Después de una noche festiva en la que bebiste alcohol, es posible que despiertes con fuertes dolores de cabeza, dolor muscular, sed excesiva, sequedad de boca, fatiga, debilidad, náuseas, vómito, dolor de estómago, irritabilidad e incluso te moleste la luz y el ruido.
Y es que tienes resaca, una condición que manifiesta el cuerpo cuando se ha tomado bebidas alcohólicas en exceso. Ante esta situación, seguro estarás buscando soluciones para aliviar estos desagradables malestares, debes saber que los remedios caseros han resultado ser eficaces para combatir la cruda realidad.
1. Toma abundante agua
El exceso de alcohol genera un proceso de deshidratación en el organismo, por lo que beber agua durante todo el día contrarrestará los efectos. E incluso, puedes agregar al vital líquido un jugo de limón, para convertirla en una bebida revitalizante y energética, ya que este alimento tiene propiedades depurativas.
Es muy sencillo de prepararlo, solo necesitas calentar un vaso con agua y mézclala con el jugo de un limón. Es importante consumirlo en ayunas y esperar 45 minutos antes de ingerir tu desayuno.
2. Vitamina C
Tomar alimentos ricos en Vitamina C ayudará a que el cuerpo se recupere más rápido de la cruda gracias a sus propiedades antioxidantes que ayudan a combatir los radicales libres que se liberan cuando el organismo se está “desintoxicando”. Por lo que te invitamos a prepararte un jugo de naranja. O bien, consumir frutas como el kiwi, uva, fresas, naranjas, entre otras.
3. El té de plano
Es también un excelente remedio dado a que es conocido como uno de los mejores antiácidos naturales que existen, así que su consumo ayuda a controlar el exceso de acidez y los síntomas estomacales. Su alto contenido en potasio relaja los vasos sanguíneos, alivia las náuseas y vómito, así como los dolores de cabeza.
Para preparar esta infusión, ocuparás ½ plátano y 1 taza de agua. Luego, cortarás en rodajas la mitad de un plátano maduro con todo y cáscara, que posteriormente introducirás en el agua hirviendo. Déjalo reposar por 10 minutos, para que finalmente puedas beberlo dos veces al día.
4. Miel con limón
Aunque esta combinación es de los mejores remedios para aliviar la tos y la gripe, también lo es para sanar los síntomas de beber demasiado, ya que la miel ayuda a desintoxicar el cuerpo, nivelando la cantidad de glucosa en sangre. Y sí le agregamos el limón, tendremos un mejor alivio.
Una de las opciones es preparar esta bebida en la que necesitarás 1 cucharada de limón, 1 cucharada de miel de abeja y ½ taza de agua. Mezcla el limón y la miel en media taza de agua caliente, para luego tomarlo hasta tres veces al día.
5. Kiwi, lechuga y toronja
Con esta combinación de alimentos, prepararás un delicioso licuado con muchas vitaminas y minerales, lo que ayudará a compensar las pérdidas nutricionales que se producen a causa de la cruda. Sus antioxidantes y la fibra protegen la salud intestinal, disminuye la diarrea y el vómito.
Así que procura tener en casa 1 kiwi, 5 hojas de lechuga y un jugo 3 toronjas. Para hacer esta bebida, deberás pelar el kiwi, cortarlo en rodajas y colocarlo en la licuadora junto con la lechuga. Luego, extrae el jugo de las toronjas y agrégalo con el agua a la licuadora. Mezcla todo, sírvelo y bébelo al momento.
6. Jengibre
Por ser un alimento antioxidante y antiinflamatorio, se ha convertido en uno de los remedios más populares para contrarrestar los molestos efectos de la resaca, ya que disminuye las náuseas, el mareo, dolor de cabeza, etc., por lo que te invitamos a preparar un té.
Entre los ingredientes, necesitarás 1 trozo de raíz de jengibre y 1 taza de agua. El modo de preparación es la siguiente: tienes que rallar la raíz de jengibre y agregarla en una taza de agua hirviendo, taparla y dejarla reposar por 10 minutos. Finalmente, tomarla hasta tres veces al día.
7. Jugo de tomate
El tomate posee un nutriente llamado licopeno que tiene una eficaz acción sobre el hígado, disminuyendo los síntomas ocasionados por beber en exceso.
Necesitas 4 tomates grandes y maduros, 2 cucharadas de perejil o cebollín, 1 hoja de laurel y sal al gusto. Licuas todos los ingredientes y agrega un poco de agua fría y unos cubos de hielo. ¡Y listo! Ya puedes tomarlo, de preferencia en ayuno.