Muchas personas se preguntan si son candidatos para la fisioterapia o si la fisioterapia puede ayudar a su dolencia. Para los fisioterapeutas, sin embargo, esta es una pregunta fácil de responder, pues explican que la mayoría de las personas pueden beneficiarse de la fisioterapia, ya sea que su condición varíe desde un simple esguince de tobillo hasta un trastorno neurológico complejo.
De hecho, TODOS pueden beneficiarse de la fisioterapia, incluso si no están lesionados. Los fisioterapeutas, como expertos en movimiento, pueden ayudarte a prevenir lesiones o enfermedades, pero son buscados principalmente para tratar dolencias en específico. ¿Sabes por qué?
¿Qué es la fisioterapia?
La fisioterapia es un método de tratamiento conservador que aborda el manejo, la curación y la prevención de lesiones y discapacidades, utilizando herramientas no invasivas y no médicas para ayudar a mejorar la función corporal total.
Los fisioterapeutas se enfocan en aliviar el dolor, promover la curación, restaurar la función y el movimiento, y la facilitación y adaptación asociadas con la lesión. La terapia también se enfoca en la ergonomía o el entrenamiento mecánico corporal, el estado físico y el bienestar.
Entonces, como puedes verlo, la fisioterapia puede desempeñar un papel en la vida de la mayoría de las personas. Independientemente de tu edad, si tiene un problema con la movilidad normal, puedes beneficiarte de trabajar con un fisioterapeuta para ayudarte a volver a tu función óptima.
Señales de que necesitas fisioterapia
Las razones más comunes por las que las personas buscan fisioterapia es la tendinitis o las distensiones musculares, las cuales conducen a dolor en los hombros, la espalda, la rodilla o la cadera. Estos músculos son los más usados y, por ende, más propensos a lastimarse o lesionarse.
1. El dolor muscular o articular no te deja estar activo
Ya sea que el dolor afecte las actividades cotidianas, como caminar, sentarse, pararse, subir escaleras, o que te impida realizar ciertos ejercicios o entrenamientos, la fisioterapia puede ayudarte a volver a moverte sin dolor.
El dolor es una señal de que algo anda mal. Cada vez que tengas dolor, especialmente si te obliga a cambiar tu estilo de vida, es mejor buscar ayuda para poder llegar al fondo de lo que lo está causando.
Y es que, el dolor no solo te impide estar activo. También puede conducir al uso indebido o al exceso de trabajo de otros músculos a medida que modificas tus movimientos para evitar el dolor, lo que podría causar nuevos problemas.
2. Tienes un dolor que no desaparece
Probablemente, hayas oído hablar de R.I.C.E. (reposo, hielo, compresión, elevación) la rutina estándar de remedios caseros para el dolor muscular o articular. Pero si estás tomando estos pasos y el dolor no desaparece, es hora de buscar ayuda. La mayoría de los casos de tendinitis y tensión muscular se tratan eficazmente con fisioterapia.
Si dejas que la causa subyacente de tu dolor persista, puede convertirse potencialmente en un problema más grande y crónico. Por ejemplo, si no se tratan, los dolores y molestias en los hombros pueden provocar desgarros del manguito de los rotadores o artritis degenerativa. El objetivo es intervenir temprano para que podamos evitar que la lesión progrese.
3. Estás listo para volver a hacer ejercicio después de una lesión
Un hueso roto. Una rotura de menisco. Un músculo o ligamento desgarrado. Se trata de lesiones graves que requieren mantener inmóvil la zona afectada durante semanas.
Sin embargo, una vez que estés listo para la actividad, pregúntale a su médico acerca de la fisioterapia... si no se te ha recomendado ya. Y es que, lo más probable es que una de estas lesiones más grandes provoque un cambio muy sutil en tu movimiento si no tienes cuidado.
Un fisioterapeuta puede ayudarte a asegurarte de que estás rehabilitando el área lesionada para que recuperes todo su potencial, reforzándola de manera efectiva; detectar signos de mal uso temprano, antes de que se conviertan en un hábito.
Esto es especialmente importante para las personas que hacen ejercicio con regularidad, que por cierto deberíamos ser todos nosotros.
Una pequeña desviación de movimiento que estás haciendo debido a la pérdida de rango de movimiento o fuerza podría volver a afectarte más tarde. No de inmediato, ni siquiera en seis meses o un año, pero tal vez dentro de 10 años después de haber favorecido las articulaciones y los músculos opuestos durante tanto tiempo que ahora están en riesgo de osteoartritis.
4. Quieres reducir el riesgo de dolores y molestias en el futuro
Mucha gente piensa que las articulaciones doloridas son el resultado inevitable de la edad, el desgaste natural que ocurre con el tiempo, pero no siempre es así. El dolor muscular y articular se puede prevenir, si sabes cómo moverte correctamente.
Muchas veces, pueden encontrar cosas simples que una persona está haciendo mal, porque probablemente las ha estado haciendo mal durante mucho tiempo. Al abordar esos errores temprano, pueden ayudar a evitar que conduzcan a problemas futuros.
La prevención ha sido un objetivo del campo de la fisioterapia durante los últimos diez años, más o menos: tener un impacto en la salud de la comunidad al intervenir en los patrones de movimiento de las personas antes de que surjan problemas crónicos. Los fisioterapeutas tienen formas simples de detectar una variedad de problemas, que incluyen:
- Músculos que estás usando en exceso
- Músculos que estás infrautilizando
- Desequilibrios musculares
- Tienes debilidad en ciertos grupos musculares
Estas son cosas que te impiden moverte de la manera más eficiente posible y, con el tiempo, pueden provocar problemas musculares o articulares crónicos que afectan tu vida. Una vez que se ha identificado una deficiencia, un fisioterapeuta puede recomendar ejercicios para ayudar a corregirla.
5. Quieres que un experto valore tu forma o mecánica
Cuando se trata de hacer ejercicio, es probable que en algún momento todos hayamos pensado: ¿Realmente lo estoy haciendo bien?
Y aunque ver a un fisioterapeuta acerca de tu forma durante un ejercicio de bajo impacto, como nadar o caminar, probablemente no sea necesario, podría serlo para los que son técnicamente más desafiantes, como CrossFit o levantamiento de pesas.
Los ejercicios y deportes que tienen muchos movimientos y músculos que se disparan al mismo tiempo pueden ser muy difíciles de hacer correctamente. A menos que tenga a alguien con un par de ojos muy hábiles observando tu técnica, puedes estar expuesto para una lesión o más.
Los ojos más hábiles que puedes encontrar a la hora de evaluar si te estás moviendo correctamente son los de un fisioterapeuta.
¿Lo sabías?
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