El mundo entero conoce a Adam Levine como uno de los integrantes de la famosa banda de pop, Maroon V, pero no muchos conocen sobre el trastorno que lo ha seguido durante toda su vida y cuál es.
Ha sido en varias ocasiones que él mismo ha compartido en algunas entrevistas lo que ha tenido que enfrentar al vivir de una manera diferente a la que muchos otros artistas lo han hecho.
Incluso, ha creado campañas con las que ha tratado de hacer conciencia sobre lo que genera vivir con el mismo y apoya a personas que no pueden lograr lo que en ocasiones puede parecer imposible.
Adam tiene Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad, también conocido como ‘TDAH’ y ha hablado de cómo se llegó a sentir al no saber que lo tenía cuando era niño.
Reveló que fue hasta la adolescencia que su doctor lo diagnosticó y con el paso del tiempo se pudo dar cuenta de que muchas cosas en su vida eran diferentes a causa de lo mismo.
"Fui diagnosticado con TDAH por mi doctor cuando era adolescente. Mientras crecía pensé que mi TDAH se había ido. Eventualmente, me di cuenta que algo aún estaba ahí. Pude trabajar con mi doctor para controlar los síntomas. Esta campaña es importante para mí porque ayuda a los jóvenes adultos y adultos a darse cuenta que aún hay una posibilidad de que puedan tener TDAH si lo tuvieron de niños”, expresó en una entrevista.
Reveló además que tiene problemas serios de concentración, pero que la etapa en la que más lo sufrió, fue en su niñez, cuando iba a la escuela, ya que realmente no prestaba atención a lo que le enseñaban.
“No podía organizar mis pensamientos, me quedaba atascado”, declaró sobre la manera en la que se llegó a sentir en muchas ocasiones, debido a los síntomas que esto le generaba.
“A lo largo de toda mi vida he luchado con el ADHD. Yo tenía los síntomas de inatención e hiperactividad/impulsividad. A veces me costaba mucho quedarme quieto, concentrarme y hacer las tareas. Me sentía muy frustrado debido a las dificultades que tenía en el colegio. Era una lucha constante”, añadió.
Él sabía perfectamente que era capaz de rendir más en la escuela, pero su condición médica muchas veces lo llegó a afectar, en especial porque no podía permanecer sentado o terminar sus trabajos.
Su padres lo apoyaron mucho durante el tiempo que lo necesitó más, en especial cuando fue diagnosticado, pues lo ayudaron a diseñar un plan para mejorar y así salir adelante sin tener que afectar su vida.
El trastorno llegó a afectar también parte de su vida como músico, pues llegó a contar que en el estudio no podía concentrarse cuando trataba de hacer nuevas canciones e incluso en su primer álbum se estancó al no poder concentrarse.
“Tenía como 30 ideas flotando en mi mente, sin poder concretarlas. Ahí volví a ver a mi doctor para revisar mis síntomas, descubriendo que todavía tenía ADHD y que podía afectarme como adulto igualmente”, dijo.
Posteriormente trabajó en ello, y empezó a hacer visible el problema para que los niños que sufren de lo mismo, puedan obtener ayuda profesional y tratarse correctamente.