Si has notado que estás más irritable, tienes problemas para conciliar el sueño, te sientes cansado, has aumentado de peso en poco tiempo, tienes problemas menstruales, te han aparecido brotes de acné o eczema, mala memoria, dolores de cabeza frecuentes, cuello o mandíbula rígidos o tus problemas de salud han empeorado, seguramente la causa de alguno de estos síntomas, o de todos, es el estrés.
La pandemia por Covid-19 nos ha producido demasiado estrés a la mayoría de las personas. El temor y la ansiedad por el contagio pueden ser abrumadores y causar emociones muy fuertes, que el organismo resiente.
Nuestro cuerpo reacciona ante el estrés al liberar hormonas, las cuales hacen que el cerebro esté más alerta, causa que los músculos se tensionen y aumente el pulso. Cuando se tiene estrés crónico, el cuerpo se mantiene alerta, pero con el tiempo, esto le pone en riesgo de problemas de salud, como presión arterial alta, insuficiencia cardíaca, diabetes, pérdida o aumento de peso, depresión o ansiedad, o si ya se tiene una condición de salud, el estrés continuo la puede empeorar.
Tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS) como la Boston Public Health Commission ha alertado que cuando una enfermedad infecciosa como el Coronavirus está presente, hay temor y preocupación por la salud propia y la de nuestros seres queridos, cambian nuestros horarios para comer y dormir y es más frecuente el uso de alcohol, tabaco u otras drogas.
Por eso han lanzado diversos comunicados de lo que podemos hacer para ayudarnos o para apoyar a nuestros seres queridos que están padeciendo estrés bajo estas circunstancias.
1. MANTENERSE INFORMADO
Es muy importante estar al día en cuanto a los avances relacionados con COVID-19, consultando fuentes confiables y precisas de información relacionada con la salud. Pero también hay que tomar pausas, es decir, dejar de ver, leer o escuchar este tipo de noticias, incluidas las redes sociales por algunos días, pues escuchar reiteradamente sobre la pandemia puede causarnos angustia.
2. CUIDAR LA SALUD
Se recomienda respirar profundamente, hacer ejercicios de estiramiento o meditación. Tratar de seguir una dieta saludable, hacer ejercicio y dormir lo suficiente.
3. PIENSA POSITIVO
Centrarse en los aspectos positivos de la vida y las cosas que podemos controlar. Pensar en el futuro, en lo que puede pasar, solo nos traerá ansiedad y, finalmente, no está en nuestras manos.
4. REALIZA ACTIVIDADES RECREATIVAS
Practica actividades que disfrutes hacer y dedicar tiempo a la relajación. Puedes realizar ejercicios mentales, pues hay aplicaciones y videos de YouTube que te pueden ayudar.
5. SOCIALIZA
Es muy importante hablar con los allegados sobre nuestras preocupaciones y cómo nos sentimos. Cuando compartimos información precisa sobre la pandemia, puede ayudar a disminuir el estrés de las demás personas y nos permite conectarnos más con ellas. En estos momentos de distanciamiento social nada mejor que platicar por videollamada con la gente querida. Habla tus temores, miedos, sueños e incluso lo que deseas hacer después de que se acabe esta pandemia. Confía en la gente que te puede apoyar en esta situación. Lo importante es hablar y solicitar ayuda si la necesitas. Incluso, puedes pedir ayuda psicológica profesional para entrar en un estado de calma.
6. SIGUE TU RUTINA
Se recomienda mantener nuestros horarios, arreglarnos como siempre, levantarse a la misma hora de antes, continuar nuestras tareas. Es motivante vernos bien, experimentar con rutinas de belleza, peinados, rutinas de ejercicio, mejorar o redecorar la casa.
7. TOMA AIRE
Aprovecha los espacios al aire libre en tu casa. Sal a leer, escribir, pintar, opta por comer fuera o escucha música. El estar en un espacio al aire libre ayuda a despejarnos y a pensar en otras cosas.
8. ENFÓCATE
Finalmente, recuerda que la pandemia es una situación temporal y pasará, por lo que debemos tener todos los cuidados preventivos necesarios, pero sobre todo, la mejor actitud.