La puesta en escena José el Soñador, de los británicos Tim Rice y Andrew Lloyd Webber, se ha convertido en un clásico dentro del teatro musical. Y, por supuesto, en México no es la excepción. Desde su estreno en los años 70 esta obra ha sido todo un éxito en nuestro país, en donde se han realizado varios montajes en diversas ciudades.
En esta ocasión, la puesta en escena corrió a cargo de Mariano Detri, reconocido director de grandes producciones como Los Miserables y Cats en México, Londres, Venezuela, Brasil y España. Para esta superproducción, Detri reunió un gran elenco de más de 30 bailarines y grandes estrellas en los papeles protagónicos: Kalimba, Leonardo de Lozzane, Erik Rubín y Fela Domínguez son los nombres que resaltan en el cartel.
Las interpretaciones de estos actores son impresionantes. Kalimba, en el papel de José, ha demostrado una vez más su capacidad como cantante. Tanto el director como Julissa tradujeron la pieza Rey de mi Corazón específicamente para que fuera interpretada por él. Leonardo Lozzane y Erik Rubín interpretan (de manera alternada en diferentes presentaciones) el papel del Faraón, ambos con excelentes ejecuciones del personaje. Finalmente, la cantante mexicana Fela Domínguez sobresale por su magnífica e impresionante voz. Después de verla en otras producciones, como El Rey León (Nala), no deja de sorprender en cada ocasión.
En esta obra ella es la narradora, por lo que interpreta más de 15 temas musicales, todos ellos de diferentes géneros, lo que requiere un gran esfuerzo y capacidad vocal que, con su talento, Fela cumple de manera excelsa. Sin lugar a duda tenemos a una de las mejores cantantes del mundo sobre este escenario.
Con este increíble elenco, la producción no podía quedarse atrás. El escenario cuenta con más de 400 metros de pantallas LED que hacen de este musical todo un espectáculo de colores y luces que danzan a la par de los bailarines.
Además, la tecnología de videomaping traslada al espectador a cada uno de los sitios donde se desarrolla la historia. Por otro lado, la obra cuenta con más de 150 cambios de vestuario, cada uno de ellos tan brillante y llamativo que se incorpora a la perfección con el juego de luces. Con Jorge Ramos como encargado musical, y las coreografías de Carmelo Segura, José el Soñador es toda una experiencia visual.
No puedo dejar de mencionar la participación especial de Mauricio Salas, un actor fenomenal del teatro en nuestro país (y al que disfrutamos mucho en esta columna).
Por último, queda reconocer la labor de Alejandro Gou, productor de este maravilloso espectáculo. Si bien este no es el primer musical de gran formato que Gou ha llevado a escena (pues ha producido Hoy no me Puedo Levantar, Vaselina, Jesucristo Súper Estrella, entre otros), en definitiva, con este montaje ha dejado muy alta la expectativa de los musicales de calidad en México. Esperamos que Alejandro siga produciendo espectáculos como este en nuestro país.
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