Por: Dra. Ainhoa de Federico
Cada vez vivimos en un mundo más conectado de forma digital y esta experiencia se ha acelerado desde el 2020, a raíz de los confinamientos y el desarrollo masivo del teletrabajo: Computadoras, tabletas, teléfonos smartphone han venido para quedarse y nos traen muchas oportunidades de flexibilidad, conexión, entretenimiento, aprendizaje, crecimiento y demás.
Sin embargo, con los aspectos positivos del uso masivo de las computadoras también se acentúan nuevos riesgos para la salud, en particular para la salud visual. La buena noticia, es que si tienes la información adecuada y la implementas en tu estilo de vida mediante buenos hábitos, puedes evitar estos riesgos ¡e incluso mejorar tu visión! y aquí la podrás encontrar.
Síntomas comunes por el uso de la pantalla
Podemos sufrir una o varios síntomas surgidas debido al uso de dispositivos electrónicos, y podemos ni siquiera darnos cuenta, entre ellas, se encuentran:
- Fatiga visual
Esta es una de las quejas más comunes entre quienes pasan largas horas frente a una pantalla. Los síntomas incluyen visión borrosa, sequedad ocular y dolores de cabeza.
- Síndrome del ojo seco
El parpadeo reducido al mirar pantallas puede causar sequedad ocular y molestias constantes.
- Miopía
El tiempo prolongado frente a dispositivos electrónicos está relacionado con un aumento en la prevalencia de la miopía, especialmente en niños y adolescentes.
- Presbicia
Mantener la mirada a las mismas distancias constantemente día tras día sin realizar cambios de foco acelera la rigidez del cristalino y los músculos ciliares, requiriendo el uso de gafas para leer más temprano.
- Síndrome de visión por computadora (CVS)
Esta es una combinación de problemas oculares relacionados con el uso de la computadora, que incluyen fatiga visual, sequedad ocular y dolores de cabeza.
Si has observado que te están sucediendo estas cosas, quieres prevenirlas, retardarlas o transformarlas, entonces presta atención a una serie de malos hábitos que seguramente tienes.
Malos hábitos frente a la computadora
Muchas personas son cada vez más conscientes de los efectos de la luz azul de las pantallas led en la fatiga visual, pero en realidad el uso de computadoras tiene diversos inconvenientes que incluyen otros aspectos:
- Mala postura
Muchas personas trabajan mal sentados, en una mesa o silla de altura incorrecta y con la cabeza inclinada frente a la computadora. Las malas posturas recurrentes delante de la computadora generan tensiones musculares en espalda, hombros, cervicales, incluso mandíbula que a la larga afectan a nuestra vista.
Es importante que nuestros pies tengan un buen apoyo, nuestras rodillas a 90 grados, nuestra postura esté erguida, nuestros hombros relajados y nuestra mirada vaya hacia delante, un poco hacia abajo de la altura de los ojos, de forma que nuestra cabeza se mantenga en el eje del cuerpo y manteniendo una distancia adecuada entre los ojos y la pantalla (aproximadamente a una distancia de un brazo extendido)
- Mala iluminación
Muchas veces el entorno de trabajo en el que se usa la computadora está mal iluminado, con insuficiente luz natural que llegue por una ventana por la que además se pueda mirar con facilidad a lo lejos. Es importante asegurar que el entorno de trabajo reciba suficiente luz natural y artificial sin que se generen reflejos.
- Tendencia a la mirada rígida
con frecuencia nos sentimos hipnotizados delante de una computadora y se nos olvida parpadear, respirar, permitir a los ojos mirar otras cosas y hacernos conscientes del entorno con nuestra visión periférica. Es posible poner algunos post-it en el marco de la computadora con recordatorios clave: ¡Respira! ¡Parpadea! ¡Mira lejos!
Buenos hábitos frente a la computadora
Te comparto una serie de buenos hábitos que recomiendo desde Volver a Ver Claro. Sirven para aliviar la tensión ocular, prevenir el desarrollo de síntomas visuales e incluso mejorar tu visión si ya comenzaste a tener problemas.
- Parpadeo frecuente
Poner atención consciente para parpadear con más frecuencia puede ayudar a mantener los ojos lubricados y reducir la sequedad ocular asociada con el uso de pantallas. Lo adecuado es parpadear espontáneamente cada 2-3 segundos. ¡Tus ojos lo agradecerán!
- Regla 20-20-20
Al menos cada 20 minutos, aparta la mirada de la pantalla y enfoca algo que esté a una distancia de 6 metros (20 piés) o más, durante al menos 20 segundos. Este ejercicio ayuda a relajar los músculos oculares y a prevenir la fatiga visual.
Por supuesto puedes también dejar que tus ojos miren más allá de tu computadora con más frecuencia, preferiblemente por una ventana, mejor aún si puede estar abierta, o al menos las esquinas más lejanas de la habitación.
- Masaje ocular
Con los ojos cerrados, realiza suaves movimientos circulares con las yemas de los dedos alrededor de los ojos. Esto alivia la tensión muscular que puede acumularse alrededor de los ojos y ayudar a estimular la circulación sanguínea. Es muy importante no ejercer ninguna presión directa sobre el globo ocular. ¡Verás lo agradable que es para tus ojos y tu cara!
- Ejercicios de enfoque
Alterna entre enfocar objetos cercanos y objetos distantes para ejercitar los músculos oculares y mejorar la capacidad de enfoque. Una forma muy sencilla de hacer esto de forma natural y divertida es jugar con alguna pelota que te invite a mirar su trayectoria lejos y cerca.
- Palmeo
Cubre los ojos con las palmas de las manos calientes y relájate durante unos minutos. Este ejercicio ayuda a reducir el estrés ocular, promueve la relajación de los músculos por el calor y descansa los ojos y sistema nervioso en la oscuridad. Incluso si lo practicas por uno a 5 minutos vas a notar la diferencia.
¡Adopta hábitos saludables!
Es fundamental adoptar hábitos saludables al utilizar dispositivos electrónicos y computadoras. Incorporar estos hábitos y ejercicios en tu vida diaria hará una gran diferencia, como lo ha hecho para tantas personas que han participado en Volver a Ver Claro.
¿Quién es Ainhoa de Federico?
Es Doctora, Profesora-Investigadora en la Universidad de Toulouse, Francia. Fundadora y ex Directora del Máster de Educación en Salud donde ha enseñado su Método Volver a Ver Claro por años y actualmente Directora del primer Diplomado Universitario del mundo para formar a Coaches Visuales: los profesionales de la visión natural en la Universidad Internacional en Desarrollo Humano y Liderazgo, México.
Su camino con la Visión Natural comenzó por sus propios problemas de la vista. Ha logrado liberarse de hasta seis síntomas de la vista, en tres ocasiones diferentes de su vida. Su Método Volver a Ver Claro ha recibido varios premios avalando su calidad y cuenta con un Doctorado Honoris Causa por su impacto social a nivel mundial con el Volver a Ver Claro online. Su deseo más profundo es, junto con su equipo, inspirar a 20 millones de personas a cuidar de sus ojos y mejorar su visión naturalmente