No olvidemos que todo regresa y la moda no es una excepción; los vestidos de gala, trajes sastres, sombreros y joyas que caracterizaron la Época Dorada del cine mexicano continúan teniendo una gran influencia en tendencias y diseñadores actuales. Alguna vez todos soñamos con parecernos a los actores y actrices que aparecían en la pantalla grande de aquella época, ser esa mujer de curvas cubierta con una bata de seda esperando por el ser amado.
Comencemos con un poco de contexto. En 1935 llegó una era de suma importancia para el cine mexicano, donde las películas creadas en nuestro país eran las más importantes del mundo. Personajes como Luis Buñuel, Silvia Pinal, Pedro Infante, María Félix y Emilio “El Indio” Fernández trataban de crear un parte aguas.
Los vestuaristas eran unos verdaderos artistas textiles, durante muchos años se encargaron de no sólo vestirlos para las cintas, sino que también fueron los creadores de un estilo único y genuino de grandes estrellas del cine mexicano y así, en poco tiempo, se convirtieron en íconos de moda.
Platiquemos de las “Divas”, aquellas actrices hermosas, fuertes y modernas que durante dos décadas marcaron la pauta de la belleza de mediados del siglo XX gracias a su talento y personalidad. Mujeres de cabello rizado, labios rojos y de silueta exuberante debajo de un ostentoso vestido; las pieles también formaron parte de sus atuendos, en combinación de sobreros, joyas como collares de perlas y largos guantes de seda.
La moda en los hombres de aquella época fue dividida entre trajes mexicanos y sastres a rayas, Pedro Infante fue uno de los máximos portadores del traje de charro, de pies a cabeza lo lucía con respeto y orgullo. Las chaquetas tipo militar también eran muy recurridas, complementándolas con unas gafas de aviador. El traje sastre de la mano de los sombreros llegaron para darle al hombre un toque sofisticado, sacando su lado más galante.
Gracias a las manos y visión de los diseñadores de aquella era como Armando Valdés, Pedro Loredo, Manuel Méndez, entre otros más, fue que María Félix se convirtió en la mujer mexicana más famosa del mundo. Durante su aparición en las alfombras rojas llamaba la atención de miles de personas que admiraban su porte y elegancia.
Definitivamente fue una mujer que le supo sacar partido a su belleza, tanto que marcas de alta costura internacionales como Chanel, YSL, Cartier, Givenchy y Balenciaga la ocuparon como su fuente de inspiración.
La influencia llegó a los diseñadores actuales como mi paisano, el talentoso Iván Ávalos, quien presentó la colección “Eduviges” Fashion Week 2017 basada en películas mexicanas clásicas, donde utilizó los colores blanco y negro, siluetas de reloj de arena, polka dots y perlas. Las modelos con peinados con ondas marcadas, cabello recogido, sombreros y accesorios con listones.
Definitivamente fue una época que marcó la moda dentro y fuera de nuestro país, nunca vimos a mujeres más elegantes y sofisticadas y todo parece apuntar que vamos de regreso a esas tendencias. Guantes largos, bolsos pequeños, pamelas y siluetas que dejaran mucho a la imaginación.
See you son.
@unasalomonm