Tratar de prevenir y/o combatir las líneas de expresión o arrugas no solo se trata de recurrir a productos especializados o tratamientos que ayuden a lograr el objetivo, sino también de evitar movimientos y expresiones faciales, así como algunas posturas que ayuden a no acelerar el proceso de envejecimiento natural.
Y es que, sabías que el realizar ciertos gestos, o sentarte de cierta forma, o dormir en una posición no adecuada puede hacer que aparezcan esas temibles líneas finas que queremos evitar a toda costa.
Esto es porque cada vez que utilizas un músculo facial, se forma un surco debajo de la superficie de la piel. Y, a medida que la piel envejece, pierde flexibilidad y ya no recupera su forma. Estos surcos se convierten en características permanentes del rostro, según especialistas de Mayo Clinic.
Es por eso que se recomienda no gritar ni gesticular en exceso porque eso hace que los gestos repetitivos se vayan marcando en el rostro. Tampoco entrecerrar los ojos y sonreír en demasía, ya que producen líneas finas y arrugas. También se prohíbe fruncir el entrecejo.
De hecho, los expertos recomienda mirarte en el espejo, hablar y ver cómo cambia tu rostro cuando hablas, para así evitar realizar expresiones faciales repetitivas o las siguientes posturas que pueden llevar a un aceleramiento del envejecimiento.
Problemas de visión
Aunque no lo creas, el padecer alguna afección en la vista puede contribuir a la aparición de líneas debido a que forzamos gestos de manera inconsciente. Un ejemplo de ello, es padecer fotosensibilidad por tener los ojos muy claros, o haber sido operado de miopía, o simplemente tener mala visión de cerca. Estos factores llevan a muchas personas a fruncir constantemente el ceño, provocando arrugas prematuras en el entrecejo.
Pero no te preocupes, hay manera de prevenirlo. Por un lado, usar lentes de sol cuando estás en el exterior, y otra: acudir con el oftalmólogo para tratar la afección. Cabe mencionar que otra de las opciones para mejorar las arrugas del entrecejo es someterte a un tratamiento de toxina botulínica que permite relajar el músculo.
Estar muy concentrado
Así como lo lees, esta postura promueve la aparición de arrugas, ya que cuando estás concentrado realizando una tarea como estudiar, trabajar, etc. son habituales estos dos gestos: fruncir la boca, que puede favorecer la formación temprana del código de barras y fruncir los músculos laterales de la cara, como una media sonrisa que favorece la formación temprana de las arrugas del surco nasogeniano.
Y es que todos podemos caer en estos gestos sin pensarlo, sin embargo debemos evitarlo realizando un truco sencillo que comparten los especialistas en el ramo: poner un pequeño trozo de algodón húmedo o un chicle entre el labio superior y la encía o en el lado de la boca que solemos fruncir.
Estrés
Este sentimiento de tensión física o emocional también afecta en la salud de la piel, provocándole arrugas debido a que, sin darte cuenta aprietas los dientes y con ello tu mandíbula esté apretada por mucho tiempo ocasionando un problema a nivel facial, ya que puede hacer que la cara adquiera una forma más cuadrada, al tener más volumen en la zona cercana al ángulo mandibular.
Además, contraes los músculos del mentón, lo que puede provocar arrugas en esa zona. Para prevenir estos gestos, se aconseja acudir con el odontólogo para que valore la necesidad de llevar una férula de descarga, que ayudará a relajar dichos músculos.
Mirar dispositivos móviles
Hay ciertas posturas como el estar viendo tu smartphones, tablet o laptop que pueden llevarte a que tu rostro comience a notarse con líneas de expresión o las temibles arrugas, y esto es por las repetimos con frecuencia. Por ejemplo, pasamos demasiado tiempo mirando al móvil, lo que nos lleva a forzar el cuello provocando que se acentúen las arrugas horizontales. Aquí, recomiendan intentar ver los dispositivos en visión frontal sin plegar el cuello.
Otra de las posturas que influye el envejecimiento del cuello es ver el teléfono celular en la cama. Lo ideal, es hacerlo sentados o colocar muchos almohadones de tal manera que tu postura sea más vertical y no se doble el cuello hacia abajo.
Dormir
Sabías que dormir de lado favorece la formación de arrugas verticales en la frente, en el entrecejo, en el surco nasogeniano, a veces en las mejillas e incluso en el escote. Para prevenirlo, los expertos sugieren dormir boca arriba y usar una almohada que sea más ancha en los laterales para que puedas encajar la cabeza. También es importante que la tela de la almohada no se arrugue mucho, porque esto hace que se marquen en el rostro.