Los rayos UV ultravioleta son una forma de radiación no ionizante que proviene de los rayos del sol. Aunque pueden ofrecer beneficios como la producción de vitamina D en el cuerpo, también pueden ser perjudiciales en la piel.
Cuando la radiación solar entra en contacto con algunos medicamentos los daños pueden ser altamente dañinos en las capas de la piel, por ello es importante saber cuáles son y así evitar la exposición al sol cuando se estén ingiriendo.
A continuación conoce las categorías de medicamentos que pueden ocasionar efectos no deseables en el órgano más grande que poseemos.
Medicamentos que dañan la piel al exponerse al sol
Muchos medicamentos pueden provocar sensibilidad, irritación, desarrollo de lesiones cutáneas severas, alergias, quemaduras, inflamación de la dermis, apariencia eccematosa, erupciones, incluso pueden presentarse reacciones cruzadas entre fármacos similares y la sensibilización puede ser permanente.
Antibióticos
Las tetraciclinas como la doxiciclina, fluoroquinolonasm y ciprofloxacina pueden hacer que la piel reaccione con sensibilidad ante el sol.
Este grupo de antibióticos se utilizan para tratar muchas infecciones bacterianas. Las tetraciclinas funcionan al impedir que las bacterias produzcan las proteínas que necesitan para crecer y multiplicarse.
Otros antibióticos también son los que contienen sulfametoxazol trimetoprim y fluoroquinolonas, estos pueden causar fotosensibilidad, esto significa que pueden causar una reacción mayor a la luz del sol y provocar reacciones fototóxicas.
Antiinflamatorios
Los antiinflamatorios también pertenecen a uno de los medicamentos que pueden ocasionar reacciones en la barrera cutánea, estos medicamentos o sustancias sirven para reducir la inflamación, el enrojecimiento y el dolor en el cuerpo.
Los que pertenecen al del tipo no esteroides (AINE), como el ibuprofeno, diclofenaco, naproxeno, ketoprofeno, nabumetona, piroxicam y celecoxib, pueden aumentar el riesgo de sufrir quemaduras de sol, insolación, o ambas cosas y hacer que sea más sensible.
Antihistamínicos
Los antihistamínicos son medicamentos que bloquean la histamina, una sustancia química que el sistema inmunitario libera durante una reacción alérgica, estos se utilizan para tratar los síntomas de las alergias.
Algunos de ellos son la prometazina, cetririzina, desloratadina, fexofenadina, levocetirizina y loratadina. Este tipo de medicamentos son fotosensibilizantes.
Antidepresivos
Los antidepresivos son medicamentos recetados que ayudan a tratar la depresión y otros trastornos de salud mental, como la ansiedad. La ingesta de los siguientes puede ocasionar quemaduras ante el sol, también generar fotoalergía lo que ocasiona lesiones como eccema, esto causa inflamación, picazón, piel seca, escamas o ampollas.
La mayoría de los antidepresivos más nuevos pertenecen a uno de estos tres grupos:
- Inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS)
- Inhibidores de la recaptación de serotonina y norepinefrina (IRSN)
- Antidepresivos atípicos estos son medicamentos más nuevos que no encajan en las otras categorías.
Cuando alguno de estos no funcionan en el paciente, el profesional de salud sugiere algunos más antiguos como tricíclicos, tetracíclicos, e inhibidores de la monoaminooxidasa. Este último puede traer efectos secundarios graves que van más allá de las afectaciones en la piel.
Anticonceptivos
Algunas personas que toman anticonceptivos orales de estrógeno y progestina pueden volverse más sensibles al sol. Al alterar las hormonas del cuerpo estimulan las células que crean pigmentos de la piel y la melanina.
Al estar bajo los rayos del sol puede haber reacciones como melasma y manchas de sol que son sumamente difíciles de eliminar una vez que están presentes.
El estriadol, el levonogestrel y el etniliestradiol son algunas de las sustancias fotosensibles que pueden causar reacciones fototóxicas y fotoalérgicas.
Recomendaciones al ingerir medicamentos que afectan al estar en contacto con el sol o calor
Es indispensable que el médico tratante informe al paciente los tipos de reacciones que pueden aparecer en la piel en caso de presentar alguna manifestación o reacción secundaria y acudir a una consulta inmediata.
- Aplicar protección solar de elevado factor de protección, superior a 30 spf y adecuado para todo tipo de piel. No olvidar que la aplicación debe hacerse cada 2 a 3 horas.
- Evitar las horas de mayor exposición solar, o sea, entre las 10 am y las 4 pm, principalmente en verano.
- Hay que recordar que los daños provocados por el sol se acumulan y tienen memoria, así que se debe evitar la exposición a fuentes artificiales de radiación UV como el bronceado artificial.
- De igual manera intentar que la toma del fármaco sea por la noche siempre que sea posible.
- Utilizar ropa cómoda y holgada, con mangas largas y colores oscuros, incluso se puede hacer uso de prendas con telas especiales con protección solar para rayos UV.
- Ingerir alimentos altos en antioxidantes, tales como bayas (frutos del bosque como fresas, moras azules, zarzamoras, cerezas, frambuesas, etc.) plátanos, manzanas, cítricos, jitomates, pimientos, brócoli, zanahoria, entre otros.
- Al aparecer algún efecto secundario o reacción adversa se debe interrumpir la toma o disminuir la toma, y preguntar o acudir al médico.