Aladdín, la mágica y espectacular puesta en escena de Broadway en México

A partir de entonces, esta obra ha dado la vuelta al mundo sobre la alfombra mágica, aterrizando sobre los escenarios de diversos países. Y fue en 2021 cuando esta sorprendente puesta en escena se estrenó en México en el Teatro Telcel.

A lo largo de estos siete años, he tenido la oportunidad de ver esta obra en Broadway y Sídney, ambas representaciones en las que el elenco internacional dejó “la vara muy alta”. Pero al verla ahora en la Ciudad de México, pude notar que los mexicanos no decepcionan en su interpretación. Si bien es verdad que la adaptación tiene un exceso de tropicalización en el guión, vemos talentos increíbles sobre el escenario.

Tal es el caso de Juampi, que le da vida al genio, y a quien hemos visto en otras obras como Jesucristo Superestrella, Hoy No Me Puedo Levantar, Los Miserables, entre otros proyectos que le han dado las tablas para este papel tan exigente; pues es bien sabido que la cereza del pastel es el genio de la lámpara mágica. Sin embargo, aunque “Amigo hasta el fin” es el mejor número de toda la obra, la representación mexicana no impacta tanto como el show de Michael James Scott en el papel homónimo en Australia, por ejemplo.

Otro gran talento que vemos en el escenario es Irma Flores, quien representa a Jasmín, la princesa de Agrabah que no quiere casarse con el primer príncipe que se le ponga enfrente. La también cantante de ópera le da vida a una Jasmín llena de sentimientos, pues vuela del amor y la felicidad al enojo y la frustración, emociones que transmite impecablemente. Además, el mensaje con un dejo feminista que comunica la obra es importantísimo que lo entienda todo el público, pero, sobre todo, las niñas y niños que viven la experiencia del teatro.

Al elenco se suma Rodney Ingram, todo un “diamante en bruto”. Rodney tiene una preparación y trayectoria extraordinaria, por lo que no es ninguna sorpresa que sea el protagonista de la obra, además de que él suplió a Adam Jacobs en Broadway. Es decir, Rodney ya había sido Aladdin anteriormente, de manera que la familiaridad con la obra y el papel le dieron la experiencia necesaria para su interpretación. Y, ¡qué bien lo hace! Me encanta su actuación, y su trabajo vocal es brutal; es todo un espectáculo verlo en el escenario.

El acto no estaría completo sin aquellos que le dan sabor a la trama. Para ello, tenemos a otros actores fenomenales como Rodrigo Negrini, como Kassim; Juan Fonsalido, como Omar (amigos de Aladdín y ensamble); el poblano Juan Pablo Escutia, como Iago (el fiel aliado de Yafar) y muchos más con un ensamble di-vi-no al que se suman Javier Manente, Adam Sadwing, Esteban Provenzano y muchos más.

Obviamente tenemos que hablar de la alfombra voladora. No tengo idea de cómo lo logran, pero desafían las leyes de la física para hacer que la alfombra vuele a diez metros sobre el escenario con Jasmín y Aladdín como sus tripulantes. Sobre ella, la canción “Un mundo ideal” se vuelve el momento icónico del enamoramiento de estos dos tórtolos. Durante esta escena, todo el teatro se llena de romance, amor e ilusión, y es imposible no corear y conectarse con la historia. Todo esto, al mismo tiempo que estás fascinado por verlos volar literalmente. Pensar que hace veinte años veíamos esta misma imagen en la película y hoy lo podemos ver en persona es impresionante. Este número del musical es majestuoso, y a esta canción en especial le tengo mucho cariño.

Afortunadamente, Aladdín seguirá en cartelera los próximos meses para que todos aquellos que no la hayan visto, sean grandes o pequeños, disfruten de esta divertida experiencia. En definitiva, no puedes perderte la oportunidad de ver esta fenomenal puesta en escena.

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