Es común que antes de hacer ejercicio decidas no ingerir ningún tipo de alimento, pues se piensa que no está indicado por los especialistas, pero la verdad es que la recomendación es consumir los nutrientes que ayudan a tener un buen rendimiento y al mismo tiempo perder peso de forma saludable.
Si bien, existe una controversia entre los expertos sobre qué es lo mejor para adelgazar, si comer antes o después de hacer una actividad física, lo cierto es que se requiere un equilibrio entre ambos para obtener buenos resultados.
Para esto, la Dra. Marcela Toscano Cavazos, especialista en Nutrición Clínica y Obesidad de TecSalud, nos compartió algunos consejos para evitar caer en errores que obstaculicen la llegada a la meta.
“Ha habido durante mucho tiempo controversia con esto, porque depende de lo que quieras lograr. Unos autores aconsejan no comer nada antes de entrenar para tener los niveles de glucosa un poco bajo que es lo que el cuerpo primero quiere quemar, entonces como no tiene glucosa, hay que echar mano de la reserva de grasa que es un combustible secundario y dice: si entrenan en ayunas, quemarán más grasa y van adelgazar.
“Y en la otra corriente dice: claro que no, porque si entrenan en ayunas tendrán baja la glucosa y menos intensidad para ejercitar, por lo tanto quemarán menos calorías en el entrenamiento. Ambas corrientes tienen razón; pero mi opinión, en base a lo que he estado estudiando y a lo que le va mejor a mis pacientes, es que si está enfocado en adelgazar no en mejorar su rendimiento deportivo, yo prefiero darle un empujoncito energético de grasa antes de entrenar”, explicó la nutrióloga.
Comer antes de entrenar
Y en este sentido, sugirió comer una cucharadita de crema de cacahuate o crema de almendras natural antes de comenzar hacer ejercicio. O una media manzana untada con crema de almendras.
Otra de las opciones es dejar remojando desde la noche anterior en agua caliente una cucharada de semilla de linaza y al día siguiente, en ayunas, tomar este líquido que contiene Omega3, una grasa esencial para lograr el objetivo.
Además comentó que ingerir un poco de grasa antes de la rutina no eleva los niveles de insulina, pero sí estabiliza la energía. Por ejemplo, si una persona no puede ejercitar con el estómago vacío porque empieza a sentirse mal, lo recomendable es comer ¼ de aguacate para sacar fuerzas y hacer su ejercicio.
“Antes de entrenar no es recomendable grandes cargas de proteína, grasas ni de azúcar; si acaso comerán algo que sea un snack de grasas saludables como aceite de linaza, aceite de coco con un poco de aguacate. Si necesitas energía, comer media manzana o unas cuantas fresas pero con este tipo de grasas”, propuso.
Ante la duda de, si es malo hacer ejercicio con el estómago vacío, mencionó que es un tema individual, de prueba y error, porque hay quienes se sienten perfectamente bien sin ingerir ningún alimento. Sin embargo, “puede incrementar los niveles de acidez en la pancita porque el ejercicio es un estrés metabólico”.
Después de hacer ejercicio
La Dra. Marcela Toscano agregó que después de realizar una actividad física, el músculo está muy estimulado y exigente de nutrientes, por lo que es importante cuidar la calidad de los alimentos. En este sentido, vale la pena incluir carbohidratos, frutas frescas y proteínas.
Así que puedes preparar un licuado de proteínas con fruta, o comer un coctel de frutas con yogur griego. O bien, cocinar y degustar un omelette, huevos revueltos o duros.
En cuanto al tiempo que hay que esperar después de entrenar para comer, la nutrióloga indicó 30 minutos. Pero aclaró, que tan luego de terminar la rutina, es necesario consumir carbohidratos de rápida absorción como son las frutas y verduras, “y luego llegas a casa, te bañas, te pones tu pijama, entonces puedes preparar un sándwich o un atún”.
Y por lo que respecta a la hidratación, señaló que es fundamental tomar agua natural antes, durante y después de la rutina ya que transporta nutrientes hacia las células y regula la temperatura corporal.
Además, recomendó preparar este suero que tiene características pH, minerales y carga energética para beberlo durante el entrenamiento. Solo necesitas un litro de agua, agrega una cucharadita de bicarbonato de sodio, el jugo de un limón, media cucharadita de miel de abeja y una pizca de sal, este último indicado para quienes sudan mucho al hacer ejercicio. Si no es tu caso, evita la sal.
No cabe duda que con estos consejos saludables lograrás conseguir una figura ideal.