El director y escritor de cine Andrés Clariond Rangel nos platicó sobre su pasión por el séptimo arte, sus inicios dentro del mundo del cine y el estreno de su película Territorio, además de compartirnos pasajes de su infancia.
¿De dónde nace tu interés por el cine?
Fui un niño creativo que le gustaba inventar historias, canciones y ponerle apodos a sus amigos, pero creciendo en una sociedad conservadora como la regiomontana, nunca consideré una profesión creativa, hasta que abrieron la Cineteca Nuevo León que hoy lleva el nombre de mi mamá, ahí descubrí que existía otro tipo de cine y conocí, en tiempos en los que no abundaban, a cineastas mexicanos de la talla de Arturo Ripstein; me di cuenta que dedicarme al cine no era un imposible.
¿Cómo inició tu carrera cinematográfica?
Estudié Derecho en la UDEM, pero por el interés que tenía en el cine llevé las materias de cinematografía de los comunicólogos. En los veranos me fui a estudiar cursos de cine a una escuela en Cuba y junto a dos amigos inicié una casa productora donde hacíamos comerciales, videos empresariales y videos musicales. Recuerdo con especial cariño el que dirigí para el grupo Kinky y su canción Ejercicio 16. Al terminar la carrera de Derecho, me fui a estudiar la Maestría de Dirección de Cine, en la Universidad de Columbia, en Nueva York. Después de filmar Hilda creé junto a Gabriel Nuncio y Diego Osorno la productora de cine Bengala.
“Lo que me emociona es poder llegar a tanta gente con una idea que nació en mi cabeza, en mi soledad”.
¿Cuáles satisfacciones te ha dejado esta profesión?
Primero que nada, la felicidad de dedicarte a lo que te gusta y apasiona, después la satisfacción de ir dominando un oficio porque aunque la gente crea que las artes son pura inspiración, hay un gran trabajo y preparación detrás de una carrera artística. Otra cuestión que me emociona es poderle llegar a tanta gente con una idea que nación en mi cabeza, en mi soledad.
¿Qué experiencia y aprendizaje te dejó tu película Hilda?
Me dejó muchos aprendizajes, principalmente el perderle el miedo a dirigir actores, un área de mi profesión que hoy disfruto más que nada. También aprendí a estar más atento en el aspecto visual de la película; Territorio es un filme con una imagen más cuidada.
¿Cómo surgió la idea de esta película llamada Territorio, la cual trata el tema de la masculinidad?
Muy seguido se me vienen a la cabeza ideas, algunas prosperan y me llevan a más ideas, otras mueren al nacer, no sé de dónde vengan. Supongo que Territorio tiene que ver con reflexiones desde mi niñez sobre el papel del hombre y la carga que traemos de actuar de cierta manera y responder a cánones e imposiciones sociales sobre qué debe hacer y qué no debe hacer un hombre.
“La satisfacción que me ha dejado mi carrera es la felicidad de dedicarme a lo que me gusta y apasiona; hay un gran trabajo y preparación detrás de una carrera artística”.
¿Cuál es la reflexión que deja este filme?
Eso dependerá de la interpretación de los espectadores, pero lo que yo quiero es generar debate y pláticas posteriores al ver la película, no me importan cuáles. Creo que Territorio abrirá muchas conversaciones sobre la relación de pareja, la paternidad y maternidad, así como el papel del hombre en la sociedad.
¿Qué opinas sobre el aporte y talento de los hombres en la industria cinematográfica?
Como casi todas las industrias de nuestro país, el cine ha sido un espacio de hombres. Afortunadamente cada vez se ven más mujeres directoras muy talentosas.
¿Qué características de los hombres son relevantes al momento de hacer cine?
Hay características idóneas que debe de tener un director, pero estas no son privativas de los hombres, al contrario, en ocasiones las mujeres las manejan mejor. Para mí, un buen director debe saber sobre todos los departamentos que conforman una película: cámara, actores, vestuario, música, decoración, maquillaje, etcétera. Además, debe de ser una persona con capacidad de liderar un grupo de alrededor de 100 colaboradores que sin ellos la producción de una película sería imposible.
¿Qué significado tiene este lanzamiento, en lo profesional y en lo personal?
Significa un gran orgullo y un aliciente de que voy en el camino correcto. Territorio tuvo muy buen recibimiento en los festivales de cine que participó y ahora con su estreno en salas las críticas han sido muy positivas; aunado a eso, la película fue adquirida para el mercado estadounidense por HBO Max.
¿A cuáles premios y reconocimientos aspiras con Territorio?
Más que premios, lo que más me gusta que logren mis películas es provocar debate y discusión, y que verlas sea una experiencia que la gente se lleve a su casa y no olvide a los cinco minutos de salir de la sala de cine. Como cineasta mexicano aspiro a ganar algún Ariel, nuestros Óscares mexicanos; con Hilda tuvimos cinco nominaciones y ganamos uno, ojalá que Territorio logre más reconocimientos.
¿Cuáles son tus próximos proyectos cinematográficos?
Estoy trabajando en una historia sobre un ex gobernador en el retiro.
La visión de un cineasta
¿Cuál es tu película favorita?
8 1/2 de Fellini.
¿Cómo sabes cuando un histrión hace bien su trabajo?
Hay una intuición que desarrollamos los directores y nos permite detectar una actuación creíble. A grandes rasgos, a mí me gustan actuaciones muy contenidas y que expresen lo que sienten sin necesidad de decirlo con palabras.
¿Cuál ha sido la mejor actuación que has visto?
Michael Fassbender, en Shame, y Natalie Portman, en Black Swan.
¿Cuál es tu top cinco, en series y películas?
81/2, de Federico Fellini, El Inquilino, de Roman Polanski, la serie Succession, El Graduado, de Mike Nichols, The Squid and the Whale, de Noah Baumbach.