Andrea Ovando Trujillo licenciada en psicología de la salud con especialidad en psico oncología tiene 33 años y es originaria de Toluca, Estado de México. Actualmente es psico oncóloga del Centro Oncológico Estatal Issemym, además de pertenecer al comité de bio ética hospitalaria y es coordinadora del programa joven y fuerte del mismo centro. Andy se describe como una mujer trabajadora, empática, creativa y de buena escucha. Su mayor pasión en la vida es su familia; así como su trabajo enfocado al área oncológica con pacientes adultos o pediátricos. Con base en su experiencia y con motivo del mes rosa, ella nos explica que el cáncer de mama se origina cuando las células mamarias comienzan a crecer sin ningún control y pueden formar tumores o abultamientos en el seno, esto se puede empezar a palpar desde que son pequeños, o bien, cuando ya están más crecidos detectándose por medio de radiografías.
Por eso designamos el mes de octubre dedicado a la sensibilización del cáncer de mama. “Ya que es importante entender que se deben sensibilizar tanto a hombre como a mujeres, pues aunque existe un mayor número de casos en mujeres, también ellos lo presentan”. Andrea considera que la autoexploración debe realizarse como un hábito cotidiano en los jóvenes ya que al hacerlo se puede prevenir un cáncer de mama, aun más cuando se sabe de antecedentes con algún familiar cercano como mamá, tía o abuela que hayan padecido esta enfermedad. El aumento de cáncer de mama crece en medida en que las mujeres envejecen, en mujeres con más de 50 años sin embargo es importante puntualizar que no solo es en ellas, actualmente se está presentando en pacientes cada vez más jóvenes, comentó.
Entre otros factores de riesgo se encuentran aquellas mujeres que hayan tenido una menstruación temprana o una menopausia tardía, así como embarazos después de los 35 años por primera vez, sobre peso, poca actividad física, una mala alimentación, beber alcohol y fumar tabaco.
“Una persona después de ser diagnosticada con cáncer de mama presenta grandes impactos a nivel económico, emocional y familiar por la ansiedad, la depresión y los miedos que experimenta”.
Cada etapa del cáncer es difícil para asimilar, aceptar y adaptarse; una de las primeras etapas es la probabilidad que tiene de ser diagnosticada (o) con la enfermedad, la segunda etapa es la confirmación lo cual genera mucha inquietud e incertidumbre de lo que ocurrirá y finalmente la etapa del tratamiento donde intervienen los malestares físicos como la caída del cabello, cejas, pestañas y la pérdida total del seno en una cirugía radical. Por lo cual debe haber un tratamiento multidisciplinario que englobe la parte médica y psicológica, en este caso llamado psico oncología donde se pueda apoyar tanto a los pacientes como a sus familiares.
Las mujeres después de ser diagnosticadas y vivir todo el proceso psicológico es muy común que busquen ayudar a otras personas sobre todo en la etapa inicial, ya sea en grupos de ayuda o bien en algunas otras asociaciones. “A esto nosotros le llamamos trascendencia, trascender su dolor para ayudar a los demás”.
Por último, Andy recomienda realizarse una autoexploración tanto en mujeres como en hombres ya que menciona a la fecha es la mejor herramienta para evitar el diagnostico a través de la prevención que lleva a tratamientos oportunos.