El caldo de pollo es uno de los alimentos que más disfrutamos en esta época de frío y en días lluviosos, pues además de ser delicioso, suele ser un gran remedio para revitalizar nuestro cuerpo de enfermedades como la gripe.
Jesús Cabriales, gerente de Servicios Técnicos de la Unidad de Avicultura de MSD Salud Animal en México, explicó el por qué incluir este platillo en nuestra dieta diaria, y su gran gran aporte en la salud.
“El pollo es una de las principales carnes consumidas en el mundo y al cocinarse en caldo, otorga una gran cantidad de vitaminas del complejo B al organismo. Consumir una ración de caldo de pollo cubre hasta el 93 por ciento de la ingesta diaria de esta vitamina. Además de aportar fósforo, que ayuda a la formación de huesos y dientes”, comentó.
Dijo que esta proteína animal, es un alimento importante para cada etapa de la vida. Por ejemplo, a los niños y adolescentes les aporta los nutrientes para el crecimiento, desarrollo y funcionamiento del organismo.
También, suministra grasas esenciales para formar los componentes de las membranas celulares y la función normal de la piel. Mientras las grasas del pollo ayudan a los adultos y personas de la tercera edad a proteger el corazón.
“Incluir pollo en nuestra dieta -al menos dos veces por semana-, es fundamental ya que no solo ofrece grandes beneficios a toda la familia, sino también es un producto seguro, pues cuenta con altos estándares de calidad y cuidado. Con nuestro apoyo, aseguramos animales sanos y personas sanas a través de alimentos seguros y confiables”, mencionó Cabriales.
Estos son algunos beneficios que aporta este platillo para mantenernos sanos, sobre todo ahora que estamos en medio de una pandemia.
1. Es saludable. La carne de pollo es una fuente importante de nutrientes como proteínas, vitaminas y minerales.
2. De fácil digestión. La mayor parte de la grasa del pollo se encuentra en la piel, por lo que al retirarla se reduce el consumo de grasa. Esto hace que la carne sea de fácil digestión y pueda ser consumida por personas de cualquier edad.
3. Reduce dolores articulares. Ayuda a disminuir el dolor y la inflamación articular, esto debido a que posee sulfato de condroitina, glucosamina y otros compuestos extraídos del cartílago del hueso de pollo.
4. Alivia el insomnio. Gracias a que contiene aminoácidos como la glicina, conocida por sus propiedades calmantes, nos ayuda a conciliar el sueño.
5. Tener huesos fuertes y sanos. Esto es, porque es rico en minerales como el calcio y el magnesio, nutrientes importantes para el fortalecimiento de los huesos.
6. Revitaliza el cuerpo. Su valor nutricional ayuda contra los síntomas de la gripa, enfermedades estomacales o dolores en las articulaciones. También beneficia a la salud visual, colabora en la obtención de energía, en la integridad del sistema nervioso, la producción de glóbulos rojos y a la salud de la piel, pelo y uñas.