La medicina tradicional ha empleado la planta llamada Diente de León desde hace siglos para tratar diversas enfermedades, entre ellas para erradicar algunos virus. En medio de la pandemia, ha surgido la creencia de que aporta beneficios para prevenir el Covid-19.
Científicamente, esta planta se conoce como taraxacum, es una especie de flor perteneciente a la familia asteraceae y se cree que es originaria de ciertas regiones de Europa y América del Norte. Crece y se desarrolla con mucha facilidad en climas templados. Es sumamente apreciada por los agricultores, por su facilidad de reproducción y porque crece de manera rápida y efectiva.
PLANTA APRECIADA
El diente de león es una de las plantas más reconocidas por su belleza, pero pocas personas conocen sus múltiples propiedades y beneficios.
En la medicina tradicional, el diente de león destaca por brindar mejoría en trastornos digestivos, enfermedades del hígado, dolor articular, eccemas y erupciones o ciertas infecciones, sobre todo de tipo viral.
Las hojas de diente de león se pueden comer cocidas o crudas y sirven como una excelente fuente de vitaminas A, C y K, además contienen vitamina E, ácido fólico, pequeñas cantidades de vitaminas del grupo B, e inulina, el tipo de fibra más beneficioso para la salud de la microbiota intestinal.
Es rico en calcio y contiene luteolina, dos antioxidantes que protegen a los huesos del deterioro asociado a la edad, el cual es debido en gran parte al efecto de los radicales libres. Los antioxidantes anteriormente mencionados favorecen el buen funcionamiento del hígado y lo protegen contra el envejecimiento.
Igualmente, se ha comprobado que el zumo o concentrado de diente de león puede estimular la producción de insulina en personas con diabetes, manteniendo así unos niveles bajos de azúcar en sangre.
Siguiendo con las propiedades, el diente de león tiene efecto diurético, de esta forma ayuda también a reducir la presión arterial.
CONTRA VIRUS Y BACTERIAS
El diente de león también ha demostrado ser un tratamiento natural y eficaz para aquellas afecciones o enfermedades de la piel causadas por infecciones bacterianas y fúngicas, como el acné, por ser un potente desintoxicante, estimulante y antioxidante. Contiene niveles altos de hierro y un alto contenido de proteínas, por lo que puede ayudar a las personas anémicas.
Es totalmente comestible, por lo que también es muy apreciado como ingrediente culinario, pues suele ser añadido en ensaladas, sopas, vinos e infusiones. En muchos lugares, la raíz tostada del diente de león es utilizada como un sustituto del café.
En medio de la pandemia del Covid-19, algunas personas aseguran que por sus propiedades puede consumirse como infusión junto a la manzanilla y el té verde, formando la famosa fórmula del té anti-Covid. Sin embargo, no hay un estudio que avale esto, lo que si podemos es reconocer algunas de las propiedades de esta planta que, además de su belleza, nos pueden beneficiar en la vida diaria reforzando nuestro sistema inmunológico.