le presentaba sus canciones.
“Él llegaba a mi casa, se sentaba en la pianola que me regaló mi abuelito y me cantaba las canciones. Así las aprendía, yo no escuchaba los discos”, expresó.
Estos encuentros no solo dieron lugar a grandes éxitos, sino que también reflejan la relación artística entre dos talentos que entendían la música como una forma clara de comunicarse.