Si no tienes amor propio, ¿a qué amor puedes suspirar? Aprende en palabras de Vero Marcos cómo cultivarlo para establecer relaciones sanas y felices.
El amor propio es un tema del cual les hablo muy seguido, pero parece que se nos olvida porque recaemos en ser más compasivos, más empáticos y más amorosos con las demás personas antes de serlos con nosotros mismos.
Este tema a veces nos puede parecer muy trillado, aburrido y difícil de entender porque no sabemos ni siquiera cómo dárnoslo; es ahí donde radica la duda y donde cometemos el error de ser con los demás y de desvivirnos con los demás antes de hacerlo con nosotros mismos.
Y como nos hemos dedicado toda nuestra vida a hacer todo por todos y a desvivirnos por los demás antes de hacer todo por nosotros mismos, que ni siquiera sabemos qué es lo que nos gusta y qué es lo que nos hace felices.
Un tip maravilloso para que puedas despertar y darte cuenta realmente qué es lo que te gusta y qué es lo que quieres, es muy sencillo, todo lo que haces por los demás y todos los detalles que tienes por los demás, todos esos regalos que das a los demás son detalles que te encantaría que alguien tuviera contigo.
Empieza por ahí, ¿qué es lo que das a los demás? qué detalles, qué regalos, qué sorpresas, y empieza a dártelas a ti. Al principio va a ser difícil porque no estás acostumbrado a hacerlo, pero entre más te regales, entre más tengas detalles contigo y entre más te apapaches, tu autoestima, tu corazón y tu alma van a estar fertilizados, llenos de gozo y de felicidad.
La decisión es 100 porciento tuya. Es hacer un alto, poner una pausa y dejar de dar a los demás todo eso que siempre les habías estado dando para voltear a verte a ti, y empezar por ti y para ti.
Esto hará que tu mente, tu cuerpo, tu corazón y tu alma den un giro de 180 grados, que estés lleno de gozo y de una paz inmensa; va a hacer que te ames tantísimo que aprendas a tener dignidad y amor propio, y de esa manera puedas tener únicamente relaciones sanas.
LA CAJA DEL AMOR
La mayoría de las personas buscan el tener pareja con el sueño de que todo sea perfecto como en los cuentos de hadas; pareja en la que encontrarás compañía, diversión, intimidad, vacaciones, etcétera.
Cuando la realidad aterrizada de vivir en pareja es como tener una caja vacía en la que ambos aportarán sentimientos, ideas, detalles y sorpresas con la conciencia de que antes de tomar algo de esa caja, debes ponerle tú también algo para compartirlo con tu pareja.
Y aquí la cosa tiene que ser pareja para que exista paz y armonía, ya que lo justo es que, para recibir, también tenemos que dar. Porque si tú solo quieres darle todo a tu pareja sin que ella haya hecho nada para ganárselo, estás violando una ley universal que descompensa tu caja y te la deja vacía.
Y si solo tomas más de lo que le estás poniendo a esa caja, le quedará un vacío que hará que se desplome y desaparezca. No confundas pareja con amor porque la caja nunca será la fuente del amor.
Es el amor individual que tiene cada persona, que al compartirlo con el otro de manera equitativa se duplica el amor en la caja que representa a la pareja. En la caja nunca encontrarás romanticismo, detalles y sorpresas si no le pones tú también romanticismo, detalles y sorpresas.
La única manera de que esa caja permanezca brillando será generando empatía y comprensión para que la chispa que todos tenemos dentro esté siempre dispuesta a mantener llena esa caja, de esta maneja juntos y en pareja se mantendrán constantemente dando, amando, sirviendo y dando todo de sí en reciprocidad, balance, igualdad y equilibro.
VERO MARCOS
5 TIPS PARA CULTIVAR EL AMOR PROPIO
Valora a tu círculo de familiares y amistades, pero solo con quienes aporten bienestar y felicidad a tu vida.
Aléjate de las personas negativas.
Conoce tus fortalezas y debilidades.
¡Aprende! Parte de cultivar amor propio es descubrir cosas nuevas que nos hagan sentir mejor.
Conoce nuevas personas. A veces si nuestro círculo inmediato no es el mejor, es necesario salir de ahí y buscar nuevas amistades.
¡DALES FOLLOW!